Consejos para invertir en tu futuro

CIUDAD DE MÉXICO (21/DIC/2015).- Lo mejor que puedes hacer en esta vida es invertir en ti mismo y en tu futuro. Y aunque todavía no sepas qué camino vas a tomar o si quieres casarte o tener hijos, tu futuro está ahí: en frente de ti esperándote. Las decisiones en los años posteriores serán mucho más sencillas de tomar si empiezas a invertir en ti mismo desde ahorita.

- Conocimientos: Si te preguntas cada noche: “¿cómo puedo invertir en mi futuro?”, deberías considerar en tu educación a largo plazo. Un título, una maestría o una carrera técnica te ayudarán a lograr muchísimas metas. Una buena educación puede darte un buen trabajo, nuevas oportunidades, un salario digno y hasta desarrollo personal. Y que un diploma no te detenga, sin importar tu sexo, edad o color de piel, puedes aprender lo que quieras.

- Fondo de emergencia: Tú nunca sabes cuándo va a pasar algo malo. Te agarrará desprevenido y, a menos que hayas ahorrado, podría costarte muy caro no haber pensado en las emergencias. Ya sea para una enfermedad, un desastre natural o incluso el apocalipsis zombie, siempre debes tener un fondo de ahorros.

- Empezar un nuevo negocio: Tener un negocio exitoso con ingresos consistentes es algo muy difícil de conseguir, pero es mucho mejor a largo plazo. Créenos, el compromiso y la determinación serán le mejor inversión para tu futuro.

- Un hogar: Si ya sabes dónde quieres quedarte, lo mejor es que inviertas en una casa. No tienes que hacerlo con el primero préstamo, la verdad es que no es una decisión sencilla (ni económica) que deberías de tomar en algún momento, pero te aseguramos que sería una excelente inversión, tanto para ti, como para tu familia.

- Hijos: Naturalmente, todos quieren tener un futuro económicamente estable, pero es igual de importante cuidar del futuro de los chamacos. Y tener un hijo es una decisión difícil de tomar, pero lo es aún más por la inversión que ameritan.

- Pensión: A tus veintitantos no tendrás que pensar en una pensión, pero más adelante será una necesidad. No querrás sentirte como una carga con tus hijos o con tu familia, así que lo ideal sería ahorrar para tu vejez desde el momento en que estés económicamente estable.