Cuando el corazón vuelve a latir

GUADALAJARA, JALISCO (22/MAY/2014).- La vida está llena de retos que el ser humano debe afrontar en un camino que muchas veces es muy largo. Uno de los más complicados es afrontar la pérdida de la pareja, el adiós a un amor que en el altar prometía ser eterno en alma y cuerpo. En las relaciones de pareja donde hubo un gran amor es inevitable que cuando uno de los dos falta por la razón que sea, el que se queda en este mundo vivirá un proceso de duelo para poder sanar y adaptarse a nuevas condiciones en su vida.

La psicoterapeuta, Gloria Alicia García Ramírez, comparte que cada persona es distinta, y su manera de asimilar los cambios será de maneras diferentes, pero que lo que se considera como una situación normal de “duelo” es un proceso que puede ir de las seis semanas a los cuatro años. “Para encontrar de nuevo el amor, volver a casarse o buscar una pareja, primero hay que superar un duelo porque si no lo hay, es más difícil volver a enamorarse”.

El duelo es el proceso de adaptación que permite restablecer el equilibrio personal y familiar roto con la muerte de la pareja o del ser querido y resulta especialmente relevante cuando se pierde a alguien muy importante, confiesa la doctora. “Es un gran dolor, hay una reestructuración y una desorganización, si se quedan anclados en alguna etapa del duelo es más difícil salir, por eso hay personas que se quedan solas, porque no llevaron el proceso adecuadamente”.

El saber decir adiós

Cuando una persona afronta una pérdida, los sentimientos como de negación, irá y tristeza son la constante, y si estos no logran ser superados se pueden convertir en una depresión que deberá ser tratada por un especialista. Después de que desaparecen estos sentimientos llega una nueva etapa que es la aceptación, cuando la persona comienza a comprender lo que le está pasando y finalmente viene la esperanza, cuando se vuelven a retomar las ganas de salir adelante y de restablecer sus actividades cotidianas.

Según la doctora, el hombre supera más rápido el duelo porque él siempre tiene el apoyo en la mujer. “Él todo va y lo comunica con ella, hay una serie de cosas que hacen juntos. La gente me pregunta que: ‘¿porqué los hombres se casan tan rápido?’, piensan que es porque tienen necesidades físicas, pero esa no es tanto la razón. Lo que sucede es que el hombre tiende a apoyarse en su pareja, por lo que supera su soledad buscando a una nueva mujer. Por el contrario, las mujeres pueden encontrar apoyo emocional  en otras personas, incluso cuando su círculo de amistades se vea reducido. Es probable que las mujeres estén más preparadas para vivir solas”.

¿Qué no debe hacerse cuando se reinicia una relación?

Cuando un viudo o viuda decide volver a rehacer su vida, el ciclo comienza de nuevo, no todas las parejas que conocerá serán las ideales para formalizar, pero es claro que alguien que haya superado una pérdida del ser amado, no debe estar tomando como terapeuta a su posible pareja, pues lo que ocasionará será un fastidio por parte de ella. “Es muy importante ver que si la etapa de duelo ya está resuelta es porque la persona ya puede manejar sus emociones, se levanta con energía y comienza a reorganizar su vida. Muchas mujeres que salen con otros hombres sienten que tienen una conducta inapropiada o desleal hacia su pareja fallecida, pero esto ellas lo deben superar. También no hay que tomar de terapeuta a la pareja para platicar de su esposa o esposa”.

Para tomar en cuenta

La doctora Gloria Alicia comparte que es normal que las personas que acaban de tener la pérdida de su esposo o esposa sufran de problemas físicos como episodios de llanto que tienen que ver con los recuerdos de un evento o fechas de aniversario, el olor de la ropa y objetos que fueron personales del ser querido. También se pueden manifestar  diarreas, mareos, latidos cardiacos más rápidos, alucinaciones, falta de apetito, inquietud, angustia, ansiedad y problemas para dormir. Para ello, la especialista recomienda que se acuda a centros de apoyo de personas que pasan por lo mismo, o se acuda a terapia, incluso platicar con familiares y amigos puede ser un gran paso.

El amor resurge

En las próximas fechas llegará a la cartelera nacional la cinta Reinventando el amor que tuvo su estreno el año pasado en Estados Unidos. Y precisamente la cinta del director Arie Posin gira sobre la etapa de un nuevo amor en la vida de una mujer, que vive la plenitud de su edad y que ha pasado por el duelo de la partida de su esposo.

Cinco años después de perder el amor de su vida, Nikki (Annette Bening)  se enamora de Tom (Ed Harris), a quien considera el hombre de sus sueños. Es un atractivo profesor de arte con un gran corazón, sonrisa amable y mucha vitalidad. Pero al desarrollarse la trama, se descubrirá si la atracción que siente Nikki de verdad se está convirtiendo en amor o sólo es una ilusión porque el nuevo hombre en su vida guarda un parecido extraordinario con su fallecida pareja.

Para Annette, está cinta resulta interesante porque aborda temas como la pérdida y el dolor, pero también sobre el recomenzar una ilusión. “El dolor y la pérdida son el combustible para el encaprichamiento. Y yo no creo que el personaje supiese cuan desesperanzada estaba al haber perdido a su marido, creo que pensó que era alguien que se había ido y que tenía que continuar con su vida y vivirla con normalidad, pero al encontrar a alguien más su deseo se vuelve más electrizante y de nuevo se siente como una chica pequeña que vuelve a enamorarse”.

El elenco del filme también está complementado por Robin Williams, que será el consejero sentimental de Nikki y las actrices Jess Weixler y Amy Brenneman. Los guionistas son el propio Posin y Matthew McDuffie.

PERFILES

Annette Bening (Nikki)

La nominada cuatro veces al Oscar, encarna a Nikki, una viuda que luego de cinco años recobra las ganas de amar, sólo que el hombre que ahora le roba el aliento es idéntico a su difunto esposo. Para ella surgirán mil dudas sobre esta relación que comienza a gestarse.

Ed Harris (Tom)

También el multinominado al Oscar por películas como Las Horas y Apolo 13, da vida a Tom, un profesor de arte que pronto se enamorará de Nikki y que al principio se ve desconcertado por el interés que ella tiene. De alguna manera tendrá que pelear con el fantasma del difunto esposo de Nikki.

Robin Williams (Roger)

El ganador del Oscar por El Indomable Will Hunting y premiado con cinco Globos de Oro por Mork & Mindy, Good moornig Vietnam y The first king, Mrs. Doubtfire. Encarna a Roger, una especie de consejero sentimental de Nikki que será como una conciencia en la vida de esta mujer.