Avanza regulación de patines en la Zona Metropolitana de Guadalajara
La capital de Jalisco ya reguló el uso de estos vehículos tanto en la vía pública como en ciclovías; otros municipios estudian la reglamentación y su aplicación para seguridad vial
Ante el creciente uso de patines eléctricos en las calles de la ciudad, las autoridades se han visto en la necesidad de proceder a su regulación, más allá de fines recaudatorios, como una guía que impulse su uso responsable, dado el riesgo que representa para los usuarios conducirse en ellos en medio de una ciudad motorizada.
Zapopan trabaja en la regulación, ya que reconoce los patines eléctricos en su Reglamento de Movilidad, Tránsito y Seguridad Vial como parte de la movilidad no motorizada, equiparándolos a las bicicletas. De esta manera, se suma a lo establecido en la ley estatal, la cual indica que, con el objetivo de impulsar la movilidad activa, los scooters o “patines eléctricos” adquieren derechos para circular en espacios destinados a la movilidad no motorizada, como las ciclovías.
Guadalajara aprobó el Reglamento para el uso adecuado de este tipo de scooters, a fin de lograr una movilidad más ordenada y segura, y disminuir los riesgos de accidentes en la ciudad.
“La regulación de los patines eléctricos se está volviendo una necesidad, dada la facilidad de adquirir este tipo de vehículos, al igual que ha ocurrido con las motocicletas. Hemos llegado a un punto en el que, en lugar de usarse para tramos cortos, como fue su diseño original, la gente empieza a utilizarlos para trayectos largos”, explicó Laura López López, doctora en Movilidad Urbana, Transporte y Territorio, e integrante del Colegio de Profesionistas en Sistemas de Información de Jalisco.
Desde el ámbito municipal, el Ayuntamiento de Tlajomulco de Zúñiga explicó que “el uso de patines eléctricos no es algo común en el municipio, como sucede en Guadalajara y Zapopan, donde se observa una gran cantidad de personas que han optado por este tipo de transporte para traslados cortos”, por lo que hasta el momento no se ha visto la necesidad de emprender una regulación especial.
El Ayuntamiento de Tonalá informó que actualmente trabaja en reformas a 40 reglamentos municipales, incluido el de Movilidad, donde se contemplará a los patines eléctricos como medios de transporte, aunque no se aportaron más detalles sobre los conceptos o restricciones que se abordarán.
Por último, el Ayuntamiento de Tlaquepaque reconoció que hasta el momento no ha abordado el tema desde la alcaldía, pero está dispuesto a trabajar en conjunto con el Instituto Metropolitano de Planeación (Imeplan) si fuera necesario para homologar algún criterio.
25 kilómetros por hora, velocidad adecuada al circular en scooter
- Mientras se conduce a una mayor velocidad se genera una visión de túnel que disminuye la visión a nuestro alrededor. Llegando a entre 30 a 40 kilómetros por hora puede perderse hasta un 40 por ciento de la visibilidad periférica.
- Conducir entre los 30 a 40 kilómetros se está muy expuestos a sufrir fracturas, luxaciones y esguinces además de las lesiones previamente mencionadas. Pueden presentarse traumatismos craneoencefálicos leves o incluso moderados que se convierten en situaciones de urgencia con requerimiento a trasladado hospitalario.
- Al superar los 40 kilómetros por hora en un patín se está expuesto a situaciones de traumatismos craneoencefálicos graves o incluso la muerte en algunos casos “porque hay que contemplar que no solamente es la velocidad que llevamos nosotros en el scooter también es la velocidad que lleve el otro usuario y eso va a potencializar la energía la fuerza del impacto”.
- Conducir en patín eléctrico a una velocidad de entre 10 a 20 kilómetros por hora, en caso de percance la persona puede presentar lesiones leves, como golpes o raspones, e incluso heridas abiertas con presencia de sangre.
