Los negocios que democratizaron al Niño Dios

GUADALAJARA, JALISCO (23/DIC/2012).- El Niño Jesús, Santa Claus y Tommy Hilfiger son por fin democráticos aquí, donde los juguetes y la ropa abundan. “Aquí” son dos tiendas de segunda mano, en dos barrios de nivel medio alto, Vallarta San Jorge y Chapalita. “Democráticos” no es una exageración; es posible encontrar desde un buen peluche por quince pesos, hasta una carriola de marca de mucho lujo por cuatro mil 500, con la inmensa cantidad de centavos y objetos que existen entre ambas cantidades.

Tres paquetes de dinosaurios Play Mobil casi sin usar, por entre 250 y 450 pesos; una consola portátil de videojuegos por 240; un abrigo Hilfiger por 100; un triciclo entero por 230; un circo completito de Fisher Price por 350, un Scrabble, una nave vintage de la Guerra de las Galaxias, el caballo mecedor de madera, osos de peluche, cunas…  todo por un tercio o mucho menos de lo que cuesta nuevo, con la ventaja de que acá no se venden celofanes ni ligas ni cajas de cartón que acabarán en el tope de los basureros a cielo abierto de Picachos y Los Laureles.

“Son tiendas verdes”, afirma María Aguirre, propietaria de uno de los negocios, en un español que arrastra las vocales y las consonantes hacia San Francisco, California, la ciudad donde nació y vivió hasta el año 2000.

En San Francisco abundan las tiendas de usado, pero María nunca las había visitado hasta hace poco tiempo, cuando decidió llevar a su hijo a esquiar y se encontró con que la ropa nueva para la nieve es muy cara. Una amiga la llevó a una tienda de segunda y María, que ya vivía en Guadalajara, pensó en la cantidad de niños que hay aquí y la cantidad de ropa y objetos de segunda que podrían venderse.

La tienda de María es un local pequeño e impecable en Hidalgo No. 3276, casi esquina con Homero, en Vallarta San Jorge. Desde julio de 2011, cuando la abrió, el espacio ha acogido desde cunas Prenatal con todo y ropa de cama por mil 500 pesos, hasta triciclos setenteros de lámina roja, como nuevos, por 200 pesos.

Las ventas son a consignación: los padres de familia llevan a la tienda los productos para bebés y niños pequeños que desean vender, la tienda les asigna un precio, los padres y la tienda comparten las ganancias de la venta.

Lo curioso es que en Guadalajara estos negocios tienen éxito rotundo en barrios de primera mano.

En Chapalita, en la Avenida Las Rosas 150, la dueña de 2a Vuelta, Martha Urteaga, relata que pocos meses después de que abrió su local, en febrero de 2010, un vecino del barrio estacionó afuera de la tienda su coche de modelo reciente sólo para preguntarle por qué ponía un negocio de segunda en la colonia.

La sorpresa para el preguntón fue que la tienda tuvo tanto éxito, que la dueña se vio obligada a rentar un local contiguo en octubre pasado.

—¿Qué le respondió al señor del carro de modelo reciente?

—Le dije: ‘Yo soy de Coatzacoalcos, Veracruz, y que no sabía que no se ponían tiendas de usado en estas colonias’.

Ni María Aguirre ni Martha son de Guadalajara. Quizá por eso, confiesan, desconocían que muchos tapatíos sienten comezón cuando oyen de la segunda mano. Ahora ambas saben que la comezón es falsa.

Es falsa o se quita en cuanto uno entra a cualquiera de las dos tiendas que huelen a bebé y donde los productos en venta están limpios, planchados y acomodados de primorosamente.

En ambas tiendas la convivencia de clases en condición de iguales es cosa de todos los días, confirman las dueñas.

El jueves, en Chapalita una trabajadora doméstica revisaba con cuidado un videojuego para su hija, mientras una abuela del barrio elegía los regalos navideños para sus nietos.

María Aguirre tiene clientes de la colonia residencial Rinconada de Santa Rita y de la paupérrima Santa Paula, en Tonalá. Su sistema de ventas ha tenido tanta demanda, que aprovecha la tarde de los sábado para citarse, en el Centro de Guadalajara, con señoras que le hicieron encargos a través de internet y que viven en el Oriente lejano de la metrópolis.

—¿Qué es lo más extraño que han recibido para vender? —se les pregunta a María y Martha.

María responde que el Súper Horno Mágico Lili Ledy, que todavía luce en un estante de su tienda, en Vallarta San Jorge, y un asiento para bañar al bebé en cualquier sitio o circunstancia, que nunca antes había visto en México.

Martha refiere unos centros de mesa de Dora la Exploradora que habían sido utilizados para una fiesta infantil y un lote de frascos de comida procesada nuevos y vigentes. Ella pensó que no se iba a vender, pero vendió en caliente.

—¿Las ventas han aumentado en estos días?

—¡Por supuesto! —responden ambas.

A veces no es que la gente gaste menos, sino que compra más, afirma Rocío Apango, dependienta del bazar de María Aguirre. “Con dos mil pesos, un trabajador de por aquí se llevó el otro día muchísima ropa y juguetes”.

Los productos en venta de los negocios de usado de Vallarta San Jorge y Chapalita pueden verse por Facebook, en los perfiles “Segunda Vuelta Las Rosas” y “Cúcara Mácara Bazar Infantil”. Ambas tiendas estarán abiertas hoy y el lunes, por lo menos una parte del día. Luego de Navidad reanudarán sus ventas para el día de Reyes. 2a Vuelta rematará su mercancía.

Por 50, 100, 150 pesos los Reyes Magos harán justicia en varios hogares, y a Ralph Lauren y Hilfiger no les quedará otra que dejar de ser exclusivos, en una ciudad donde la mitad gana menos de dos salarios mínimos.