El pasado 21 de octubre, José Antonio y Víctor Eduardo robaron con violencia la motocicleta de un hombre en la Colonia Puertas del Rosario, en Tonalá. La víctima tuvo la suerte de que policías pasaran por el lugar, por lo que lograron detenerlos cuadras adelante con un cuchillo y una pistola de juguete.Desde 2016, la Fiscalía del Estado recibió denuncias por el robo de 15 mil 685 motocicletas, pero en ese periodo sólo han vinculado a proceso a 158 individuos: apenas una persona por cada 100 motos robadas en Jalisco. Este delito tiene una impunidad de 99 por ciento.Y de los procesados, aproximadamente dos de cada 10 resultan con sentencia absolutoria y otro tanto son señalados por robo equiparado; es decir, que circulaban en una moto con reporte de robo, pero ellos no la hurtaron.“A los que agarran robándose la moto no es una persona de cada 100… es menor. Detienen a los que van manejando en moto con un reporte de robo, pero la pudieron haber adquirido de buena fe, la compraron en algún lado”, advierte Rubén Ortega, investigador de la Universidad de Guadalajara.Fuera de la Zona Metropolitana de Guadalajara la impunidad es casi absoluta, pues de acuerdo con datos de la Fiscalía Regional de Jalisco, en 2016 no se procesó a ninguna persona por el robo de motocicleta. Lo mismo ocurrió entre los años 2017 y 2018. Fue hasta 2019 cuando se documentaron siete personas procesadas y, en 2020, suman cuatro hasta el último corte de septiembre (en ese periodo fueron robadas seis mil 581 motocicletas en el interior del Estado).Ortega considera que hay pocas personas vinculadas a proceso porque no es uno de los delitos prioritarios para las autoridades.Oficiales de la Comisaría de Tlajomulco patrullaban el martes pasado por las calles del Fraccionamiento Los Fresnos III. Al circular en el cruce de Circuito Violeta y Paseo de Los Girasoles vieron una “motocicleta mal estacionada”. Y como ningún vecino atendió el llamado ni se acercaron para reclamarla cuando inspeccionaban, decidieron solicitar datos sobre la moto modelo 2010. Desde cabina les informaron que la habían robado desde hace más de dos años en Zapopan. Actualmente, Tlajomulco es de los municipios que más ha recuperado motocicletas robadas, debido a su sistema de cámaras de vigilancia y los lectores de placas. Pese a eso, en el resto de la Entidad la recuperación de estos vehículos se desplomó, comparando las cifras con el año pasado.En 2019, se reportaron tres mil 768 motocicletas robadas, pero según la Fiscalía de Jalisco se recuperaron en ese año mil 222 (con reportes de robo de distintos años); es decir, 32% de la cantidad robada ese año.En contraste, entre enero y septiembre pasados ya se robaron dos mil 077 motos, pero en lo que va del año se han recuperado sólo 462; esto es, 22% con relación al total de los hurtos que van en el año.Rubén Ortega, académico de la Universidad de Guadalajara, observa dos factores principales en la disminución de la cantidad de motos recuperadas, uno de los cuales es el COVID-19. “Cuando se hacen los operativos recuperan bastantes motocicletas, pero ahora con la pandemia se ha visto un menor número de operativos de este tipo y es donde los números indican que ya no se recuperan tantas motos”.El otro problema es la falta de interés que provoca que las autoridades no se enfoquen en atacar este delito. “Deben hacer el trabajo de inteligencia, ubicar cuáles son las bandas, dónde las venden, a quiénes se las entregan… y una vez que la Policía de Investigación hace su labor, pueden detectar los lugares donde las comercian. Es una forma más eficaz para recuperar las motocicletas en mayor volumen”. * Hasta septiembre. * Hasta septiembre.SANTA FE, LA ZONA CON MÁS AFECTACIONESComo en prácticamente toda la incidencia delictiva, Guadalajara encabeza la lista de municipios con robos de motos en Jalisco, pero en la zona donde más ocurre este delito es en Santa Fe, en Tlajomulco de Zúñiga.Esto tiene relación con la cantidad de personas detenidas en ese municipio, que hasta septiembre pasado sumaban 107 detenidos en motocicletas robadas, de acuerdo con información de la Fiscalía del Estado proporcionada vía Transparencia. No obstante, el Ayuntamiento afirma que las personas que han puesto a disposición del Ministerio Público por este delito han sido más: 195 hasta el 20 de septiembre.Con independencia de la cifra absoluta de detenidos, ninguno de los presuntos delincuentes ha sido vinculado a proceso en ese municipio por el robo de motocicletas, pues según la Fiscalía Regional, la cantidad de procesados de enero a septiembre es cero.Fuera de los municipios de Guadalajara, Zapopan, Tonalá y Tlaquepaque, en 2020 han sido vinculadas a proceso sólo cuatro personas por este delito: una fue en Lagos de Moreno, otra en El Salto, una más en Zapotlán, así como en Puerto Vallarta. “Parece chiste, pero es anécdota”, resumió Diego Villalobos sobre su experiencia después de que le robaron su motocicleta en la Colonia La Calma, en Zapopan, en el año de 2016, pues al día de que se la llevaron de su casa la recuperaron, pero nunca le notificaron, sino que lo descubrió casi un año después, cuando se la “robaron” del corralón donde la resguardaban.Diego aclara que la motocicleta la adquirió justamente en una subasta del extinto Instituto Jalisciense de Asistencia Social (IJAS). No era una moto cualquiera, sino una de pista Suzuki GSX R1000, que le costó 70 mil pesos, según el avalúo de la dependencia estatal.Fue el 18 de agosto de 2016 cuando regresó de su casa y descubrió que se la habían llevado de su cochera. Lo primero que hizo fue llamar a los policías de Zapopan, quienes le tomaron el reporte y lo instruyeron a presentar una denuncia, lo cual hizo.Pero pasaron los días, semanas y meses, y las autoridades no lo llamaron, por lo que en junio de 2017 se le ocurrió llegar al depósito del IJAS cerca de la ex penal de Guadalajara para preguntar por su moto.