Desarrollan tecnología para la producción de insecticidas biológicos

CIUDAD DE MÉXICO (31/OCT/2010).- En los últimos 10 años se han intoxicado por plaguicidas 35, 159 personas a nivel nacional, de acuerdo con los casos registrados por instituciones médicas. Los estados de Jalisco, Guerrero, Michoacán, Nayarit y Sinaloa reportan las tasas de morbilidad más altas en el país. El sitio donde más gente se contamina con las sustancias químicas destinadas a matar o interrumpir el crecimiento de plagas son los campos de cultivo.

Aunque ya se pueden usar bioplaguicidas (productos biológicos o de origen natural) para dicha causa, es una práctica poco común por la falta de fabricación nacional de estos insumos. Como una respuesta, el Laboratorio de Bioinsecticidas del Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional (CIIDIR), Unidad Sinaloa del Instituto Politécnico Nacional, desarrolla una tecnología para la producción de insecticidas biológicos con base en el uso de hongos entomopatógenos.

El doctor Cipriano García Gutiérrez, líder de la investigación, explicó que el proyecto está enfocado a disminuir las pérdidas de producción ocasionadas por plagas que atacan los cultivos de papa, tomate, chile, berenjena, pepino, tomatillo y maíz; aunque esta tecnología también puede trasladarse a los sembradíos de árboles frutales y cítricos.

Así mismo, este trabajo propone la creación de un  Laboratorio Nacional de Investigación y Desarrollo de nuevas formulaciones como los que ya existen en otros países.

Para llevarlo al cabo, explicó el doctor del IPN, es necesario crear un laboratorio modelo con tecnología intermedia ubicado en Sinaloa, donde se elaboren las formulaciones de bioinsecticidas hechos a partir de hongos entomopatógenos como Beauveria bassiana, Metarhizium anisopliae y Paecilomyces fumosoroseus, principalmente, los cuales matan a ciertos grupos de insectos- plaga en varios cultivos.

Los hongos atacan de manera exclusiva a los insectos blanco por invasión del integumento (protección del sistema orgánico del bicho), y los mata en corto tiempo por la acción tóxica de los metabolitos.

El doctor García Gutiérrez comentó que el método de aplicación es similar al de los químicos, es decir, rociar los cultivos con equipo tipo mochila o realizar aspersiones aéreas.

Como este tipo de hongos son controladores naturales de las plagas, lo que hacemos, dijo el especialista politécnico, al aplicar la biotecnología es realizar una selección de cepas más virulentas contra ellas, su propagación masiva a través de procesos de fermentación, así como darle a la formulación estabilidad y tiempo de anaquel al ingrediente activo.

“La propuesta es con el fin de disminuir los casos de envenenamiento que suceden en la región por el mal manejo de insecticidas químicos, y evitar contaminación de suelos agrícolas, canales, y acuíferos aledaños a los campos de cultivo”, detalló el investigador del CIIDIR, Unidad Sinaloa.

Con la generación de los bioplaguicidas en el país disminuirá de manera paulatina el uso de los insecticidas químicos en el control de plagas de hortalizas en campos e invernaderos.

En México no es común el uso de bioplaguicidas porque la mayoría de los insumos que se usan en la agricultura nacional son importados, incluso las semillas y fertilizantes químicos. Mientras en el país no se generen opciones, dicha práctica va a continuar.

En este trabajo participan alumnos del CIIDIR, Unidad Sinaloa, con la colaboración de investigadores de diversas instituciones nacionales. Además de agricultores del Valle de Guasave y del Valle del Fuere, Sinaloa. (Agencia ID)