Cultura
Aseguran protección a mural de Guillermo Chávez Vega
Las obras que se realizan en el Club Náutico 'La Floresta', en Ajijic, no afectarán el fresco
GUADALAJARA, JALISCO (21/ENE/2015).- A fines del pasado mes de noviembre, la Secretaría de Cultura de Jalisco (SC) a través de su Dirección de Patrimonio Artístico e Histórico envió un oficio al Ayuntamiento de
Chapala para solicitar información sobre obras de demolición que se realizan en el Club Náutico “La Floresta” de Ajijic, trabajos que, según “varias denuncias ciudadanas”, despertaron la preocupación por la posibilidad de afectar no sólo la Casa Club del lugar, sino en especial el mural que ahí realizó el reconocido pintor jalisciense Guillermo Chávez Vega, pues tanto la finca como la obra artística “revisten un valor patrimonial” para la comunidad.
Ante esto, Vidal González, presidente del club, refiere que el mural “está intacto” y las obras que se llevan a cabo en las instalaciones no tocan ni afectan el inmueble.
De acuerdo con Julio Herrera, director de Patrimonio Artístico e Histórico para la SC, como dependencia institucional, “nos dirigimos al Ayuntamiento de Chapala, puesto que ellos son quienes otorgan las licencias de construcción, por eso el documento se envió al presidente municipal, ingeniero Joaquín Huerta Barrios, en virtud de la notificación que recibimos acerca de las obras que se estaban llevando a cabo en el Club Náutico y para atraer la información acerca de lo que nosotros requerimos”.
Destaca el funcionario que, como se asiente en el oficio, de acuerdo con la Ley de Patrimonio del Estado de Jalisco, ante una situación de riesgo para algún elemento patrimonial en la Entidad, la dependencia debe conocer las características de estas obras “para dictaminar o emitir una opinión técnica correspondiente y por eso se pide el proyecto de intervención de esas obras para que, en caso de que exista algún riesgo, detener la construcción”.
Al momento, asegura Herrera, “no hemos tenido contestación por parte del gobierno municipal, el oficio se envió el pasado 24 de noviembre y tiene fecha de recibido el día 28 del mismo mes. Ahora, se cuenta con un plazo, según la ley, de 20 días para responder, pero se cruzaron las vacaciones de fin de año. Nosotros esperaremos esta respuesta, aunque a la fecha no la tenemos; seguimos al pendiente del proceso y le daremos seguimiento”.
Compromiso por conservar la obra
En entrevista, Vidal González, presidente del Club Náutico, señala que tuvo conocimiento del oficio de la Secretaría de Cultura de Jalisco (SC) apenas ayer (lunes), pero —destaca— “los murales de Chávez Vega están intactos y no se han tocado, ni se tiene pensado tocarlos en el futuro”.
Advierte que las obras que están llevando a cabo se realizan dentro de la propiedad, sin afectación al inmueble: “Se están arreglando jardines, albercas y la marina, todo lo cual está distanciado de la casa club en un perímetro de más o menos 80 metros”.
Como prueba de lo anterior, el presidente del club posee una certificación de hechos, fechada el 10 de enero pasado, notariada y con fotografías incluidas, donde se asienta que “los murales que se encuentran en el techo de la casa club se encuentran a salvo y lejos de las construcciones nuevas”, por lo que “no corren ningún riesgo por las obras de remodelación”.
Estos trabajos, enfatiza González responden a la intención de “revitalizar el club, que tiene más de 40 años; se busca también edificar un desarrollo en un terreno del club –que cuenta con las licencias y permisos necesarios–, pero eso tampoco está cerca de la casa club (donde están los murales) que, repito, está intacta”.
González asegura que están en “la mejor disposición” de trabajar con la Secretaría de Cultura estatal, y en caso de así requerirlo, de establer un convenio para la conservaciónb y protección de la obra mural.
“Nosotros no tenemos ninguna intención de afectar el mural. Se trata de un asunto importante y nadie está más interesado que yo en aclarar esta confusión”.
La historia del lugar
El mural, indica Guillermo Chávez Escobar, hijo del artista, fue pintado en 1971 y se ubica en el edificio central del Club Náutico “La Floresta”, sobre los cuatro muros internos de una estructura piramidal y en él se representan algunos hechos históricos relevantes en torno al vaso lacustre, desde rituales indígenas precolombinos hasta la guerra de independencia y la resistencia en la Isla de Mezcala.
En opinión de Chávez Escobar, si las obras se encuentran en riesgo sería “algo lamentable”, pues existe un precedente en los años ochenta, “ya que había —a la entrada del lobby— un muro con una pintura donde se mostraba a una mujer en una hamaca hecha con redes de pescadores, también pintada por mi padre, que fue borrado. Posteriormente se quiso hacer una recuperación de la obra, pero parece que no hubo presupuesto y no se llevó a cabo”.
Esto es, si el mural se encontrara ante la posibilidad de ser afectado, asevera, “estamos a muy buen tiempo para que no suceda”, ante todo porque se cuenta con el apoyo de la SC.
PERFIL
El pintor
Pintor, muralista, acuarelista y grabador, Guillermo Chávez Vega nació en Guadalajara en 1931. Su obra mural está en el Palacio de Justicia de Guadalajara, el Centro de la Amistad Internacional, el Club Náutico “La Floresta”, el edificio del Sindicato de Trabajadores del IMSS (en la Ciudad de México), y el Centro de Arte y Cultura de San Pedro Tlaquepaque.
