Por la mala calidad del agua potable que se presenta en la Entidad, principalmente en la Zona Metropolitana de Guadalajara, sólo uno de cada 10 jaliscienses afirma que la bebe sin temor a enfermarse. La mayoría evita esta práctica y consume agua de garrafón.Lo anterior, según la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental del Inegi, en la que puede observarse que Jalisco se ubica entre las cinco Entidades con los peores promedios (con 9.5%); incluso, por debajo de la media nacional, que es de 24.4 por ciento.Rodrigo Macías declara que “nunca tomaría agua de la llave” porque en algunas ocasiones sale muy sucia. Comenta que el mes pasado, cuando se realizaron los cortes para dar mantenimiento a la red de agua potable en la ciudad, en la colonia Morelos en Guadalajara, “el agua estaba muy revuelta”.“Lo poco que recibíamos era de color café. Luego se regularizó el servicio, pero es un problema que se presenta en algunas ocasiones… el agua ni siquiera sirve para lavar la ropa”.Juan Guillermo Márquez, coordinador del Observatorio Ciudadano del Agua, explica que la mezcla del agua de diferentes procedencias para abastecer a la población, es uno de los motivos para no recibir un servicio de calidad. “Es sumamente difícil que se pueda tener en Guadalajara agua de calidad, que pueda beber la persona directamente de la llave y sin enfermarse”.Recuerda que los representantes del sector empresarial que formaron parte del Observatorio del Agua, insistían en que debía ponerse énfasis sólo en el volumen y no tanto en la calidad.VOZ DEL EXPERTOJuan Guillermo Márquez, coordinador del Observatorio Ciudadano del Agua.“Es sumamente difícil que se pueda tener en Guadalajara agua de calidad que pueda beber la persona directamente de la llave sin enfermarse”, subraya Juan Guillermo Márquez, coordinador del Observatorio Ciudadano del Agua.Esto con relación a que en Jalisco sólo una de cada 10 personas refirió que el servicio del agua potable es bebible sin temor a enfermarse, según la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental.Uno de los motivos, considera, es la mezcla del agua de diferentes procedencias para abastecer a la población.“La causa más común y que se ha acentuado en los últimos meses, sobre todo a partir de que anunciaron que habían terminado el Acuaférico, pues es que con éste se mezclan todas las aguas. Se uniforma un tanto la calidad del agua, pero a la baja”.Comenta que el agua que se suministra de Chapala (70% del líquido que llega a la ciudad), sigue llegando “turbia, amarillenta y con residuos”.Con esa condición de mezclar el agua de diferentes orígenes, insiste, es prácticamente imposible que se pueda traer agua para beber, “a menos que el tratamiento que se diera a todas las fuentes que se inyectan hacia esa red de distribución, que tuviera la calidad adecuada para un agua que se pueda beber sin enfermarse”.Recuerda que el sector empresarial que formó parte del Observatorio del Agua, insistía en que el énfasis debía ponerse sólo en el volumen y no tanto en la calidad. “Es una situación muy delicada la que se tiene en Guadalajara”.María Meza Martínez es vecina de la colonia El Tapatío, de Tlaquepaque, y desde ayer ya es beneficiaria del programa “Nidos de Lluvia”, el sistema de captación de agua de lluvia lanzado por el gobierno estatal en busca de mejorar el abasto de este recurso en la ciudad. María cuenta que para ella y las tres personas que viven en su casa, es un calvario cuando hay cortes de agua porque esto dificulta sus actividades de aseo diarias, como bañarse, o lavar ropa y trastes. Sin embargo, gracias a su “Nido de Lluvia” podrá reunir agua durante el temporal que está a punto de comenzar.“No tenía yo ese sistema y tampoco tenía aljibe, y ahora que me lo instalaron estoy muy contenta porque voy a tener agua para todo lo necesario”, destaca.La casa de María es una de las 26 beneficiadas de la colonia El Tapatío, como parte de la ampliación del proyecto.El programa piloto arrancó en agosto de 2021 con un total de 600 aparatos instalados en Zapopan, y para este 2022 aprobaron 971 nuevos sistemas, de los cuales 719 ya fueron instalados.“El año pasado nos concentramos en Zapopan, este año incluimos a Guadalajara, Tlaquepaque y Tonalá. Va el proyecto avanzando muy bien, va tomando forma. Afortunadamente este año no tuvimos un problema de abasto como el año pasado, pero creo que será una apuesta de largo plazo que va a funcionar”, expresó el gobernador.La alcaldesa de Tlaquepaque, Citlalli Amaya, agradeció que se considerara a esta colonia para instalar los “Nidos de Lluvia”, pues es una de las que suele verse más afectada por la falta de agua durante la temporada de estiaje, debido a que la altura en la que se encuentra complica el bombeo del líquido.La calidad del agua del río Santiago continúa sin mejorar, incluso, ubicándose por debajo de promedios que se registraron en años previos a la implementación de la estrategia integral de saneamiento que puso en marcha la actual administración.El Índice de la Calidad del Agua (ICA) es de 44.4%, con corte a febrero pasado, lo que significa una clasificación “mala”. De acuerdo con el histórico de esta herramienta que se tiene en el micrositio estatal para analizar el cuerpo de agua, el mejor año fue en 2014, cuando se ubicó en 46.5%, aunque se mantenía en la misma categoría.En el portal de la