Cultura
De la realidad al arte
El activista Ai Weiwei emula en una foto al niño sirio ahogado en el mediterráneo
La fotografía, exhibida el pasado fin de semana en Nueva Delhi, fue tomada la semana pasada durante una expedición a Grecia del programa de los Premios de Arte de la revista “India Today”, de la que Chawla es director visual.
Ai posó con los ojos cerrados, acostado boca abajo y con las manos pegadas al cuerpo en una playa pedregosa de Lesbos, el principal punto de entrada de refugiados a Europa y donde tiene instalado un taller para llamar la atención sobre la difícil situación de los migrantes.
La revista explicó que se trata de un “tributo” al pequeño kurdo-sirio Aylan Kurdi, cuya imagen en esa misma posición dio hace cinco meses la vuelta al mundo, convirtiéndole en símbolo de la tragedia de los refugiados sirios que se juegan la vida en busca del sueño europeo.
Chawla viajó a Grecia hace unos días acompañado de un editor de su medio y ambos pasaron 48 horas con el artista disidente chino. Para la toma, Ai se tumbó sobre un plástico, mientras miembros del equipo agarraban los extremos que se levantaban por el viento, según muestran imágenes de la producción difundidas por una editora de la revista en las redes sociales.
La fotografía resultante, en blanco y negro, será publicada junto a una entrevista al activista en el próximo número de “India Today”, indicó el semanario en su artículo. “Ai Weiwei es un icono global de la utilización del arte para hacer una declaración política, estamos muy complacidos de que use nuestra plataforma para destacar los asuntos que nos afectan a todos”, sentenció el presidente del Grupo India Today, Aroon Purie, según recoge el artículo.
La semana pasada, el artista chino decidió cerrar una exposición en Copenhague y retirar una obra suya del museo de Aros (Dinamarca) en protesta por las nuevas leyes que permiten confiscar dinero y objetos de valor a los solicitantes de asilo para costear su estancia en Dinamarca.
SABER MÁS
Activismo de Ai Weiwei
Ai Weiwei fue detenido durante 81 días por “incitar a la subversión contra el Estado chino”, y pasó un año en arresto domiciliario hasta que en junio de 2012 se le permitió salir de casa, aunque no del país por estar investigado por bigamia, pornografía e intercambio ilícito de divisas extranjeras.
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