Cultura
Diez años y MAZ arte
El museo de arte contemporáneo, ubicado en el Centro de Zapopan, festeja una década de actividades
ZAPOPAN, JALISCO (15/AGO/2012).- El Museo de Arte de Zapopan (MAZ) abrió sus puertas un viernes 2 de agosto del año 2002. En los espacios del edificio diseñado ex profeso por el taller de arquitectura Toussaint y Orendáin, se exhibieron por primera vez las obras de grandes artistas.
Auguste Rodin, Fernando Botero, Joan Miró, Andy Warhol, Pablo Picasso y José Luis Cuevas, fueron algunos de los expositores de esa noche gracias a los préstamos del Museo Soumaya, el Rufino Tamayo y la Casa Lamm de la Ciudad de México. Además de exhibir un conjunto de esculturas, el tapatío Juan Soriano estuvo presente para apadrinar el nuevo recinto.
Se han cumplido ya 10 años desde esa fecha y el museo situado en el Centro Histórico de Zapopan tiene mucho que celebrar: cientos de exposiciones de artistas locales, nacionales e internacionales; varios miles de visitantes cada año; y una importante cantidad de actividades culturales, como ciclos de cine y literatura, talleres, conferencias, encuentros de poesía y actividades extra-muros.
En el festejo de una década de vida, que se llevará a cabo mañana 16 de agosto, se proyectan distintas actividades. Primero (19;00 horas), un diálogo en salas con el pintor sonorense Enrique Oroz, cuya exposición A Mano Armada permanece en los muros del MAZ desde mayo.
A las 20:00 horas se invitará a los asistentes a pasar al auditorio Juan José Arreola, donde la actual directora, Alicia Lozano, moderará una charla entre el primer director, Carlos Beltrán, el titular de cultura de Zapopan, Guillermo Gómez Mata, los arquitectos Enrique Toussaint y Emilia Orendáin, y otras personalidades de la cultura local como Arturo Camacho, Alfredo Sánchez, Carlos Ashida y Juan José Doñán.
El brindis posterior se acompañará de la música de Naranjito Blues y la selección del DJ Fernando Dimare.
Una historia en tres partes
Según la actual directora, Alicia Lozano, esas cuatro exposiciones inaugurales —Rodin en México; Arte del Siglo XX, Caminos de Libertad; México y Sus Imágenes; y Obra Escultórica Urbana de Juan Soriano— definieron desde entonces el perfil del MAZ: un museo avocado a la divulgación del arte contemporáneo.
La tarea fue iniciada por Carlos Beltrán Briseño, quien dirigió el MAZ de 2002 al 2004. Beltrán, sin embargo, se vio obligado a abandonar el cargo por enfrentar acusaciones y una detención por peculado durante su administración del Museo Regional de Guadalajara en 1999. Después de pagar una fianza de 40 mil pesos, el funcionario recuperó su libertad y continuó su trabajo en el museo en calidad de asesor.
A pesar de que Beltrán estará presente en el festejo de 10 años del MAZ, este medio no logró establecer contacto con él. Bajo su dirección, el MAZ realizó en su primer año de vida, 16 exposiciones y 126 actividades para recibir a cerca de 40 mil visitantes.
Para Ricardo Duarte Méndez, posterior titular del MAZ, la gestión de Carlos Beltrán fue fundamental. Su gran contribución, dijo, fue la de “armar un currículo que le diera esa calidad al espacio museístico y sumar proyectos a la programación que lo consolidaron como un espacio profesional y confiable”. Además —afirmó Duarte— Beltrán formó un excelente equipo de profesionales: “Uno de los mejores con los que a mí me ha tocado trabajar”.
La gestión de Duarte Méndez —de enero de 2007 a diciembre de 2009— buscó continuar con un proyecto en el que, según las propias palabras del actual director de Cultura Tonalá, “se podía visualizar el acontecer del mundo de las artes visuales en otras latitudes, y al mismo tiempo se convertía en una espejo en el cual nos podíamos mirar e identificar a través de los creadores locales”.
