Cultura
El apocalipsis está de moda porque no creemos en el futuro
‘¿El fututo existe todavía?’, fue la pregunta que los escritores Emilio Bueso, Antonio Malpica y Alberto Chimal intentaron responder en el marco de la FIL
GUADALAJARA, JALISCO (04/DIC/2015).- La distopía está de moda porque las personas ya no creemos en el futuro, coincidieron los escritores de ciencia ficción Emilio Bueso, Antonio Malpica y Alberto Chimal durante la mesa “¿El fututo existe todavía?” en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (
FIL).
“El signo de interrogación en el nombre de esta mesa significa desolación”, dijo Malpica. Chimal afirmó que la actual tendencia al pesimismo en la ciencia ficción es sintomática. “Es signo de que nos preocupa, incluso de que no estamos muy contentos con el presente. Por eso nos encanta cuando todo se acaba, como una fantasía liberadora”, afirmó. El escritor mexicano puso como ejemplo la exitosa serie “The walking dead”.
Chimal mencionó que el término “ciencia ficción” fue inventado en 1926 por un editor luxemburgués. Hablaba de una ciencia que prometía un futuro mejor. Sin embargo, después de la segunda guerra mundial esa promesa se vino abajo. “Las personas se dieron cuenta de que las grandes tecnologías podían ocasionar la muerte de miles de personas”, dijo el escritor mexicano.
A partir de entonces supimos que “la historia, si es que tiene una forma, no es una escalera hacia arriba”, afirmó Chimal.
“Vengo de un país que lleva en crisis ocho años. El futuro no es como pensábamos, es mucho más feo”, afirmó el español Bueso. Chimal mencionó la situación actual de México.
Malpica recordó una publicación de Facebook que hace un año, como suele suceder por estas fechas, decía “El fin del mundo ya tiene nueva fecha”. La nota estaba acompañada de una foto de una profetiza rusa ciega, con el dedo levantado “como diciendo -ya se los cargó el payaso-. Esas cosas sí que tienen mucho jale”, dijo el novelista y dramaturgo mexicano.
“Si no han leído el Apocalipsis de San Juan, no importa, está en todas partes. Es parte de nuestro inconsciente colectivo”, afirmó Chimal.
“Hasta la versión más optimista tiene que recordar que el hombre es bueno y es malo. El hombre de 2015 es el mismo de 1945 y creo que seguirá siendo el mismo en 2070”, concluyó Malpica.
EL INFORMADOR / SUSANA DEL REAL PONCE
“El signo de interrogación en el nombre de esta mesa significa desolación”, dijo Malpica. Chimal afirmó que la actual tendencia al pesimismo en la ciencia ficción es sintomática. “Es signo de que nos preocupa, incluso de que no estamos muy contentos con el presente. Por eso nos encanta cuando todo se acaba, como una fantasía liberadora”, afirmó. El escritor mexicano puso como ejemplo la exitosa serie “The walking dead”.
Chimal mencionó que el término “ciencia ficción” fue inventado en 1926 por un editor luxemburgués. Hablaba de una ciencia que prometía un futuro mejor. Sin embargo, después de la segunda guerra mundial esa promesa se vino abajo. “Las personas se dieron cuenta de que las grandes tecnologías podían ocasionar la muerte de miles de personas”, dijo el escritor mexicano.
A partir de entonces supimos que “la historia, si es que tiene una forma, no es una escalera hacia arriba”, afirmó Chimal.
“Vengo de un país que lleva en crisis ocho años. El futuro no es como pensábamos, es mucho más feo”, afirmó el español Bueso. Chimal mencionó la situación actual de México.
Malpica recordó una publicación de Facebook que hace un año, como suele suceder por estas fechas, decía “El fin del mundo ya tiene nueva fecha”. La nota estaba acompañada de una foto de una profetiza rusa ciega, con el dedo levantado “como diciendo -ya se los cargó el payaso-. Esas cosas sí que tienen mucho jale”, dijo el novelista y dramaturgo mexicano.
“Si no han leído el Apocalipsis de San Juan, no importa, está en todas partes. Es parte de nuestro inconsciente colectivo”, afirmó Chimal.
“Hasta la versión más optimista tiene que recordar que el hombre es bueno y es malo. El hombre de 2015 es el mismo de 1945 y creo que seguirá siendo el mismo en 2070”, concluyó Malpica.
EL INFORMADOR / SUSANA DEL REAL PONCE
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