Recibió el premio Jalisco en artes plásticas (1960), la Medalla de Plata del Gobierno de Jalisco (1964). Murió en 1990, en Guadalajara. En julio de 2002, sus restos fueron trasladados a la Rotonda de los Jaliscienses Ilustres.
Ante esto, Vidal González, presidente del club, refiere que el mural “está intacto” y las obras que se llevan a cabo en las instalaciones no tocan ni afectan el inmueble.
De acuerdo con Julio Herrera, director de Patrimonio Artístico e Histórico para la SC, como dependencia institucional, “nos dirigimos al Ayuntamiento de Chapala, puesto que ellos son quienes otorgan las licencias de construcción, por eso el documento se envió al presidente municipal, ingeniero Joaquín Huerta Barrios, en virtud de la notificación que recibimos acerca de las obras que se estaban llevando a cabo en el Club Náutico y para atraer la información acerca de lo que nosotros requerimos”.
Destaca el funcionario que, como se asiente en el oficio, de acuerdo con la Ley de Patrimonio del Estado de Jalisco, ante una situación de riesgo para algún elemento patrimonial en la Entidad, la dependencia debe conocer las características de estas obras “para dictaminar o emitir una opinión técnica correspondiente y por eso se pide el proyecto de intervención de esas obras para que, en caso de que exista algún riesgo, detener la construcción”.
Al momento, asegura Herrera, “no hemos tenido contestación por parte del gobierno municipal, el oficio se envió el pasado 24 de noviembre y tiene fecha de recibido el día 28 del mismo mes. Ahora, se cuenta con un plazo, según la ley, de 20 días para responder, pero se cruzaron las vacaciones de fin de año. Nosotros esperaremos esta respuesta, aunque a la fecha no la tenemos; seguimos al pendiente del proceso y le daremos seguimiento”.
Compromiso por conservar la obra
En entrevista, Vidal González, presidente del Club Náutico, señala que tuvo conocimiento del oficio de la Secretaría de Cultura de Jalisco (SC) apenas ayer (lunes), pero —destaca— “los murales de Chávez Vega están intactos y no se han tocado, ni se tiene pensado tocarlos en el futuro”.
Advierte que las obras que están llevando a cabo se realizan dentro de la propiedad, sin afectación al inmueble: “Se están arreglando jardines, albercas y la marina, todo lo cual está distanciado de la casa club en un perímetro de más o menos 80 metros”.
Como prueba de lo anterior, el presidente del club posee una certificación de hechos, fechada el 10 de enero pasado, notariada y con fotografías incluidas, donde se asienta que “los murales que se encuentran en el techo de la casa club se encuentran a salvo y lejos de las construcciones nuevas”, por lo que “no corren ningún riesgo por las obras de remodelación”.
Estos trabajos, enfatiza González responden a la intención de “revitalizar el club, que tiene más de 40 años; se busca también edificar un desarrollo en un terreno del club –que cuenta con las licencias y permisos necesarios–, pero eso tampoco está cerca de la casa club (donde están los murales) que, repito, está intacta”.
González asegura que están en “la mejor disposición” de trabajar con la Secretaría de Cultura estatal, y en caso de así requerirlo, de establer un convenio para la conservaciónb y protección de la obra mural.
“Nosotros no tenemos ninguna intención de afectar el mural. Se trata de un asunto importante y nadie está más interesado que yo en aclarar esta confusión”.
La historia del lugar
El mural, indica Guillermo Chávez Escobar, hijo del artista, fue pintado en 1971 y se ubica en el edificio central del Club Náutico “La Floresta”, sobre los cuatro muros internos de una estructura piramidal y en él se representan algunos hechos históricos relevantes en torno al vaso lacustre, desde rituales indígenas precolombinos hasta la guerra de independencia y la resistencia en la Isla de Mezcala.
En opinión de Chávez Escobar, si las obras se encuentran en riesgo sería “algo lamentable”, pues existe un precedente en los años ochenta, “ya que había —a la entrada del lobby— un muro con una pintura donde se mostraba a una mujer en una hamaca hecha con redes de pescadores, también pintada por mi padre, que fue borrado. Posteriormente se quiso hacer una recuperación de la obra, pero parece que no hubo presupuesto y no se llevó a cabo”.
Esto es, si el mural se encontrara ante la posibilidad de ser afectado, asevera, “estamos a muy buen tiempo para que no suceda”, ante todo porque se cuenta con el apoyo de la SC.
PERFIL
El pintor
Pintor, muralista, acuarelista y grabador, Guillermo Chávez Vega nació en Guadalajara en 1931. Su obra mural está en el Palacio de Justicia de Guadalajara, el Centro de la Amistad Internacional, el Club Náutico “La Floresta”, el edificio del Sindicato de Trabajadores del IMSS (en la Ciudad de México), y el Centro de Arte y Cultura de San Pedro Tlaquepaque.
Recibió el premio Jalisco en artes plásticas (1960), la Medalla de Plata del Gobierno de Jalisco (1964). Murió en 1990, en Guadalajara. En julio de 2002, sus restos fueron trasladados a la Rotonda de los Jaliscienses Ilustres.