Nuestros héroes y los otros

En estos días de 2010 estamos recordando con todo respeto a los héroes que hicieron de México un país independiente.
 
Independiente en los estudios escolares y luego continuamos con esa idea el resto de nuestra vida, aunque, a veces nos preguntamos indefensos: "¿Independientes?"-
 
He llamado “los otros” a los demás países importantes del mundo que estaban en acecho de lo que ocurría entre América y España, deseosos de ayudar a los que independencia deseaban pero ¿a qué precio esa ayuda? Nada es gratis en este mundo: Inglaterra, Francia, Rusia, Estados Unidos, todos estaban al acecho de lo que ocurría entre España y sus colonias. Las ideas de la revolución francesa, el ejemplo de los Estados Unidos de Norteamérica ya independientes, sirvieron al resto del mundo, sobre todo al Nuevo Continente para independizarse, aunque España no entendió la bueno lección que terminó dando la Gran Bretaña respecto a su antigua colonia.
 
Y viajemos al libro "Historia Inaudible de España" de Pedro Voltes, en cuyas páginas nos explica el estado descendente en que se hallaba España: invasión napoleónica, pobreza, abuso de la nobleza, gobernantes ineptos y reyes tontos, Fernando VII no cometía más que disparates.
 
Gente de otros lugares, como por ejemplo Humboldt, quedaron admirados del alto grado cultural al que habían llegado los hispanoamericanos y lo mismo en lo referente a relaciones internacionales y comerciales, es decir, que estudiando la situación, muchas colonias ganaban a la metrópoli. Pero estaba el deseo de ser5 ellos mismos, independientes.
 
El comercio entre España y sus colonias iba y venía. Cosas de aquí para allá. Cosas de allá para acá, más corsarios, piratas y bucaneros acechaban y robaban las mercancías de los barcos comerciales, de modo que tuvieron que agruparse éstos como flota defensiva.
 
Entre unas cosas y otras España estaba tan debilitada que la independencia de sus colonias no fue tarea muy difícil. México entre ellas aportó una larga lista de héroes que dieron todas sus fuerzas y hasta la vida por la libertad y el logro de tener un país propio. Pero ese país ha de ser de todos los mexicanos, no un coto importante para algunos y  la miseria para otros.
 
Para esta actualidad no lucharon el cura Hidalgo, Allende, el cura Morelos, Francisco Javier Mina (español), Vicente Guerrero, Guadalupe Victoria,  y todos aquellos cuyos nombres se han borrado para continuar en nuestro corazón.
 
Además del himno y la bandera ¿podremos en estos días exhibir la justicia y el honesto vivir de todos los mexicanos, la ausencia de los numerosos delitos?  Si esto es posible entonces gritaremos  a pleno pulmón ¡Tenemos patria!  ¡Viva nuestra independencia!  ¡Viva México!
 
Toluca agosto 2010