GUADALAJARA, JALISCO (23/ABR/2017).- El vestigio de los espacios vacíos es la presencia no física de las personas que habitan los lugares, es la acción en reposo lo que se convierte en vestigio de todas estas fuerzas que transitan.La aceleración y el reposo son dos fuerzas físicas que permiten desarrollarnos a través del espacio y el tiempo, es así que convergemos en algún punto con el otro, con los rastros de lo que otros van dejando a su paso.El comercio dentro de un mercado se vuelve el punto de encuentro, la aceleración del cuerpo transporta mercancías de intercambio y va marcando el transcurrir del tiempo, sin embargo, el reposo como su opuesto es lo que nos hace detenernos y poder contemplar los vestigios de lo que un día sucedió: la instalación involuntaria, la arquitectura que fortifica y protege estos espacios que funcionan como bodega y guarida de la mercancía que nos permite el intercambio y la subsistencia.Naturaleza desfasadaA la esperaRastros humanosTesoros ocultosEscondite que alimentaFortaleza de madera