Cultura
El Despertador Americano, incompleto en México
La colección original de los siete ejemplares de la publicación insurgente no se encuentra en los archivos históricos del país
Durante años, los investigadores creyeron que la séptima entrega era una leyenda. En la década de los años cincuenta del siglo pasado, el historiador José Cornejo Franco fotografió el escrito en Chile.
Actualmente México no cuenta con un ejemplar original del número siete de El Despertador Americano, la colección completa se encuentra en Chile y es considerada uno de los tesoros nacionales; sin embargo, durante la Feria Internacional del Libro de Guadalajara en 1999 estuvo expuesta por primera vez en territorio mexicano.
El periódico insurgente ha sido reproducido en su totalidad en ediciones facsimilares y en libros que señalan la importancia de este órgano de difusión. En el marco de los festejos de 2010, los investigadores consideran necesario presentar los textos que integran El Despertador Americano y a su editor Francisco Severo Maldonado. Al respecto, los historiadores Carlos Fregoso Gennis y Alfredo Ávila destacan la relevancia del impreso y su papel durante el movimiento gestado en 1810.
El precio del impreso equivale a 15 dólares
Las ideas difundidas en El Despertador Americano llegaron a diversos puntos de México y del extranjero, pese a dos factores: un limitado tiraje y una corta vida.
A su llegada a Guadalajara, Miguel Hidalgo y Costilla le encargo a otro sacerdote, Francisco Severo Maldonado y Ocampo (Nayarit, 1775-Jalisco, 1832), la edición de una publicación que presentara las ideas insurgentes.
Severo Maldonado, conocido por el Cura de Dolores, ya entonces tenía fama de traductor, pues dominada entre cuatro y cinco idiomas, sabía de las ideas liberales francesas y las estadounidenses, y era “un personaje revolucionario”, expresa el profesor de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Carlos Fregoso Gennis, quien gestionó la presentación de la colección original durante la FIL y es autor de El Despertador Americano, primer periódico insurgente.
En la ciudad, en la finca conocida como Casa de los Perros -la actual sede Museo de Periodismo y las Artes Gráficas de Guadalajara- comenzó la edición del periódico insurgente, cuyo primer número circuló el jueves 20 de diciembre de 1810.
El Despertador Americano era una publicación pequeña de aproximadamente 14 centímetros de ancho por 21 de largo. El número uno se integró por 10 planas.
El periódico estaba dirigido “a todo los habitantes de América”, como se cita en cada una de las siete entregas. Adquirir un ejemplar entonces, según cálculos de Fragoso Gennis, le costaba a una persona de 1810 dos reales, que alcanzaban para comprar algunos costales de fríjol, cantidad que ahora equivaldría a 15 dólares.
“Era un precio exorbitante y se acababa”, expresa el historiador de la UdeG y añade que la cifra también se marcaba debido a las dificultades que implicaba su edición.
El tiraje de El Despertador Americano era de dos mil ejemplares, cuyo alcance era relevante para el movimiento gestado en 1810.
El último número salió a las calles el jueves 17 de enero de 1811, justo el día de la Batalla del Puente de Calderón, cuando el Ejército Realista venció a los hombres de Hidalgo y Costilla. Según el investigador, uno de los motivos de que no se haya conservado dicho ejemplar es que con la victoria de Callejas se quemaron varios de los impresos.
Las ideas y su relevancia
Aunque el nombre de El Despertador Americano es común para la mayoría, no así la información presentada. Las notas y los textos son expuestos este año en una reciente publicación de la colección Summa Mexicana del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), cuyo prólogo es autoría de Alfredo Ávila, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien explica que se trata de un periódico que impreso en un libro no tiene más de 77 páginas.
Agrega que este periódico tuvo una vida corta de dos meses. “Salieron pocos números, aunque sabemos que el tiraje llegó a conocerse más allá de la ciudad de Guadalajara. Es una publicación de fácil lectura y el lenguaje es coloquial, que ofrece editoriales y análisis”.
El historiador de la UNAM comenta que los textos analizaban la condición de la Nueva España e incluso hacían referencia a Estados Unidos como un país cuyo ejemplo podía servir para los habitantes de México.
Alfredo Ávila puntualiza que en esas páginas, Severo Maldonado quería mostrar que “a Estados Unidos la independencia le ha traído enormes ventajas y estaba convencido de que las riquezas de la Nueva España eran muy superiores a las del país vecino”.
Además, en la serie de editoriales y análisis se incluyeron notas sobre el avance de las fuerzas. En ocasiones aumentaban las cifras y los logros con la intención de que siguiera el movimiento.
Para Fregoso Gennis, El Despertador Americano es el periódico insurgente y “es el primero de un movimiento insurgente en América que luchaba por la emancipación”.
EL INFORMADOR/Mayra Torres de la O
El editor de los insurgentes y de los realistas
Francisco Severo Maldonado es una de las figuras claves que deben estudiarse y presentarse en los festejos del Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución Mexicana. Aunque se le considera un hombre polémico, los estudiosos de su obra señalan que nunca se contradijo en sus textos, pese a que fue el editor de tres periódicos de causas distintas.
Con la llegada de Hidalgo a Guadalajara, Severo Maldonado se instaló en la cuidad para ofrecer sus servicios a la causa emancipadora y se encargó de la edición de El Despertador Americano. Correo político económico de Guadalajara.
A la derrota de los insurgentes fue obligado a dirigir la publicación de los realistas llamado El telégrafo de Guadalajara.
“Aunque tenía que retractarse de lo publicado en El Despertador Americano, cuando lo leemos nos damos cuenta que Severo Maldonado mantiene las mismas ideas”, afirma Alfredo Ávila.
“Severo Maldonado es uno de los personajes más controvertidos de la guerra de Independencia porque dirigió El Despertador Americano (insurgente), El telégrafo de Guadalajara (realista) y El fanal del Imperio (imperialista y a favor de Iturbide) y eso no se lo perdonan muchos, pero sí se analizan los documentos, nunca se contradijo”, puntualiza Fregoso Gennis.
El profesor de la UdeG destaca que debería reconocerse a Severo Maldonado como “uno de los ideólogos más sólidos de la lucha insurgente”.
Recomendaciones
El Despertador Americano, prólogo de Alfredo Ávila. Sumna Mexicana Conaculta.
El Despertador Americano, primer periódico insurgente de América, de Carlos Fregoso Gennis. Universidad de Guadalajara
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