Un transporte divino

GUADALAJARA, JALISCO (13/FEB/2016).- Nuestro país recibe a la máxima figura de la Iglesia Católica, el Papa Francisco, hasta el 17 de febrero, en diversos estados de nuestro territorio. Como es tradición, el Papa requiere de movilidad, pues recorrerá alrededor de 400 kilómetros vía terrestre. Evidentemente, para esto, se necesita de un medio de transporte confiable, y he aquí los detalles de los vehículos que Su Santidad usará durante su estancia en nuestro país.

Cinco serán los automotores usados por el Pontífice para su traslado a través de las ciudades que visitará. Se trata de dos Jeep Wrangler Rubicon y tres Ram Hemi Sport, que en esta ocasión fungirán como papamóviles.

Los vehículos fueron adaptados y recibieron un par de toques especiales a propósito de la visita. Por fuera, los detalles como parrillas y espejos fueron pintados de blanco. Además, se erigió una estructura tubular tipo jaula en la parte posterior. Dicha estructura cuenta con cubiertas de policarbonato de seis milímetros de espesor en la parte superior y la parte delantera.

Al interior del habitáculo secundario se fabricó el sillón papal y dos sillas secundarias, una para el asistente personal del Papa y otro para el Obispo anfitrión. La maquila de los asientos fue a base de madera y poliuretano, para brindar comodidad. Todo terminado por el forro de los asientos en piel blanca, que también cubrirá los pasamanos.

Para tener acceso a la batea se fabricaron escalones y estribos de acero y aluminio, respectivamente en las partes laterales y trasera. Se forró el piso de la batea con alfombra roja de la más alta calidad. Las paredes están recubiertas de madera, que a su vez serán envueltas en más piel blanca. La iluminación será mediante faros led, que se controlarán desde la cabina del piloto.

Pero el Papa no se mueve solo, y todo un equipo lo acompaña. Para ello, la comitiva del Pontífice contará con seis Fiat 500L para traslados secundarios, además de más de 20 unidades Chrysler Town&Country y Dodge Durango, para el traslado integral de sus acompañantes.

De esta forma, todo está listo para que la figura máxima del catolicismo tenga una estancia confortable en nuestro país.