WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (21/JUL/2017).- Aunque no se sabe a ciencia cierta si se puede prevenir el mal de Alzheimer, evitar ciertos riesgos desde la infancia podría demorar o incluso prevenir una tercera parte de los casos de demencia senil en el mundo.Lo importante es evitar conductas que vuelvan al cerebro más vulnerable a la atrofia de la memoria y la capacidad de pensamiento a medida que el organismo va envejeciendo. Por ello conviene tener una buena educación desde edad temprana, evitar la alta presión sanguínea y la obesidad en la mediana edad,y evitar ser sedentario y aislarse de la sociedad en la vejez.El estudio, publicado en la revista científica Lancet el jueves, reconoce que se trata sólo de hipótesis basadas en proyecciones estadísticas. Un estudio reciente en Estados Unidos fue mucho más cauto, al afirmar que si bien hay indicios de que los cambios de estilo de vida robustecen la salud cerebral, no hay pruebas fehacientes.Aún así, nunca es tarde para intentarlo, dijo la autora del artículo, Gill Livingston, profesora de psiquiatría en el University College de Londres.“Si bien la demencia senil generalmente es diagnosticada en la vejez, esos cambios en el cerebro suelen ocurrir años antes”.A comienzos del año entrante, se realizará un gran estudio en Estados Unidos para determinar si ciertas simples tareas cotidianas pueden ayudar a la salud cerebral. Entretanto los expertos afirman que no hay desventaja alguna en seguir ciertas recomendaciones de sentido común.“Una mejor salud en el cuerpo significa una mejor salud en el cerebro”, dijo la neuróloga Laura Baker, de la Facultad de Medicina Wake Forest en Carolina del Norte, quien dirigirá el próximo estudio.Como un primer ejemplo está la actividad física, que es importante para mantener una buena salud cardíaca. “Si además de eso ayuda a mejorar las funciones cognoscitivas y a evitar la demencia senil, pues mejor”, expresó el doctor Richard Hodes, director del Instituto Nacional de Geriatría.Aquí unas conclusiones de la Conferencia Internacional de la Asociación Nacional del Estudio del Mal de Alzheimer:Riesgos importantesLos autores del artículo determinaron que 35% de todos los casos de demencia se deben a tres factores de riesgo, que pueden ser alterados por conducta propia.Recomiendan los siguiente: Asegurarse de tener una buena educación a edad temprana; evitar la alta presión sanguínea, la obesidad y el cigarrillo; manejar la diabetes, la depresión y la pérdida auditiva común con la vejez; mantenerse físicamente activo; mantener una vida social en la edad avanzada.