Cultura
Arreola y el 68 marcan a Lara Zavala
El escritor y el movimiento estudiantil reorientaron hacia las letras al autor que participa en el ciclo ''Protagonistas de la Literatura Mexicana''
CIUDAD DE MÉXICO (07/JUL/2013).- La influencia de Juan José Arreola y el movimiento estudiantil de 1968 me atraparon para convertirme en escritor y dejar la ingeniería industrial, aseguró hoy aquí Hernán Lara Zavala (1946).
Durante una charla que ofreció al lado de los escritores Beatriz Espejo y Emmanuel Carballo, en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, el también Premio Real Academia Española 2010 confesó que tras ejercerla por un tiempo, reorientó su actividad hacia su verdadera vocación: las letras.
"Me cambié a la Literatura hasta que renegué de la ingeniería industrial, la terminé y trabajé en ella por cinco años. A mi padre se le hacía pesado mantenerme una segunda carrera, cuando todavía venían ocho hermanos detrás.
"Tenía el intento de ser escritor a la edad de 18 años, que fue cuando comencé a tener la lejana ensoñación de que me gustaría ser escritor, pero no me decidí hasta 1968, año del movimiento estudiantil, que me atrapó en términos políticos y vocacionales", confesó.
En el marco del ciclo Protagonistas de la Literatura Mexicana, el novelista, cuentista, ensayista, editor y catedrático mexicano, se refirió al Movimiento del 68 como uno en contra del partido político en el poder.
Enseguida, el escritor Emmanuel Carballo abordó el tema y dijo que ese movimiento deseaba cambiar además a la vieja Universidad, "pero no se cambió todo lo que queríamos".
Para Lara Zavala, el 68 fue un movimiento vencido y que en apariencia había concluido, sobre todo después del 2 de octubre, pero quedaron semillas y elementos importantes que permitieron después la alternancia.
"Es una desgracia, desde mi punto de vista, que la izquierda no haya tenido la unidad y coherencia para presentar proyectos más interesantes", dijo el autor al tiempo que Carballo consideró que ir a votar a las urnas, "es ya ir a perder el tiempo y hacernos tontos, pues no exigimos que las cosas sean de verdad".
"El 68 me cimbró mucho en términos vocacionales, pues como estuvimos en huelga casi un año, eso me permitió, sobre todo, reconsiderar que mi temperamento natural era de carácter humanístico, pues no tenía el carácter técnico que debería tener", señaló Lara Zavala, para quien la figura de Juan José Arreola influyó en su camino hacia las letras.
Dijo que Arreola le dio clases en la Universidad y recordó que desde el inicio lo sorprendió por su calidad y genialidad, la cual se reflejaba por todos lados.
Durante la charla, Carballo elogió la obra literaria de su colega, mientras que Lara Zavala lo calificó como uno de los mejores críticos literarios y maestro exigente.
Por separado, Beatriz Espejo llamó a Lara Zavala un autor serio, que empezó escribiendo cuentos costumbristas muy bien hechos, sobre el pueblo de su papá (De Zitilchén), mismos que acaba de reeditar, mejorando la edición.
"Aparte de eso escribió una novela notable, que se llama 'Península, península', con la que ha ganado muchos premios, y muchos reconocimientos, y también tiene un libro de cuentos que se llama 'El Guante negro y otros cuentos'", recordó.
"A los jóvenes les va a enseñar una nueva manera de contar las cosas, porque es un escritor original, vanguardista. Además, 'Península, península', está muy bien escrita, es una novela histórica, muy bien hecha", expresó Espejo.
Durante la sesión, cada uno de los autores compartió sus experiencias literarias, en una charla a la que sólo le hizo falta el café.
Durante una charla que ofreció al lado de los escritores Beatriz Espejo y Emmanuel Carballo, en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, el también Premio Real Academia Española 2010 confesó que tras ejercerla por un tiempo, reorientó su actividad hacia su verdadera vocación: las letras.
"Me cambié a la Literatura hasta que renegué de la ingeniería industrial, la terminé y trabajé en ella por cinco años. A mi padre se le hacía pesado mantenerme una segunda carrera, cuando todavía venían ocho hermanos detrás.
"Tenía el intento de ser escritor a la edad de 18 años, que fue cuando comencé a tener la lejana ensoñación de que me gustaría ser escritor, pero no me decidí hasta 1968, año del movimiento estudiantil, que me atrapó en términos políticos y vocacionales", confesó.
En el marco del ciclo Protagonistas de la Literatura Mexicana, el novelista, cuentista, ensayista, editor y catedrático mexicano, se refirió al Movimiento del 68 como uno en contra del partido político en el poder.
Enseguida, el escritor Emmanuel Carballo abordó el tema y dijo que ese movimiento deseaba cambiar además a la vieja Universidad, "pero no se cambió todo lo que queríamos".
Para Lara Zavala, el 68 fue un movimiento vencido y que en apariencia había concluido, sobre todo después del 2 de octubre, pero quedaron semillas y elementos importantes que permitieron después la alternancia.
"Es una desgracia, desde mi punto de vista, que la izquierda no haya tenido la unidad y coherencia para presentar proyectos más interesantes", dijo el autor al tiempo que Carballo consideró que ir a votar a las urnas, "es ya ir a perder el tiempo y hacernos tontos, pues no exigimos que las cosas sean de verdad".
"El 68 me cimbró mucho en términos vocacionales, pues como estuvimos en huelga casi un año, eso me permitió, sobre todo, reconsiderar que mi temperamento natural era de carácter humanístico, pues no tenía el carácter técnico que debería tener", señaló Lara Zavala, para quien la figura de Juan José Arreola influyó en su camino hacia las letras.
Dijo que Arreola le dio clases en la Universidad y recordó que desde el inicio lo sorprendió por su calidad y genialidad, la cual se reflejaba por todos lados.
Durante la charla, Carballo elogió la obra literaria de su colega, mientras que Lara Zavala lo calificó como uno de los mejores críticos literarios y maestro exigente.
Por separado, Beatriz Espejo llamó a Lara Zavala un autor serio, que empezó escribiendo cuentos costumbristas muy bien hechos, sobre el pueblo de su papá (De Zitilchén), mismos que acaba de reeditar, mejorando la edición.
"Aparte de eso escribió una novela notable, que se llama 'Península, península', con la que ha ganado muchos premios, y muchos reconocimientos, y también tiene un libro de cuentos que se llama 'El Guante negro y otros cuentos'", recordó.
"A los jóvenes les va a enseñar una nueva manera de contar las cosas, porque es un escritor original, vanguardista. Además, 'Península, península', está muy bien escrita, es una novela histórica, muy bien hecha", expresó Espejo.
Durante la sesión, cada uno de los autores compartió sus experiencias literarias, en una charla a la que sólo le hizo falta el café.
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