Cultura
Irreverencia sinfónica en el Galerías
El grupo de talentos tapatíos presenta su visión sonora en el espectáculo 'Welcome to Magic 2.0'
GUADALAJARA, JALISCO (13/JUL/2014).- Versiones van, versiones vienen. En el mundo de la música, los homenajes y tributos a legendarias canciones y cantantes son infinitos. Algunos bien logrados, otros no tan bien aceptados.
Pero si trata de enaltecer y dar un nuevo sentido a las canciones, la Orquesta RCM (Revolucionamos la Cultura Musical) de Guadalajara levanta sus instrumentos para demostrar que el talento tapatío tiene el suficiente potencial para hacer de los icónicos temas un verdadero deleite cuando los guitarrazos se cambian por afinados violines y chelos.
Durante tres fechas la Orquesta RCM llega al Teatro Galerías para presentar ''Welcome to Magic 2.0'' (hoy), ''VideoGames & Anime. Live Stage'' (20 de julio) y ''Rock/PopEra Sinfónico'' (27 de julio), respectivamente en punto de las 18:00 horas.
Desde 2011, la Orquesta RCM marca una nueva forma de entender la música clásica, adaptando a versiones sinfónicas la música que se reproducen en la televisión, el cine y hasta los videojuegos.
Alberto de Loza, director de la orquesta, señala que para el público ajeno a este tipo de expresión musical es una verdadera sorpresa el encontrarse con canciones que creen conocer bien, pero en una versión sinfónica, como es el caso de Skyfall de la británica Adele, por ejemplo.
Los arreglos realizados por el director Alberto de Loza y Julio César Moreno, integran canciones pertenecientes a películas de Disney, entre ellas Toy Story, Up, Los Increíbles, Frozen, El Rey León, Hércules, La Bella y la Bestia, Cenicienta y La Sirenita para el espectáculo Welcome to Magic.
Para ''VideoGames & Anime. Live Stage'' se interpretan bandas sonoras de Tetris, Mario Bros y Zelda, y para anime series como Dragon Ball, Sailor Moon, Pokémon y Castillo Vagabundo.
Para la gala de ''Rock/PopEra Sinfónico'' se incluyen las canciones más características de Abba, Michael Jackson, Lady Gaga, Queen, The Beatles, Coldplay o David Guetta, entre otros exponentes de talla internacional, siempre con la intensión de que disfrute el público.
Buscan más apoyo
Actualmente la Orquesta RCM se integra por 50 músicos profesionales (de entre 19 y 70 años de edad) y una banda de rock para su respectiva interpretación, y su director, no descarta la posibilidad de explorar otros géneros musicales como la electrónica.
Pese a que las presentaciones del grupo musical han sido positivas en lo que respecta a la reacción del público, Alberto de Loza expresa que hace faltan apoyos para llevar este tipo de proyectos a más sectores de la sociedad, pues al menos, la Secretaría de Cultura de Jalisco, ha negado el apoyo a la orquesta para que ésta forme parte de la cartelera artística de la metrópoli tapatía. “A la Secretaría de Cultura no le interesan proyectos de esta índole, ella tiene a su orquesta y pretenden hacer siempre música escolástica y no acercar a otros públicos”.
De Loza aclara que no buscan la fortuna a través del Gobierno o la iniciativa privada, pero sí un empujón que los ayude a colocarse en más foros para que los ciudadanos experimenten otra cara de la sinfonía. “Necesitamos que el público comprenda a este tipo de proyectos, porque aquí las orquestas no las tomamos como un producto vendible”.
Pero si trata de enaltecer y dar un nuevo sentido a las canciones, la Orquesta RCM (Revolucionamos la Cultura Musical) de Guadalajara levanta sus instrumentos para demostrar que el talento tapatío tiene el suficiente potencial para hacer de los icónicos temas un verdadero deleite cuando los guitarrazos se cambian por afinados violines y chelos.
Durante tres fechas la Orquesta RCM llega al Teatro Galerías para presentar ''Welcome to Magic 2.0'' (hoy), ''VideoGames & Anime. Live Stage'' (20 de julio) y ''Rock/PopEra Sinfónico'' (27 de julio), respectivamente en punto de las 18:00 horas.
Desde 2011, la Orquesta RCM marca una nueva forma de entender la música clásica, adaptando a versiones sinfónicas la música que se reproducen en la televisión, el cine y hasta los videojuegos.
Alberto de Loza, director de la orquesta, señala que para el público ajeno a este tipo de expresión musical es una verdadera sorpresa el encontrarse con canciones que creen conocer bien, pero en una versión sinfónica, como es el caso de Skyfall de la británica Adele, por ejemplo.
Los arreglos realizados por el director Alberto de Loza y Julio César Moreno, integran canciones pertenecientes a películas de Disney, entre ellas Toy Story, Up, Los Increíbles, Frozen, El Rey León, Hércules, La Bella y la Bestia, Cenicienta y La Sirenita para el espectáculo Welcome to Magic.
Para ''VideoGames & Anime. Live Stage'' se interpretan bandas sonoras de Tetris, Mario Bros y Zelda, y para anime series como Dragon Ball, Sailor Moon, Pokémon y Castillo Vagabundo.
Para la gala de ''Rock/PopEra Sinfónico'' se incluyen las canciones más características de Abba, Michael Jackson, Lady Gaga, Queen, The Beatles, Coldplay o David Guetta, entre otros exponentes de talla internacional, siempre con la intensión de que disfrute el público.
Buscan más apoyo
Actualmente la Orquesta RCM se integra por 50 músicos profesionales (de entre 19 y 70 años de edad) y una banda de rock para su respectiva interpretación, y su director, no descarta la posibilidad de explorar otros géneros musicales como la electrónica.
Pese a que las presentaciones del grupo musical han sido positivas en lo que respecta a la reacción del público, Alberto de Loza expresa que hace faltan apoyos para llevar este tipo de proyectos a más sectores de la sociedad, pues al menos, la Secretaría de Cultura de Jalisco, ha negado el apoyo a la orquesta para que ésta forme parte de la cartelera artística de la metrópoli tapatía. “A la Secretaría de Cultura no le interesan proyectos de esta índole, ella tiene a su orquesta y pretenden hacer siempre música escolástica y no acercar a otros públicos”.
De Loza aclara que no buscan la fortuna a través del Gobierno o la iniciativa privada, pero sí un empujón que los ayude a colocarse en más foros para que los ciudadanos experimenten otra cara de la sinfonía. “Necesitamos que el público comprenda a este tipo de proyectos, porque aquí las orquestas no las tomamos como un producto vendible”.
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