En tres años, Duarte dirigió la realización de 78 exposiciones, de las cuales 45 fueron albergadas en las salas del MAZ, y 33 llegaron a espacios extramuros como en la Reja de Museo Trompo Mágico.
De su gestión, Duarte destacó el mayor impulso a artistas locales, así como el desarrollo de proyectos curatoriales en tres ejes —artes plásticas, fotografía y arquitectura y diseño— “que respondieran tanto al discurso de los creadores como a establecer un diálogo con la comunidad”.
El museo, hoy
Con la llegada de Alicia Lozano en marzo de 2010, el Museo de Arte de Zapopan entró a su tercer y actual periodo, mismo que llegará a su fin el próximo septiembre cuando Lozano deje el puesto directivo.
En su opinión, el MAZ se encuentra en “un momento muy interesante y de buena salud, porque finalmente ha logrado posicionarse a nivel nacional en el circuito del arte contemporáneo, además de ganar prestigio a nivel internacional”. Esto último explicó, con exposiciones como Epílogo (diciembre de 2010) que, bajó la curaduría de Cristian Silva, reunió obra de artistas reconocidos en todo el orbe.
Sobre la disminución del número de proyectos durante su gestión, Lozano afirmó que decidió privilegiar la calidad sobre la cantidad. “Todas las exposiciones que hicimos tuvieron un buen nivel y son muy caras, así que me parece que no vale la pena dejarlas una o dos meses, sino tres o cuatro, que es el tiempo que duran en otros museos del mundo”.
Otra muestra de la solidez del museo, según su directora, es que una exposición curada ‘en casa’ como es la Antológica de Martha Pacheco, recientemente se llevó y se exhibe actualmente, en el Centro de las Artes de Monterrey.
Además, dijo Lozano, el proyecto arquitectónico de ampliación del museo para construir una mediateca en el área de la azotea, ya fue aprobado. Se firmó un convenio con el Programa de Apoyo a la Infraestructura Cultural de los Estados (PAICE) de CONACULTA, y sólo falta recibir los recursos para comenzar la construcción. Evidentemente, agregó, la siguiente administración tendrá que encargarse de conseguir el equipo.
De las mayores dificultades de su gestión, Alicia Lozano subrayó el hecho de “bajar a las salas y verlas solas: eso me ponía muy mal, porque uno trabaja con el dinero de todos y quisiera que la gente viera cómo se está gastando y que fuera más exigente”, afirmó la directora.
MAZ por hacer
“Sería falso decir que tenemos el museo que hemos soñado”, afirmó Lozano, consciente de que todavía hay carencias y proyectos en los que la próxima administración debe prestar particular atención. Por ejemplo: fortalecer el área de servicios educativos.
En esto coincidió Ricardo Duarte, ya que en su opinión, lo que sucede en muchos espacios y proyectos que trabajan en torno al arte contemporáneo es que “se convierten en soliloquios entre el curador y el director”, afirmó, de ahí que para “lograr una mayor comprensión y un crecimiento del arte contemporáneo, se debe trabajar en la formación de públicos”.
Duarte reflexionó sobre la importancia de mantener un diálogo constante con la comunidad a través de un número importante de exposiciones, ya que “de nada sirve tener un extraordinario museo de calidad muy bien iluminado, cuando las afluencias están bajando”, dijo.
Alicia Lozano, por su parte, afirmó que valorar y divulgar la labor de los museos debería ser una tarea compartida entre el Estado, el ayuntamiento y el sistema educativo, “porque las experiencias estéticas que se generan pueden ser incluso más fuertes que una clase de historia”.
A la lista de cosas que le gustaría ver en un futuro en el MAZ, Ricardo Duarte agregó una fundación que contribuya a la procuración de fondos, así como la creación de una colección representativa del museo.
INVITACIÓN
De fiesta
La cita para festejar con el Museo de Arte de Zapopan sus primeros diez años de vida, es el jueves 16 de agosto a partir de las 19:00 horas.
