El acuerdo entre el Instituto Nacional Electoral (INE) y Facebook tiene lagunas que no dejan claro qué pasará con la información que se genere con las interacciones de los usuarios de la red social durante la transmisión de los debates presidenciales o sus comentarios ante los diferentes contenidos, alerta Víctor Ábrego Molina, integrante del Laboratorio Interdisciplinario del ITESO, quien subraya que ese tipo de datos es “oro molido” para las empresas que se dedican a elaborar perfiles sociales, análisis de información y generación de contenidos a partir del comportamiento de los usuarios.“Imagina todo lo que podrá hacer Facebook con la información sobre comentarios y reacciones en tiempo real de los debates presidenciales, que transmitirlos es parte del acuerdo. Tendrá información de primera mano y ofrecida por la autoridad que organiza el proceso electoral. Tendrán una nueva montaña de información que puede ser vendida al mejor postor”.Explica que después del triunfo de Donald Trump en los Estados Unidos y el Brexit en Reino Unido, diferentes investigaciones pusieron el foco de atención en empresas que se dedican a producir información que se puede considerar como “fake news”, con la que se busca manipular en modos más sofisticados y afectar a grupos cada vez más específicos. Por ejemplo, Cambridge Analytica, una de esas empresas, habría obtenido la información de Facebook y desde hace por lo menos un año está en México para ofrecer sus servicios.El consejero del INE, Enrique Andrade González, descarta riesgo por el acuerdo con la empresa Facebook. Sostiene que no se le entregará ninguna información del padrón electoral nacional y los datos del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), pues se le facilitarán los mismos que replicará el Instituto y diferentes medios de comunicación.“El INE no otorgará información de los electores (padrón electoral) a la empresa, sólo información oficial y del PREP, que es la misma que se verá en las pantallas del Instituto”.Sobre el control de la información falsa, el investigador Andrea Bussoletti acentúa que se debe cuidar que no se use como una herramienta de censura y recuerda que la red social ya aplica filtros de control para suprimir contenidos que puedan resultar ofensivos.“Depende del punto de vista hasta dónde es un filtro aceptable y cuándo se convierte en censura. Lo interesante es que se intenta hacer un esfuerzo para que no se difundan datos sin suficiente sustento, aunque por supuesto que el riesgo de censura existe”.Con la sobreoferta de contenidos circulando en internet, el usuario debe ser selectivo con la información que consulta y replica, afirma Ligia García Béjar, investigadora de la Universidad Panamericana. Acentúa que se requiere trabajar en la alfabetización informacional.Refiere que será complicado ganar la batalla contra las “fake news”, si el usuario de las redes sociales no se vuelve crítico de los contenidos que recibe. Recomienda desconfiar de los actores que en las campañas electorales recurran a la guerra sucia y acudir a las fuentes directas para consultar propuestas o antecedentes de algún candidato.Por otra parte, la principal fuente de información de los jóvenes son las redes sociales, que se han convertido en la vía por donde la mayoría se entera de la actualidad, plantea Jorge Rocha Quintero, investigador del ITESO, quien refiere que por los hábitos de consumo de información de los jóvenes es lógico que los partidos y las instituciones electorales apuesten por intensificar sus mensajes por esas vías, para buscar su preferencia y alentar su participación.El convenio de colaboración busca que la red social sea la plataforma para acercar la información oficial del proceso electoral, transmitir los tres debates presidenciales y el día de la jornada electoral difundir en tiempo real los datos del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), afirma el consejero del INE, Enrique Andrade González, quien argumenta que buscaron la alianza porque mensualmente tiene 80 millones de usuarios en el país que interactúan.Aunque en texto del convenio no se especifica abiertamente, Andrade García asegura que la colaboración con Facebook incluye combatir la proliferación de noticias falsas (“fake news”), con el compromiso del INE para alimentar la plataforma con información oficial corroborada. Por eso niega que se trate de bajar o censurar información.Añade que no es parte del acuerdo combatir las “fake news” relacionadas con candidatos o partidos políticos, sino sólo las que involucren al INE y la organización del proceso electoral.Refiere que ya enfrentaron la primera noticia falsa sobre el proceso: hace unos días circuló una versión errónea de que no se podría votar con la credencial del IFE, pero subraya que es falaz, pues esas credenciales que estén vigentes son válidas para la próxima elección. Adelanta que están por concretar un acuerdo similar con Google y han tenido acercamientos con Twitter.Andrea Bussoletti, investigador integrante del Observatorio Electoral de la UdeG, subraya que la autoridad