Cultura

El público llena las instalaciones de Expo Shanghai en la primera jornada

Se calcula que acudirán hoy más de 300 mil personas

SHANGHAI,CHINA (1/MAY/2010).- La "Exposición Universal Shanghai 2010" abrió por primer día sus puertas al público, que desde primera hora de la mañana formaba largas colas para acceder a los pabellones, a los que se calcula que acudan hoy más de 300 mil personas, con todas las entradas disponibles vendidas.

El presidente de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh) y "número cuatro" de la jerarquía comunista, Jia Qinglin, y el presidente de la Oficina Internacional de Exposiciones ( BIE), Jean-Pierre Lafon, apadrinaron la ceremonia celebrada esta mañana en la entrada del recinto, que se ubica a orillas del río Huangpu.

Ambos pulsaron el botón que abrió el acceso a los 5,28 kilómetros cuadrados que ocupa esta exposición universal, una superficie récord para este tipo de eventos.

La exposición quiere "reflejar la cristalización del conocimiento en la construcción urbana y la visión de una vida futura mejor", aseguró Jia en su discurso, recordando el lema "Una ciudad mejor, una vida mejor" que define el evento.

El español Vicente González Loscertales, secretario general del BIE, hizo votos para que "Expo 2010" sea la exposición "más espléndida e inolvidable" que se ha realizado.

En el exterior, numeroso público aguardaba el momento de la apertura de las puertas para gozar del privilegio de ser los primeros de los 70 millones de visitantes que la exposición mundial prevé tener durante sus seis meses de actividades.

A pesar de que los organizadores temían que un 10 por ciento de los pabellones no estarían listos para la inauguración, el último acelerón de las obras permitió llegar a todos y sólo algunas decoraciones interiores y exteriores quedaron pendientes.

Las colas, ya protagonistas durante los ensayos previos, también fueron de lo más destacado del primer día, especialmente en los pabellones con más expectación, como los de China y Estados Unidos.

Según la televisión estatal CCTV, la espera para entrar en el recinto local, una espectacular pirámide roja invertida, superaba las cinco horas, por lo que los propios periodistas pedían a los visitantes que optasen por acercarse "a otros pabellones, también muy interesantes".

Un visitante chino, de nombre Li, explicó  su deseo de visitar el pabellón chino durante el día de hoy, pero confesó que había empezado por los pabellones de Oceanía y África "porque hay menos gente".

El pabellón de España, uno de los más fotografiados por su cubierta exterior de mimbre, también fue uno de los puntos concurridos, con público esperando dos horas la apertura oficial, según confirmaron fuentes de la organización española.

Lo corroboraron también dos chicas, Mao Jia y Xie Xiaoyi, visitantes de 26 y 24 años, que aseguraron que el pabellón español era el que más les había gustado de entre los varios que habían curioseado.

"El contenido es interesante, tiene un bebé gigante muy entrañable (el muñeco Miguelín, de seis metros y medio y creación de la cineasta Isabel Coixet), pero la única pega es que dentro no hay aire acondicionado y hace mucho calor", explicaron.

Y es que el intenso calor y las grandes distancias del recinto, de un tamaño equivalente a mil campos de fútbol, se hicieron notar, con los visitantes buscando las zonas de sombra y descanso entre pabellón y pabellón.

La "Expo Shanghai" tiene ya el récord de participantes, con 189 países y 50 organizaciones internacionales, y ahora afronta el reto de ser la más visitada, que logrará si se cumplen las previsiones de los organizadores, que calculan recibir, por lo menos, 70 millones de personas.

Anoche, un espectáculo de luces y fuegos artificiales iluminó Shanghai, que vio navegar por sus aguas cientos de barcos portando las banderas de todos los países participantes, fue la presentación al mundo del acontecimiento, con el rostro del líder chino Hu Jintao, quien se encargó de pronunciar las palabras que daban comienzo formalmente la cita.
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