Lo cierto es que de no utilizar el maquillaje correctamente durante el día, los efectos negativos sobre la piel de la cara serán mayores y en algunos casos, muy difíciles de quitar, como lo son manchas, cicatrices por espinillas o infecciones por no retirar a tiempo el producto que estuvo bastante tiempo en contacto con el smog y el Sol.Es por ello que el lavar el rostro al despertar y antes de dormir será vital para que la piel mantenga estable sus niveles de grasa, hidratación e iluminación natural, y además, se tengan menores posibilidades de padecer alteraciones como lo pueden ser las espinillas, barritos y sudoraciones excesivas.Si las bases de maquillaje que se aplican son demasiado grasosas, antes se deberá aplicar una crema hidratante que evite que los activos grasos se impregnen por completo al rostro, pues de lo contrario, los poros irán creando abscesos que progresivamente hagan de la cara una condición natural de exceso de sudoración y aparición de puntos negros, cuales requerirán de tratamientos más agresivos para eliminarlos sin la necesidad de estrujar manualmente a este cumulo de grasa seca y contaminada.Otro consejo es el aplicar niveles controlados de maquillaje en la zona de los pómulos, la frente y el mentón, pues es en estas áreas donde la grasa suele acumularse con mayor rapidez. Es por ello que es importante el solo utilizar una leve capa de maquillaje líquido o en pasta en donde sea necesario reducir apariencias de manchas, cicatrices o muy pequeñas espinillas. El truco está en intentar emplear poco producto y con ello distribuirlo por la totalidad del rostro, efecto uniforme y mata se puede dar con un poco de polvo compacto con activos de arroz.El exceso de rubor también provoca que la grasa luzca más grasosa o demasiado opaca, lo ideal es emplear tonalidades marrones en combinación con rosas pálidos, sin los excesos del efecto nacarado o luminoso.Tanto el rímel como el labial, también deben ser removidos en su totalidad antes de ir a la cama. En caso de no contar con un desmaquillante adecuado, lo recomendable es realizar el aseo con jabón neutro y agua fresca, de preferencia, lo más fría que se tolere, pues de esta forma se eliminan los excesos de grasa y permiten que la piel efectúa su nivelación de grasas naturalmente.Una vez seco al rostro y aún húmedo, procura retirar el exceso de agua con una toalla suave sin restregar bastante, pues esto evita que la primera capa de la piel se irrite. Al terminar, habrá que aplicar crema hidratante inmediatamente, esperar a que absorba la primera capa y después aplicar un poco más.El INFORMADOR / NORMA GUTIÉRREZ