Estrenan hábitat en el Zoológico

GUADALAJARA, JALISCO (20/OCT/2014).- El verano pasado el Zoológico de Guadalajara inauguró está instalación destinada a complementar el hábitat en cautiverio de sus orangutanes. Este tipo de instalación es la primera en México y en toda Latinoamérica y se contó con la asesoría de Hidetoshi Kurotori, del Zoológico UENO de Tokio, quien visitó la ciudad y el zoológico para conocer las instalaciones.

En su experiencia profesional ha brindado asesoría a los zoológicos en Estados Unidos, por lo que de ahí surgió el contacto para que apoyara con sus conocimientos el diseño, especificaciones, el tipo de cable y los materiales a usar. En el mundo sólo existen estructuras similares en Estados Unidos, Japón y Australia.

Además de su labor en el Zoológico UENO de Tokio, Hidetoshi Kurotori es miembro del Centro de Investigación sobre la Vida Silvestre, en la Universidad de Kioto y de la ONG Borneo Conservation Trust, en su sede en Japón.

En el zoológico tapatío vive una familia de orangutanes, con cinco integrantes: papá y mamá, con treinta años de edad, y tres hijos, con edades de veinte, cinco y un año. La altura que alcanzan estos animales es de 1.60 metros, por ello los cables paralelos que van de una torre a otra distan 1.50 metros. Los cables son de acero, con un recubrimiento plástico, con un grosor de cuatro pulgadas.

La instalación se trata de una serie de ocho torres con una altura entre quince y veinte metros, para un recorrido de 150 metros. La primera de ellas se encuentra en el albergue de los orangutanes, un aérea de unos 500 metros cuadrados. El resto de las torres van hacia afuera de su área, pero sin pasar sobre el espacio otros animales para no ponerlos nerviosos.

En Guadalajara Hidetoshi Kurotori tuvo la oportunidad de observar la instalación ya lista: “Es un gran proyecto, el resultado es muy bonito”, comentó. En total tomó seis meses en la planeación, diseño y construcción. Se sorprendió de la rapidez con la que los orangutanes se apropiaron de las torres, pues en Tokio tardaron en cruzar dos meses, mientras que en Guadalajara demoraron sólo dos días para estrenar la instalación.

Luis Soto aclaró que como mínimo los orangutanes hacen el recorrido dos veces al día, por la mañana y por la tarde. Por el temperamento de los machos adultos el papá de está familia no sube, pues es más introvertido. Para estimular que se suban colocan comida en la última torre.

En Japón son cinco zoológicos los que cuentan con este tipo de instalaciones, la más grande está en Tokio, “Es triangular. Es importante que les recuerde a los árboles”. Kurotori aclaró que la iniciativa surgió hace nueve años, en 2005. En el zoológico nipón la usuaria mayor fue una orangután de 60 años de edad.

El profesional japonés aclaró que estas instalaciones son una exhibición para la gente, pero también ayudan a los orangutanes. Luis Soto, veterinario encargado del área de los primates, agregó que esta implementación trae beneficios en la salud para los animales: “Es ejercicio, es como ir al parque a correr”. Pablo Varela, director técnico del zoológico, comentó que la revisión de su estado de salud es constante, y sí ha habido un notorio cambio en el pelaje y la musculatura de los orangutanes.

Pero no sólo la salud física es importante para Hidetoshi Kurotori, ya que hay que cuidar la salud mental de los animales en cautiverio: “Quieren escalar, deben tener su espacio para ello. Los espacios para chimpancés y gorilas son diferentes”.

Por la naturaleza de los orangutanes es seguro que no van a brincar más allá de los cables, pues antes de soltarse de un cable necesitan tener el contacto seguro con otro. Además, el diseño de los cilindros en lo alto de las torres está hecho con la intención de que los orangutanes no puedan descender.

EL DATO
Se sorprende la gente

Soto y Varela señalan las reacciones de la gente en el zoológico, pues por lo regular les sorprende ver a los animales estar desplazándose por los cables por encima de los pasos peatonales: “Piensan que se escaparon”.

Replicar su ambiente, fundamental

La iniciativa de este tipo de instalaciones es replicar el hábitat natural de los animales. En el caso de estos primates, sus necesidades son trepar y moverse por las alturas, por ello las torres con un par de cables paralelos para que los orangutanes se trasladen de un lado a otro. El atractivo para los visitantes al Zoológico Guadalajara es que los animales se ven de una manera distinta a la que están acostumbrados.

La cría más pequeña de la familia cruzaba la estructura junto a su madre en el principio, pero pronto se ánimo a hacerlo sólo. Esto sorprende a los visitantes del zoológico por el pequeño tamaño del orangután moviéndose en lo alto de un lado a otro.

Las torres están cercanas a la gente, incluso en el tour en el teleférico que recorre el zoológico pasan cerca de los animales, a una distancia segura. El tour en teleférico está en el zoológico desde el año pasado y el paseo dura 30 minutos. El teleférico forma parte de las innovaciones que la dirección busca incorporar: además de la instalación para los orangutanes ha habido exposición de cangrejos en el acuario, y en el espacio de safari una nueva con cocodrilos.