La última exposición de la gestión de Alicia Lozano, será la del monero tapatío José Ignacio Solórzano, JIS. Se inaugurará a finales de septiembre.
Auguste Rodin, Fernando Botero, Joan Miró, Andy Warhol, Pablo Picasso y José Luis Cuevas, fueron algunos de los expositores de esa noche gracias a los préstamos del Museo Soumaya, el Rufino Tamayo y la Casa Lamm de la Ciudad de México. Además de exhibir un conjunto de esculturas, el tapatío Juan Soriano estuvo presente para apadrinar el nuevo recinto.
Se han cumplido ya 10 años desde esa fecha y el museo situado en el Centro Histórico de Zapopan tiene mucho que celebrar: cientos de exposiciones de artistas locales, nacionales e internacionales; varios miles de visitantes cada año; y una importante cantidad de actividades culturales, como ciclos de cine y literatura, talleres, conferencias, encuentros de poesía y actividades extra-muros.
En el festejo de una década de vida, que se llevará a cabo mañana 16 de agosto, se proyectan distintas actividades. Primero (19;00 horas), un diálogo en salas con el pintor sonorense Enrique Oroz, cuya exposición A Mano Armada permanece en los muros del MAZ desde mayo.
A las 20:00 horas se invitará a los asistentes a pasar al auditorio Juan José Arreola, donde la actual directora, Alicia Lozano, moderará una charla entre el primer director, Carlos Beltrán, el titular de cultura de Zapopan, Guillermo Gómez Mata, los arquitectos Enrique Toussaint y Emilia Orendáin, y otras personalidades de la cultura local como Arturo Camacho, Alfredo Sánchez, Carlos Ashida y Juan José Doñán.
El brindis posterior se acompañará de la música de Naranjito Blues y la selección del DJ Fernando Dimare.
Una historia en tres partes
Según la actual directora, Alicia Lozano, esas cuatro exposiciones inaugurales —Rodin en México; Arte del Siglo XX, Caminos de Libertad; México y Sus Imágenes; y Obra Escultórica Urbana de Juan Soriano— definieron desde entonces el perfil del MAZ: un museo avocado a la divulgación del arte contemporáneo.
La tarea fue iniciada por Carlos Beltrán Briseño, quien dirigió el MAZ de 2002 al 2004. Beltrán, sin embargo, se vio obligado a abandonar el cargo por enfrentar acusaciones y una detención por peculado durante su administración del Museo Regional de Guadalajara en 1999. Después de pagar una fianza de 40 mil pesos, el funcionario recuperó su libertad y continuó su trabajo en el museo en calidad de asesor.
A pesar de que Beltrán estará presente en el festejo de 10 años del MAZ, este medio no logró establecer contacto con él. Bajo su dirección, el MAZ realizó en su primer año de vida, 16 exposiciones y 126 actividades para recibir a cerca de 40 mil visitantes.
Para Ricardo Duarte Méndez, posterior titular del MAZ, la gestión de Carlos Beltrán fue fundamental. Su gran contribución, dijo, fue la de “armar un currículo que le diera esa calidad al espacio museístico y sumar proyectos a la programación que lo consolidaron como un espacio profesional y confiable”. Además —afirmó Duarte— Beltrán formó un excelente equipo de profesionales: “Uno de los mejores con los que a mí me ha tocado trabajar”.
La gestión de Duarte Méndez —de enero de 2007 a diciembre de 2009— buscó continuar con un proyecto en el que, según las propias palabras del actual director de Cultura Tonalá, “se podía visualizar el acontecer del mundo de las artes visuales en otras latitudes, y al mismo tiempo se convertía en una espejo en el cual nos podíamos mirar e identificar a través de los creadores locales”.
En tres años, Duarte dirigió la realización de 78 exposiciones, de las cuales 45 fueron albergadas en las salas del MAZ, y 33 llegaron a espacios extramuros como en la Reja de Museo Trompo Mágico.
De su gestión, Duarte destacó el mayor impulso a artistas locales, así como el desarrollo de proyectos curatoriales en tres ejes —artes plásticas, fotografía y arquitectura y diseño— “que respondieran tanto al discurso de los creadores como a establecer un diálogo con la comunidad”.
El museo, hoy
Con la llegada de Alicia Lozano en marzo de 2010, el Museo de Arte de Zapopan entró a su tercer y actual periodo, mismo que llegará a su fin el próximo septiembre cuando Lozano deje el puesto directivo.
En su opinión, el MAZ se encuentra en “un momento muy interesante y de buena salud, porque finalmente ha logrado posicionarse a nivel nacional en el circuito del arte contemporáneo, además de ganar prestigio a nivel internacional”. Esto último explicó, con exposiciones como Epílogo (diciembre de 2010) que, bajó la curaduría de Cristian Silva, reunió obra de artistas reconocidos en todo el orbe.
Sobre la disminución del número de proyectos durante su gestión, Lozano afirmó que decidió privilegiar la calidad sobre la cantidad. “Todas las exposiciones que hicimos tuvieron un buen nivel y son muy caras, así que me parece que no vale la pena dejarlas una o dos meses, sino tres o cuatro, que es el tiempo que duran en otros museos del mundo”.
Otra muestra de la solidez del museo, según su directora, es que una exposición curada ‘en casa’ como es la Antológica de Martha Pacheco, recientemente se llevó y se exhibe actualmente, en el Centro de las Artes de Monterrey.
Además, dijo Lozano, el proyecto arquitectónico de ampliación del museo para construir una mediateca en el área de la azotea, ya fue aprobado. Se firmó un convenio con el Programa de Apoyo a la Infraestructura Cultural de los Estados (PAICE) de CONACULTA, y sólo falta recibir los recursos para comenzar la construcción. Evidentemente, agregó, la siguiente administración tendrá que encargarse de conseguir el equipo.
De las mayores dificultades de su gestión, Alicia Lozano subrayó el hecho de “bajar a las salas y verlas solas: eso me ponía muy mal, porque uno trabaja con el dinero de todos y quisiera que la gente viera cómo se está gastando y que fuera más exigente”, afirmó la directora.
MAZ por hacer
“Sería falso decir que tenemos el museo que hemos soñado”, afirmó Lozano, consciente de que todavía hay carencias y proyectos en los que la próxima administración debe prestar particular atención. Por ejemplo: fortalecer el área de servicios educativos.
En esto coincidió Ricardo Duarte, ya que en su opinión, lo que sucede en muchos espacios y proyectos que trabajan en torno al arte contemporáneo es que “se convierten en soliloquios entre el curador y el director”, afirmó, de ahí que para “lograr una mayor comprensión y un crecimiento del arte contemporáneo, se debe trabajar en la formación de públicos”.
Duarte reflexionó sobre la importancia de mantener un diálogo constante con la comunidad a través de un número importante de exposiciones, ya que “de nada sirve tener un extraordinario museo de calidad muy bien iluminado, cuando las afluencias están bajando”, dijo.
Alicia Lozano, por su parte, afirmó que valorar y divulgar la labor de los museos debería ser una tarea compartida entre el Estado, el ayuntamiento y el sistema educativo, “porque las experiencias estéticas que se generan pueden ser incluso más fuertes que una clase de historia”.
A la lista de cosas que le gustaría ver en un futuro en el MAZ, Ricardo Duarte agregó una fundación que contribuya a la procuración de fondos, así como la creación de una colección representativa del museo.
INVITACIÓN
De fiesta
La cita para festejar con el Museo de Arte de Zapopan sus primeros diez años de vida, es el jueves 16 de agosto a partir de las 19:00 horas.
La última exposición de la gestión de Alicia Lozano, será la del monero tapatío José Ignacio Solórzano, JIS. Se inaugurará a finales de septiembre.
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