Casco y otras protecciones, clave para evitar lesiones
Laura López López, doctora en Movilidad Urbana, Transporte y Territorio, e integrante del Colegio de Profesionistas en Sistemas de Información de Jalisco, explicó que los aditamentos de protección básica para un usuario de patín eléctrico son el casco, que reduce hasta un 39% la probabilidad de muerte y hasta un 72% las lesiones graves, así como la implementación de coderas y rodilleras para proteger las articulaciones en caso de un percance.
El exregidor tapatío, Luis Cisneros, explicó que con base en las mesas de diálogo emprendidas con especialistas y personas usuarias de scooters, también se consideró el uso de chaleco con áreas reflectantes y el uso de luces para alertar de su paso a otros integrantes de la movilidad en condiciones de oscuridad.
Y de acuerdo con el Coordinador Académico de la Escuela de Técnicos en Urgencias Médicas de la Cruz Roja Jalisco, Luis Fernando Goitia, debe considerarse incluso el uso de lentes o gafas de protección, pues al paso una pequeña piedrita podría convertirse en un riesgo grave para la visión.
También instó a no hacer uso de audífonos o manos libres, ya que estos impiden escuchar lo que ocurre alrededor, como si se acerca algún vehículo o pasa alguna ambulancia. En este mismo sentido también invitó a no hacer uso del teléfono celular para no desviar la atención en el camino.
Europa va a la delantera
El tema del uso de patines eléctricos como medio de transporte no es nuevo, e incluso, desde el Ayuntamiento de Guadalajara en 2019 se había intentado introducir a la ciudad este tipo de transporte por medio de renta por lapsos cortos, sin embargo, se desechó por falta de interés y debido a que algunos vehículos fueron robados.
Quienes llevan la delantera en la regulación de este tipo de movilidad son ciudades de Europa, que tienen instituido en sus leyes y reglamentos las condiciones en las que pueden operar.
Por ejemplo, en el caso de Madrid, España, los patinetes eléctricos tienen prohibido circular por las aceras, carriles bus-bici, calles con más de un carril por sentido, y por los accesos y tramos que no tengan semáforos. Tampoco pueden estacionarse en las banquetas, deben llevar timbre, luces y elementos reflectantes.
La edad mínima para su uso es de 15 años, y su velocidad máxima debe ser de 25 kilómetros por hora, y en resumen, solo pueden circular dentro de las zonas 30 y ciclovías, siempre y cuando no se rebase esta velocidad. En caso de no cumplir con las disposiciones, las personas pueden llegar a pagar multas que van de los 30 euros a los 200 euros (de los 600 a los cuatro mil pesos en moneda mexicana).
En el caso de Múnich, Alemania, cualquier persona mayor de 14 años puede conducir este tipo de vehículos sin permiso de conducir, recomendablemente, con casco.
Sólo se puede circular por ciclovías dando preferencia al paso de las bicicletas, pero siempre respetando todas las señales de tránsito. Está prohibido usar patines eléctricos en aceras, zonas peatonales y calles de sentido único en sentido contrario, teniendo multas de los 15 a los 30 euros (de los 300 a los 600 pesos mexicanos), pero si se usa el teléfono móvil mientras se conduce esta puede ascender a los 100 euros (dos mil pesos).
Lo más interesante de esta ciudad es que todo conductor debe contar con un seguro de responsabilidad civil y circular con la póliza a la vista a manera de gafete, o de lo contrario, la multa puede ascender a los 40 euros (800 pesos mexicanos), además de que, para usar este vehículo es necesario tener la aprobación de las autoridades alemanas a manera de licencia, y no contar con ella impide la contratación de un seguro, sumando otra multa de 70 euros (140 pesos mexicanos).
Otro caso es el de París, Francia, donde los patines se intentaron regular en 2019, teniendo estrictamente prohibido circular por las aceras, y limitándose a la velocidad máxima a 20 km/h en la mayoría de las áreas. También se establecieron zonas específicas para estacionar estos vehículos.