Cultura

Celebran 160 años de Le Bon Marché

La realizadora franco-iraní de la premiada Persepolis creó un libro tridimensional gigante con ilustraciones a partir de retratos de la diva francesa

PARÍS, FRANCIA (29/AGO/2012).- La actriz Catherine Deneuve y la directora y dibujante Marjane Satrapi tomarán los escaparates de los grandes almacenes más antiguos de París, "Le Bon Marché", para celebrar su 160 aniversario con ilustraciones gigantes sobre diez lugares de la ciudad particularmente amados por la diva.

La musa francesa de Luis Buñuel y de otros grandes directores internacionales y la realizadora franco-iraní de la premiada "Persepolis" (2007) produjeron un gigantesco libro tridimensional que el público podrá contemplar del 8 de septiembre al 6 de octubre, indicaron en Le Bon Marche.

Con su humor característico y delicado la directora retrató a la actriz de "Le Vice et la Vertu" (1962), "Peau d'âne" (1970) o "Les Lignes de Wellington" (2012) en diez de sus lugares preferidos de la "Rive Gauche" (margen izquierda del Sena), como el Jardín Botánico, la fuente de San Sulpicio y, por supuesto, Le Bon Marché.

Marjane Satrapi (Rasht, 1969) trabajó con el lema de que "el mundo es París y París es Catherine Deneuve", explicaron los portavoces del establecimiento.

El antiguo "Au Bon Marché", bautizado como "Le Bon Marché" en 1989, es propiedad del líder mundial del lujo, el grupo francés LVMH, desde 1984.

En el marco de las celebraciones de sus 160 años de existencia, el inmenso espacio comercial, que no ha dejado de crecer desde que lo construyeron el arquitecto Louis-Charles Boileau y el ingeniero Gustave Eiffel, expondrá hasta finales de año más de 600 obras contemporáneas relacionadas con su historia y la de sus fundadores.

El patriarca de la saga, Aristide Boucicaut, inspiró ya en 1881 la figura del protagonista de "Au Bonheur de Dames", de Emile Zola.

El triunfo del amor entre el protagonista de la novela y una de sus vendedoras no impidió al autor de "Yo acuso" (1898) dibujar una de sus sátiras sociales, ante el telón de fondo de aquel nuevo y voraz "Au Bon Marché", "catedral de comercio para un pueblo de clientes", que llevó a la quiebra a un sinfín de pequeños comercios vecinos.
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