Suplementos | El músico se ha animado a la composición para proyectos cinematográficos Kenji Kishi y la composición artesanal El músico se ha animado a la composición para proyectos cinematográficos, pero no deja de lado su pasión por la interpretación de las obras clásicas Por: EL INFORMADOR 12 de julio de 2015 - 07:10 hs GUADALAJARA, JALISCO (12/JUL/2015).-El reguetón le valió una nominación a los premios Ariel, justo en la misma terna a la Mejor Música Original en la que también estuvo el músico Meme, de Café Tacvba. Kenji Kishi Leopo no daba crédito a ese escalón en su trayectoria como compositor de música para cine. Kenji no es reguetonero, pero sí creador de música, y cuando se trata de poner su mente a trabajar no hay género ni ritmo que le intimide. Desde hace siete años comenzó a llevar esta vocación de manera profesional y los resultados han sido bastante agradables y sorpresivos, demostrándole que no se equivocó de camino, aunque ese premio Ariel no llegó a sus manos. Kenji es tapatío y la música abarca gran espacio entre sus pasiones que lo han hecho desarrollar habilidad ante la guitarra, el piano y el contrabajo y de paso a la comunicación pública, la gestión cultural y la investigación. Si bien este joven de 29 años de edad no es un novato en la industria cinéfila y musical, gracias a la película “Somos Mari Pepa” recientemente su nombre saltó a las críticas nacionales e internacionales. “Somos Mari Pepa” es el largometraje que —dirigido por su hermano, Samuel Kishi— marcó no sólo el reto de crear casi todas las canciones que nutren a la historia de “Alex”, un chico rockero que en su afán por hacer música descubre los agridulces de la adolescencia junto a su abuela, los amigos y el despertar sexual, pues el reto era crear un vaivén de ritmos que van desde el bolero hasta el punk y el reguetón. Aunque la experiencia musical para cine ya había forjado a Kenji en una docena de cortometrajes, fue “Mari Pepa” el proyecto con el que estrechó un vínculo más profundo y autobiográfico al retomar un poco de esa faceta rockera que emprendió en su adolescencia, cuando formó una banda bautizada como los “Juanitocuervos”. “Siempre hubo una inquietud por la música y empecé por la guitarra, mi papá tenía una y ya en la secundaría sí tuve mi banda rock, de ahí surgió un poco ‘Somos Mari Pepa’, de la idea de una banda amateur con chavos que eran muy malos para tocar, pero que le echaban ganas. Mi hermano retomó esa anécdota e historias de la bandita para configurar el cortometraje que después resultó en película”. En el camino Kenji no se considera un genio al que las musas llegan a su puerta para soplarle creatividad. Todo su talento se ha nutrido de diversas experiencias, aciertos e incertidumbres que lo trajeron del tingo al tango hasta definirse como músico y compositor. Aunque estudió en la Escuela de Música de la Universidad de Guadalajara, el cine lo sedujo fuertemente hasta hacerle creer que los guiones y las claquetas serían su pan de cada día, pero al intercambiar gustos y experiencias con su hermano Samuel, que finalmente se decidió por la dirección cinematográfica, Kenji retornó a los acordes luego de tener un inesperado acercamiento con el jazz, género que lo motivó a guiñarle al contrabajo. Pese a que el gusto por este instrumento sigue presente, la idea de ser solista no era una prioridad para Kenji, que finalmente, y sin saberlo, se dejó llevar por la composición para lo audiovisual, pero sin imaginar tampoco que no había un programa educativo o similar que se enfocara plenamente a esta rama. “Entras a ciegas y para mí fue raro saber cómo aplicar los conocimientos que tenía de armonía y contrapunto a una escena de algún cortometraje. Te frustras un poco porque la parte que aprendes musicalmente es netamente musical y tú quieres componer muchas cosas, meter más instrumentos”. Tras participar poco a poco en proyectos, como la tesis “Luces negras” de su hermano Samuel, Kenji fue marcando su ritmo de trabajo y aprendiendo a diferenciar las necesidades de creación personales con las ajenas que predeterminan un camino a seguir. “Vas descubriendo que lo sencillo es mejor, analizas la escena y entiendes cuál es el universo sonoro que te están proponiendo y cómo es que el personaje entra en eso con el guión, eso te da pistas. Cuando creas música como tal que no va en función de nada, estás sujeto a ti, a tu imaginación y forma de entender cómo se relacionan los sonidos, tienes una libertad muy amplia que puede ser abrumadora”. Contra la frustración Kenji Kishi ya sabe ahora cómo preguntarles a los directores qué es lo que quieren de música, ya sea que el proyecto se trate de un corto o película, o de una obra de teatro o un comercial, sabiendo que el límite de la creatividad termina o se extiende hasta el día en que está estipulado el estreno. “Ahí sí tiré la toalla una vez”, recuerda Kenji al hablar de “La otra Emma”, cortometraje dirigido por Jhasua A. Camarena, y que al no encontrar el resultado adecuado optó por decir adiós al proyecto. “Entregaba propuestas y el director decía que no, que faltaba esto y sobraba aquello. Llegó un punto en el que ya no podía, a un bloqueo en el que no sabía qué más hacer, porque ya había compuesto todos los temas a excepción de dos”, pero finalmente logró sacar adelante el trabajo. Otro de los panoramas que Kenji tiene claro es que de momento en Guadalajara la paga no es tan favorable cuando se habla de composición musical, aunque para su fortuna siempre ha habido trabajo que lo mantenga activo en diferentes proyectos que alterna con otra de sus pasiones: los ensambles de música de cámara contemporánea. “Me interesa seguir haciendo música para cine, para mí es una gran ambición, porque vivimos en México y aún más en Guadalajara, donde apenas esto está despertando. Esta ambición implica que se mueva la escena y también es ser parte de eso que puede despertar en Jalisco (…) El cine hollywoodense y esas propuestas no son yo, no es mi sello, pero sí me hablan... claro que voy”. Por Norma Gutiérrez Temas Tapatío Cultura Mexicana Música Clásica Lee También “Cómo te extraño”: el legado de Leo Dan Peso mexicano cierra la jornada A LA BAJA, en el PRIMER DÍA del año Incremento del IEPS en 2025: Impacto en gasolinas, bebidas y otros productos ¿Qué contiene el paquete económico 2025? Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones