Dejando de lado los colores, las filias y fobias que pudieran sentirse, otro factor que pone en entredicho la calidad del fichaje del delantero Oribe Peralta con Chivas es precisamente la edad del atacante.Con 35 años de edad, muchos se cuestionan si al “Hermoso” aún le queda futbol de calidad para aportarle al Guadalajara en un momento crítico, pues un sector de la afición desconfía de que el atacante pueda ofrecer soluciones al Rebaño en su lucha por regresar a los primeros planos.Sin embargo, la Liga MX nos ha dado diversos ejemplos de que la edad no siempre dictamina la calidad de un jugador, pues en diversas posiciones y equipos, han existido veteranos que han sorprendido a propios y extraños con su nivel.