Cultura
Alberto Chimal trae Los esclavos a Guadalajara
Cuando empezó con la creación de la novela, se propuso probarse que era capaz de hacer algo distinto a todo aquello que ha construido su carrera como escritor
Chimal cuenta que esta novela surgió "por varias circunstancias", pero la idea primordial fue "tratar de hacer un proyecto de corte realista, que fuera más directo al momento de hablar de ciertas ideas. Quizás algo más crudo". Dice que cuando empezó con la redacción de Los esclavos, se propuso probarse que era capaz de hacer algo distinto a todo aquello que ha construido su carrera como escritor, comprobarse que "no me estaba estancando, que podía renovar mi trabajo".
El tema le vino de sus raíces como cuentista. "Me acordé de un cuento muy breve que publiqué hace muchos años en Toluca, mi ciudad natal. Era un relato donde aparecía un personaje que dominaba a otro, pero no iba mucho más allá de eso. Me quedé con la idea básica y a partir de eso me dediqué a crear este texto".
Los esclavos cuenta paralelamente la historia de dos parejas de pervertidos. De entrada, se encuentra una directora de cine pornográfico que obliga a una adolescente a satisfacer sus deseos y a interpretar papeles degradantes, y luego aparece un joven millonario al que le gusta someter a otras personas hasta aniquilar sus voluntades. Su última adquisición es un burócrata de edad madura.
La línea narrativa que sigue Chimal en Los esclavos se comide de tal suerte que ofrece al lector una descripción detallada de los episodios más íntimos que acontecen en la relación de ambas parejas, pero siempre con un lenguaje recatado que no incurre en vulgarismos para lograr su objetivo.
"Chispazos" narrativos
Una de las intenciones de Chimal al momento de empezar a escribir Los esclavos fue "apartarme tanto como fuera posible del lado más fácil de abordar este tema, el tremendismo, el sensacionalismo, la lección básica", de esa especie de discurso que es propio de la nota roja y que llega a convertirse "casi en un melodrama o en entretenimiento disfrazado de noticia". Conseguir un tono distinto se convirtió en el objetivo del autor.
La fórmula que encontró para lograr este cometido se centró en dos aspectos fundamentales: por un lado, concebir una "redacción muy tersa, que quiere ser muy precisa, muy parca", y por otra parte, diseccionar la realidad de sus personajes con el objeto de que el lector tuviese la oportunidad de apreciarlos "desde la perspectiva opuesta a la escena continua", es decir, dividiendo el tiempo. A lo largo de Los Esclavos, aparecen entonces "chispazos" narrativos que proceden del presente, pasado y futuro, y que a su vez permiten hacer una correlación de acontecimientos entre ambas historias.
Pero hubo otro punto relacionado con la psicología de los adeptos a este tipo de prácticas sexuales que originó la particular división de los capítulos que conforman Los esclavos. Alberto Chimal explica que fragmentó la novela con la intención de que "reflejara el hecho de que estos personajes, a pesar de que viven consagrados a estos rituales de poder, en realidad no los pueden llevar a cabo todo el tiempo. Es un proceso discontinuo. Tienen que parar y hacer otras cosas. Traté de hacer mucha referencia a los tiempos muertos, aquel que dedican a otras actividades, porque también es el reverso de estas historias pornográficas en las que lo único que cuenta es el cumplimiento de la fantasía, fantasías que se insertan en la realidad y que, por lo tanto, son más complicadas de llevar a cabo".
En síntesis
QUÉ. Presentación de Los esclavos.
QUIÉN. Alberto Chimal, autor.
DÓNDE. Feria Municipal del Libro y la Cultura (patio del Palacio Municipal de Guadalajara).
CUÁNDO. Domingo 14 de junio de 2009, 19:00 horas.
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