“Sí salió, la moto ya estaba en resguardo. Me dijeron que la recuperaron y que estaba en el depósito de San Agustín”.En el sistema de la Fiscalía la motocicleta aparecía como recuperada, pero a la vez con reporte de robo.“Nunca se hizo la relación de que era la misma moto”.Cuando fue a San Agustín le informaron que ya la rematarían, por lo que debía apurarse con los trámites en el llamado Centro de Devolución Vehicular Inmediata (CDVI).Cinco meses después, en noviembre, le emitieron un documento que le permitía hacer la búsqueda en el patio del IJAS y ponerla en su resguardo, lo cual hizo, pero ya no la encontró, por lo que debió denunciar por segunda ocasión el robo de su motocicleta. Recuerda que el director del corralón decidió renunciar en esos días.Con el nuevo robo, tuvo que tramitar una solicitud de responsabilidad patrimonial para exigir el pago de la moto que le robaron. Fue un mes después cuando le pagaron lo que consideraron que costaba: 45 mil pesos, pese a que la compró con base en su avalúo en 70 mil.“Ellos pueden hacer las cosas y no las hacen. Es muy burocrático todo. La moto la compré con ellos y ellos tienen el registro de los compradores, pero no me hablaron cuando la encontraron”.Rubén Ortega, investigador de la Universidad de Guadalajara, lamenta que muchas de las motocicletas que son recuperadas no regresan a sus dueños porque la Fiscalía no lleva a cabo los actos de investigación.“La gente no se da cuenta de que ya recuperaron su moto porque ni siquiera los agentes hacen la investigación, de ir a los retenes y ver qué motos están relacionadas con una carpeta de investigación. En Jalisco la entrega de un vehículo robado es muy tardada”.Por cierto, la motocicleta la hallaron estacionada al día siguiente del primer robo en la Colonia Arboledas y nadie fue detenido ni por este delito ni por el ocurrido en el patio del IJAS, a cargo del Gobierno de Jalisco.- Rubén Ortega, investigador de la UdeG.- Anuar García, presidente de México SOS Capítulo Jalisco. El robo de motocicletas es un delito que debe atenderse con la misma prioridad que otros de alto impacto, pues tiene relación directa con otros crímenes, tanto patrimoniales como contra la integridad de las personas. Además, este ilícito “le pega más quienes menos tienen”, afirma Anuar García Gutiérrez, presidente de México SOS Capítulo Jalisco.“Estas motos de bajo cilindraje, que son las que más se roban, la gente que trabaja las compra a pagos mensuales en alguna tienda y son los que más sufren cuando se las roban y no las recuperan”.Recuerda que antes se registraban mejores resultados en cuanto a la cifra de motos recuperadas porque las corporaciones policiales entregaban a sus oficiales bonos por cada unidad encontrada; no obstante, este beneficio dejó de otorgarse.“Eso dejó de motivar mucho, porque se contaba con elementos y escuadrones especiales que se dedicaban a eso”.Esta práctica debe volver, insiste. Además, por los beneficios para los policías.Otro problema es la falta de coordinación entre las corporaciones municipales, la cual no ha mejorado con la Policía Metropolitana por la falta de recursos.Finalmente, explica que hay poca efectividad del Escudo Urbano C5 para identificar las placas de las motocicletas robadas y otros vehículos. Esos tres elementos incidieron en la reducción de la efectividad para recuperar motos y detener personas.“Lo más seguro cuando se roban una moto es para delinquir, ya sea para robar o para consumar ejecuciones de personas. Somos el segundo lugar a nivel nacional en robos de motocicletas, sólo detrás del Estado de México. Como muchas de éstas no valen tanto, es sencillo para los delincuentes hacerlas a un lado y luego robarse otra”. - Anuar García, presidente de México SOS Capítulo Jalisco.Artículo 234 Se considerará como robo para los efectos de la sanción: Utilizar vehículos automotores robados a sabiendas de su origen ilícito.Artículo 235 Al responsable del delito de robo simple se le impondrá como sanción: De tres a 10 años de prisión y multa por el importe de 150 a 200 días de salario mínimo, cuando el valor de lo robado exceda de mil días de salario.Artículo 236 El delito de robo se considera calificado cuando: Recaiga sobre vehículos automotores.Artículo 236 Bis Al responsable del delito de robo calificado se le sancionará de acuerdo con las reglas que se consignan en los siguientes apartados: De nueve a 20 años de prisión y hasta mil días de multa, cuando intervenga la calificativa que se consigna en la fracción IX.Sigue #DebateInformador, participa en Twitter en el debate del día @informador¿Qué opina del combate a la delincuencia en Jalisco?JL