GUADALAJARA, JALISCO (10/AGO/2017).- Si fumas mucho, seguro ya sabes que necesitas dejarlo. Es malo para tu corazón, pulmones, cerebro, e incluso la vida marital. Pero ya en serio: no lo has dejado porque es bastante difícil. Aun así, ¿te atreves a poner tu belleza en riesgo? Y es que los efectos colaterales de esta adicción van minando poco a poco todo tu cuerpo.El primer efecto, las ojeras. ¿No las odias? Si fumas, tienes cuatro veces más probabilidades de dormir mal. Es posible que la nicotina te provoque insomnio, y tus ojeras serán las primeras en decirle al mundo lo que está pasando.Segundo gran problema, la psoriasis. Es una enfermedad autoinmume que a veces aparece sin la necesidad de haber tocado siquiera un cigarrillo. Sin embargo, si fumas, tu riesgo de tener esta condición aumenta, y muchísimo. De acuerdo a un estudio realizado en el año 2007, si te fumas una cajetilla a lo largo de una década, el riesgo que enfrentas de padecer psoriasis sube un 20%.Otro “regalo” de fumar son los dientes amarillos. ¿No te gustaría tener una sonrisa hermosa? Pues no la conseguirás si sigues fumando. Esto deberías saberlo: la nicotina mancha los dientes. En pocos años el cambio en tu dentadura será muy aparente.Uno de los efectos más temidos es el envejecimiento prematuro y arrugas. Las arrugas se ven de todo, menos estéticas, mucho menos en una persona joven que fuma. Los expertos sugieren que fumar acelera el envejecimiento. De hecho, las personas que fuman se ven 1.4 años más viejas que los demás.Los problemas del cigarro llegan incluso a tus manos, con los dedos amarillos. La nicotina del cigarro no sólo mancha de amarillo los dientes (y las paredes de tu hogar), sino que también mancha los dedos y uñas. Si buscas en Internet, puedes encontrar muchos remedios caseros, incluyendo jugo de limón, etc.El problema del cigarro incluso llega a tu cabeza, pues provoca el adelgazamiento del cabello. Si la piel arrugada no fuera suficiente, el cigarro también afecta tu cabello. Los expertos creen que los químicos tóxicos del cigarro dañan el ADN del folículo del cabello y genera radicales libres. ¿El resultado? Los fumadores tienen cabello más delgado que, con el paso del tiempo, perderá su color antes que las personas normales.