“El operador traía cubrebocas, pero tenía descubierta la nariz y la boca. Y durante el trayecto se dio el tiempo de contestar una llamada mientras conducía y sin usar el manos libres”, denunció Francisco García, quien el pasado miércoles abordó una unidad de la ruta 622, en Manuel Acuña y Terranova.Por no usar la mascarilla o no portarla de manera correcta, y porque los camiones no están sanitizados, desde el pasado 22 de junio a la fecha, elementos de la Secretaría de Transporte (Setran) han infraccionado a mil 573 conductores del transporte público y 274 derroteros, informó la dependencia estatal vía Transparencia.Isaías Ramírez Ortiz, director de Supervisión al Transporte, destacó que el operativo consiste “básicamente en que cada ruta tiene que sanitizar sus unidades entre las vueltas, porque tenemos mucha gente que usa el transporte público”.Puntualizó que las infracciones van de uno a 150 salarios mínimos (hasta 13 mil 032 pesos de sanción económica).Desde el 22 de junio, el uso de cubrebocas es obligatorio en el transporte público para prevenir contagios por el COVID-19. Sin embargo, muchos de los conductores y usuarios se niegan a utilizarlo o colocárselo de forma adecuada.Francisco García, usuario de la 622, acentuó que durante el recorrido observó también que tres niños en brazos no llevaban esta protección.La Setran reportó que durante la pandemia también han sido apercibidos 15 mil 088 pasajeros y mil 890 operadores. A los primeros se les pide que desciendan de las unidades o se les niega el acceso, por lo que se han generado conflictos o enfrentamientos.El pasado 27 de agosto, el conductor de una unidad alimentadora del Macrobús fue agredido a golpes por un usuario, a quien le pidió utilizar la mascarilla.Otra medida que se implementó en agosto pasado, pero que la mayoría de los choferes incumple, es el uso de la careta. Lo anterior, pese a que los camiones son de los espacios con mayor concentración de personas y, por lo tanto, representan un foco de infección.Aunque uno de los principales reclamos de los usuarios del transporte público son las malas condiciones de las unidades, en los últimos dos años disminuyó el número de camiones renovados o sustituidos en el Estado. De los mil 394 camiones adquiridos entre 2013 y 2020, sólo 69 corresponden a los últimos dos años de la actual administración: 37 y 32, respectivamente.El año en que más unidades se compraron fue en 2015, con 361, según información otorgada vía Transparencia por la Secretaría del Transporte (Setran). En 2019 y 2020 fueron los dos únicos años en que se renovaron menos de 100.Los pasajeros se siguen quejando de que hay rutas que cobran 9.50 pesos, con unidades viejas que sólo fueron pintadas para operar como ruta-empresa, que es el nuevo modelo del transporte público.Los usuarios continúan realizando estos reclamos a través de las redes sociales. El pasado 7 de septiembre, en una de las publicaciones de la Secretaría del Transporte, un usuario escribió: “Ahí les encargo la Ruta 636, muchos camiones viejos que nomás pintaron de verde y amarillo, pero en estado pésimo”.Según datos de la dependencia, la 636 tiene ocho unidades fuera de norma; es decir, que ya rebasaron los 10 años de antigüedad. El pasado 5 de octubre, la Setran respondió vía Transparencia que actualmente son mil 689 las unidades que incumplen la normatividad. Entre las rutas con mayor problema se encuentran la 45, que tiene 71 autobuses que ya cumplieron su vida útil; le sigue la 619, con 62, así como la 644, con 52. Hay otros 28 derroteros que tienen entre 20 y más de 30 camiones en esas condiciones.Actualmente, en Jalisco operan seis mil 872 unidades del transporte público colectivo (cinco mil 172 en la metrópoli), por lo que alrededor de dos de cada 10 se encuentra fuera de norma.Pese a que la actual administración cuenta con una bolsa de hasta 594 millones de pesos para apoyar a los transportistas con la compra de unidades, a la fecha no se ha adquirido ninguna con recursos estatales. En febrero pasado, las autoridades presentaron las unidades modelo que deberán adquirir los camioneros para la renovación de la flota vehicular, pero la convocatoria se abrió en julio pasado. Aún no concluye el proceso.La actual administración dejó para el final la sustitución de unidades viejas. Se decidió que primero migrarán las rutas que faltaban al modelo empresarial y, después, que todas contaran con el sistema de pago electrónico y monitoreo; es decir, se les permitió que aumentaran su tarifa (9.50 pesos), pese a contar con autobuses que no cumplían con las características para brindar un servicio de calidad.Se solicitó entrevista a la Setran, pero se respondió que harán un anuncio relacionado con la renovación de la flota vehicular próximamente.Aunque en febrero, Diego Monraz, titular de la Secretaría de Transporte (Setran), afirmó que para finales de abril habría 700 puntos de recarga para la tarjeta de Mi Movilidad, la instalación de las mismas apenas terminó con 908 terminales en 860 tiendas de conveniencia.Al principio, hubo instalación de máquinas, pero ya se realiza en cajas de las tiendas y se puede recargar desde cinco hasta 250 pesos.Mariana Bulos, directora de Planeación de Transporte Público de la Setran, indicó que para avanzar en la credencialización de los usuarios suman varias campañas en redes sociales y, para los adultos mayores, en lugar de entregar el beneficio de Mi Pasaje en papel, ya se realiza en tarjeta.“Pretendemos impulsar el pago electrónico. Estamos tratando de homologar todo. Creemos que para el usuario es más cómodo el pago con tarjeta por el problema de traer la tarifa exacta diario, además que usar la tarjeta será para todo el transporte público (Tren Ligero, Macrobús, camión y Mi Bici)”.Durante la presentación de avances de Mi Movilidad, se detalló que para los apoyos de Mi Pasaje (pasaje gratuito para estudiantes, personas con discapacidad y adultos mayores) ya se cuenta con más de 100 mil registros en la página mipasaje.jalisco.gob.mx y 94 mil están concluidos.Los estudiantes y docentes de la Universidad de Guadalajara (UdeG) tendrán el beneficio de que, con su credencial escolar, podrán pagar el transporte público al 50% de descuento.En junio pasado, este medio reportó que aunque hubo un recorte en el presupuesto del Gobierno de Jalisco por la crisis del COVID-19, éste no aplicó para los transportistas, quienes obtuvieron un aumento en el subsidio para la adquisición de camiones.Para este año, el Ejecutivo estatal había autorizado una bolsa por hasta 500 millones de pesos (MDP) para apoyar a los camioneros en la renovación de la flota vehicular, pero en medio de la pandemia publicó un acuerdo en el que informa que subirá hasta 594 millones.El incremento supera, por ejemplo, la reducción del presupuesto para la Fiscalía del Estado, la Coordinación Estratégica de Seguridad, el Escudo Urbano C5 y la Fiscalía Anticorrupción, donde la “tijera” fue de 56.6 millones de pesos.Si se toman en cuenta los recursos que se han otorgado previamente a los transportistas a través del fideicomiso de las fotomultas, en menos de tres años se destinarán mil 002 millones al transporte público de los municipios metropolitanos, Puerto Vallarta, Zapotlán el Grande y Tepatitlán de Morelos (considerando también los recursos que se destinaron en el último año de la pasada administración).De éstos, 954.7 millones son para apoyos económicos a los camioneros para compra de vehículos y equipos de prepago.OPERATIVOSigue #DebateInformador, participa en Twitter en el debate del día @informador¿Qué opina del cumplimiento de las medidas sanitarias?JL