Cultura

El sentido que nos toca

Para no pasar las de Caín

GUADALAJARA, JALISCO (10/NOV/2011).- Como dicen por ahí: El gusto se rompe en géneros.  Y si de géneros teatrales hablamos, en esta ciudad se rompía el gusto y luego no se le daba gusto a nadie. Ahora, eso es susceptible de pasar sin embargo, los directores, actores y nuevos productores buscan otros caminos para poder crear y atender al público, de manera congruente. Para ello, es menester embarcarse, cual bucaneros, en nuevas travesías. Algunos teatreros, quizá correspondiendo a su época, ya no se esperan a que determinado modelo de producción caduque o lo que es peor, que habiendo nunca funcionado esperan cual Penelopes los futuros prometedores que nunca llegarán. Sangre nueva, ganas de seguir adelante, corresponder a su época o despojarse de las malas compañías –literal- , llámese como se llame el ímpetu de inventar esquemas para sacar delante de  otra manera un trabajo en su conjunto es un tema bastante aplaudible.

La Casa Inverso en coordinación con Diversa Producciones, arrancó esta semana con el Encuentro de teatro pequeño formato.  Pequeños formatos para llegar a mayores públicos. Pequeños formatos para resolver la producción. Pequeños formatos, dígase, para hacer grandes cosas. En esta casita, ubicada en el mero centro de la ciudad, desfilarán grupos –según dice su programa- de Guanajuato, Tamaulipas, Durango y varios de aquí de Guadalajara. Ayer por ejemplo el director  El Mosco presentó una lectura dramatizada, también estará la puesta en escena de Sofía Olmos Un tutú muy apretado y Estación Juárez, una obra de Teófilo Guerrero. Particularmente aplaudo la iniciativa y hacerle caso a esa necesidad de autogestión. Nadie hará las cosas que los teatristas no hagan (mos) por sí mismos, ni una institución, ni los Reyes Magos, ni las becas. Quizá es en tiempos de crisis, cuando los procesos creativos se agudizan. Para que exista la salud , debe de haber una acción correspondente con una profunda necesidad. Y tienen que ser verdaderas, ambas. Me preguntaba yo un día y quizá mi pregunta tenga un particular enfoque. Por qué en una ciudad donde ha existido una sólida tradición dancística que se evidencia en escuelas y compañías, la necesidad expresiva no cubierta de creativos específicos los orilló a buscar espacios alternativos, hacer obras de mini formato con poderosos niveles poéticos, hablo de la bailarina Bety Cruz, por ejemplo. Qué pasa con los actores, me preguntaba. Con los grupos. Bajo qué sombra queremos seguir estando, cuáles eran o son nuestras ataduras.

Es importantísimo cómo se ha impulsado el teatro de Guadalajara, ahora unos autogestionan, luego otros se pusieron interdisciplinarios, multidisciplinarios y ahora Casa Inverso se arma una serie de obras chiquitas.  Salud por la salud y por el ciclo de pequeños formatos. Santa Mónica 256.
Síguenos en

Temas

Sigue navegando