estrategia para la recuperación integral del río Santiago se puntualiza que para su evaluación y seguimiento fue necesario desarrollar este índice “simple, capaz de expresar la información generada por las campañas de monitoreo, y construido con rigurosidad científica”.El ICA permite agrupar los indicadores físicos, químicos y biológicos más importantes que reflejan la calidad del agua; valorar el impacto de los diferentes contaminantes; reflejar los cambios de tendencias y mejoras en la calidad del agua, entre otros.Se agrega que es una herramienta desarrollada específicamente para las condiciones del río Santiago y con criterios de protección para la vida acuática.El mes pasado, Sergio Graf Montero, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet), reconoció que el saneamiento de este cuerpo de agua es complicado y los resultados se verán a largo plazo.“Sus procesos de depuración natural son muy difíciles… son ríos que tardan muchísimo y que han venido acumulando cargas contaminantes en sedimentos. Hay que poner eso sobre la mesa, porque muchas veces se dice que no avanzamos lo suficiente, pero es la primera vez que se aborda el problema de una manera integral”, justificó.Juan Guillermo Márquez, coordinador del Observatorio Ciudadano del Agua, declara que esto obedece a que las macroplantas de tratamiento se construyeron sólo para tratar aguas de uso doméstico.“En la medida que tenga descargas de otra naturaleza y que tengan agentes químicos de limpieza, desestabiliza de alguna manera esas plantas de tratamiento y sobre todo quedan prácticamente inoperantes durante las lluvias”. Agrega que probablemente no se le está dando el tratamiento adecuado.De acuerdo con el Informe “Avances Ciudadanía Saludable en El Salto”, elaborado por la Secretaría de Salud como parte de la estrategia de saneamiento del río Santiago, este municipio presenta una tasa de 15.5% de mortalidad por insuficiencia renal, por arriba de la media estatal que es de 14.8 por ciento.“En relación con la mortalidad, en general las tasas de muerte específicas por las principales causas se encuentran por debajo a la media estatal, a excepción de las muertes debidas a homicidios, que se encuentran muy por arriba de la media estatal, los suicidios y la insuficiencia renal que se encuentran ligeramente por encima de la tasa estatal”, según refiere el documento entregado por Transparencia. Alan Carmona, integrante de la Asociación Un Salto de Vida, considera que el promedio podría ser más alto. “A nosotros nos consta que muchos de los registros que se hacen de estos, nos los registran como muertes por enfermedades renales sino como muertes por insuficiencia respiratoria o cardiorrespiratoria”.Adán Flores, presidente de la asociación civil Un Salto con Destino, informa que los medicamentos para atender a las personas enfermas por fallas renales son muy caros y “están muy escasos”.Para una persona que tuvo un trasplante de riñón, sus medicamentos pueden rondar los 40 mil pesos. “Son medicamentos muy costosos. Es una enfermedad muy costosa, además del calvario de todo lo que sufren los enfermos. Es algo muy triste”.Pese a que hace dos años se anunció la creación del Registro Estatal de Enfermedad Renal Crónica y el fortalecimiento del Registro Estatal del Cáncer, éste aún no concluye, según información otorgada por la Secretaría de Salud.En el documento, la dependencia subraya que el registro permitirá tener un panorama real de las personas a las que se les ha realizado un diagnóstico de enfermedad renal crónica o los distintos tipos de cáncer, así como su ubicación geográfica y otras características que permitan identificar posibles factores de riesgo.SABER MÁSLos principales resultados que se esperan obtener para 2024 son:TELÓN DE FONDODe acuerdo con el inventario estatal de plantas de tratamiento de aguas residuales de la Comisión Estatal del Agua de Jalisco (CEA), de un total de 231 que hay en la Entidad, 80 se encuentran fuera de operación; es decir tres de cada 10.Además, otras dos se encuentran en construcción (con corte a marzo pasado), en los municipios de Valle de Juárez y Zapopan. Esta última ubicada en la cuenca hidrológica río Santiago-Guadalajara.La actual administración puso en marcha un plan para rehabilitar y construir nuevas plantas de tratamiento, como parte de la estrategia para sanear el río Santiago, aunque la contaminación continúa casi en los mismos niveles.Juan Guillermo Márquez, coordinador del Observatorio Ciudadano del Agua, declara que en algunos municipios han observado que a pesar de que se invirtió “mucho dinero”, los tratamientos no mejoraron el líquido de manera sustancial.“No han diseñado un esquema adecuado junto con los municipios para que puedan operar de manera óptima y dentro de la norma”.Señala que esto no cambiará mientras la agenda política y económica sea la dominante en Jalisco en esta materia. “Hacen construcciones o adecuaciones que tienen un costo elevado, comparado con el nivel de efectividad que están teniendo”.El tema político, dice, es anunciar con bombo y platillo grandes inversiones, “pero considero que en la práctica no están teniendo los resultados como lo vemos en el caso del río Santiago, se presumen millones (de pesos) en gasto pero no dan los resultados que deberían”.¿Usted toma agua de la llave?Participa en Twitter en el debate del día @informador
