ExoMars captura sus primeras imágenes de Marte

PARÍS, FRANCIA (16/JUN/2016).- La misión espacial interplanetaria ruso-europea, ExoMars, obtuvo ya sus primeras imágenes de Marte, al cual tiene previsto llegar en octubre próximo para estudiar su atmósfera y superficie, anunció hoy la Agencia Espacial Europea (ESA).
 
Las fotografías fueron capturadas por la cámara de la nave Trace Gas Orbiter (TGO) el pasado lunes a una distancia de 41 millones de kilómetros del llamado planeta rojo, y permitieron confirmar las capacidades de ese instrumento, precisó la ESA en un comunicado.
 
Indicó que la toma de esas imágenes constituyen un importante parteaguas para el equipo, pues muestran que la cámara funciona de manera correcta, y que la resolución de las fotografías será cada vez mejor, conforme la nave se acerque a Marte.
 
De acuerdo con la ESA, el orbitador TGO fue lanzado al espacio con un cohete Proton-M el pasado 14 de marzo desde el complejo de Baikonur, en Kazajistán, y ha viajado menos de la mitad de los 500 millones de kilómetros que debe recorrer para alcanzar su destino.
 
ExoMars es una misión conjunta de la ESA y la agencia espacial rusa Roscosmos que prevé la puesta en órbita del TGO alrededor de Marte el próximo 19 de octubre, posición desde la cual estudiará la composición de su atmósfera y la distribución de agua congelada en su suelo.
 
El TGO lleva un módulo de descenso llamado Schiaparelli y está programado que lo libere tres días antes para que el mismo día el primero se ponga en órbita y el segundo entre en la atmósfera marciana y aterrice en la superficie.
 
Se espera que el ciclo de trabajo de Schiaparelli tome varios días, tantos como lo permita la capacidad de sus baterías.
 
El objetivo principal de ExoMars en su primera y actual fase es olfatear los gases nobles de la atmósfera marciana, en particular el metano que daría señales de los procesos geológicos o biológicos activos en el planeta rojo.
 
Una segunda fase de la misión es una futura plataforma rusa de aterrizaje y la puesta en marcha de un vehículo europeo, cuya tarea será perforar la superficie -hasta dos metros de profundidad- en busca de signos de vida orgánica.