electoral tiene que dar a conocer todas las implicaciones del acuerdo. Comenta que, de entrada, parece positivo, por la posibilidad de llegar a millones de personas, pero advierte que un problema puede ser cómo se aplicará el combate a las noticias falsas.Aunque la elección por la gubernatura, ayuntamientos y diputaciones locales de Jalisco es concurrente con los comicios federales, la difusión de resultados o información del proceso local no forman parte del acuerdo firmado por el INE y Facebook, confirma el consejero Enrique Andrade González, quien explica que los procesos estatales no fueron incluidos.Carlos Manuel Rodríguez Morales, consejero presidente de la Junta Local del INE en Jalisco, explica que, a nivel estatal, este convenio no tiene repercusión, pues se ciñe al proceso nacional.EL ANÁLISISJaime BarreraLa habitual guerra sucia que presenciamos cada elección crecerá de manera exponencial ahora que más de la mitad de los mexicanos tiene acceso a internet.De prácticamente nada servirá la alianza entre el Instituto Nacional Electoral y los administradores de Facebook, la red social que sin crear contenido alguno es el mayor influenciador mediático de la actualidad, para tratar de contener las avalanchas de noticias falsas, las famosas “fake news”, que seguramente ya se preparan en los cuartos de guerra de los candidatos a los distintos puestos de elección popular en los comicios con mayor número de cargos en disputa.El acuerdo INE-Facebook, que se aborda hoy en el tema sabatino de EL INFORMADOR, tiene como objetivo principal promover la participación para combatir el abstencionismo electoral y mantener informada a la población de la organización del proceso, pero sólo queda en una buena intención, sin referencia explícita en el convenio, combatir las noticias falsas. Se aclara además que los eventuales filtros se harán contra las “fake news” que ataquen al INE, no a los partidos o candidatos. La alianza, que se buscará también con Google y Twitter, no se replicará en los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLES).Se perdió así la oportunidad de que el INE, los partidos políticos y los propios candidatos exploraran formas de desactivar las nuevas modalidades de guerra sucia digital que se vienen y que sin duda los afectarán a todos y degradarán aún más el nivel del debate público y de nuestra vida democrática.Estudios recientes del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) documentaron cómo en las redes sociales las noticias falsas impactan a mayor velocidad y a un 35% más de usuarios que las noticias verdaderas.Mientras en otras partes del mundo hay iniciativas en marcha para sancionar a los emisores de las “fake news”, sobre todo en épocas electorales, en México nos queda sólo apelar al consumo crítico de la información que recibimos a través de las redes y el cobro de la factura a los políticos que acudan a este cobarde recurso para atacar al adversario. Los más alertas deberán ser los casi 26 millones de jóvenes en edad de votar, que representan el 30 por ciento del padrón electoral y que están en la mira de los estrategas para influirlos en las redes.Hace un mes circuló un mensaje en Facebook y WhatsApp que, en resumen, advertía: si tu credencial fue expedida por el Instituto Federal Electoral (IFE) en vez del INE, no podrás votar.El INE tuvo que aclarar: fue un rumor. Si una credencial está vigente, aunque haya sido expedida en 2008, puede usarse para sufragar en esta elección. Es apenas el comienzo. Las “fake news” aumentan su potencial e impacto sobre todo en periodos político-electorales, como lo demostró la reciente elección en Estados Unidos. Cerca de 126 millones de norteamericanos usuarios de Facebook estuvieron expuestos a noticias falsas que, al final, influyeron en el resultado de la contienda. “Ahora que en México empiezan las campañas electorales el 30 de marzo, entonces sí veremos las noticias falsas a tope”, anticipó Esteban Illades, autor del libro “Fake News, la nueva realidad”.La desinformación siempre ha existido; la diferencia es que hoy cualquier persona puede fabricar, manipular y distribuir a escala masiva contenido falso a bajo costo. Sin embargo, a nivel legislativo México está rezagado. Por el contrario, la preocupación en Europa es tal, que a finales del 2017 el Parlamento Europeo fijó una agenda para combatir y regular las “fake news”. La propuesta deberá estar lista este año. Países como Francia se han adelantado. Emmanuel Macron ya propuso una polémica ley contra la incursión de noticias falsas en periodo electoral. Abre la puerta para denunciar “fake news” ante un juez que, con carácter de urgente, ordena eliminar el mensaje y al usuario emisor.La del primero de julio será la elección más competida en México, pero también la primera en donde las redes sociales jugarán un rol protagónico: 65.3 millones de mexicanos tiene un móvil inteligente con conexión a internet y redes sociales.Sigue: #DebateInformador¿Ya ha sido víctima de una noticia falsa en las redes sociales?Participa en Twitter en el debate del día @informador