ATENAS, GRECIA (20/JUL/2017).- El barco de Greenpeace Rainbow Warrior III inicia hoy desde la isla griega de Zante -en el mar Jónico- una gira para dar visibilidad al problema de los residuos de plástico en los mares e investigar cuánto hay en aguas helenas.La isla de Zante es una de las principales zonas de desove de la tortuga boba (Caretta caretta), una de las especies marinas más amenazadas de Europa.La nave llevará a cabo acciones como limpieza de playas junto a ciudadanos y organizaciones medioambientales helenas e internacionales y jornadas abiertas al público en Zante, así como en las islas de Creta y Siros, para enseñar a sus visitantes maneras de proteger los océanos de la "invasión plástica".Otro objetivo del buque es determinar la cantidad de microplásticos presentes en los mares griegos, para lo que contará con la ayuda del Centro Griego de Investigación Marina."Un país como Grecia, cuya historia y futuro están tan unidos con la salud y belleza de sus mares, debería liderar los esfuerzos para reducir radicalmente los residuos de plástico", defendió Alkis Kafetzis, director de la campaña marítima de Greenpeace en Grecia.Desde la organización internacional pretenden denunciar el impacto negativo del plástico en los ecosistemas marinos y mostrar la dependencia que tenemos a este material.Globalmente, se han generado ocho mil 300 millones de toneladas de plástico desde la Segunda Guerra Mundial, dos tercios de las cuales son ahora residuos en vertederos o en el medio ambiente, según una investigación publicada ayer por la revista Science Advances.