Diputados

Desde hace semanas había sido una preocupación entre varios sectores de la sociedad, que los diputados locales del Partido Acción Nacional basificaran a personal catalogado como supernumerario, para garantizar sus plazas antes de que concluya la LVIII Legislatura, considerando que en la próxima no tienen mayoría.
El pasado 7 de octubre, en sesión extraordinaria y sin que todos los legisladores dispusieran de la información necesaria para sustentar sus votos, se aprobó el Anteproyecto presupuestal 2010 para el Poder Legislativo por un monto menor, sí, al ejercido en este año, pero con un incremento sustancial en la partida de salarios; y una omisión grave: el presupuesto para la Auditoría Superior del Estado de Jalisco.

Por la tarde de ayer, luego de las reacciones que generó la información sobre la sesión extraordinaria, el Congreso local emitió un comunicado para “aclarar” los datos y desmentir lo publicado en varios periódicos, sin embargo, algunos diputados, como el coordinador de la bancada priista, Juan Carlos Castellanos, coincidieron en señalar que la aprobación del presupuesto 2010 para el Poder Legislativo fue un “albazo”.

Con el comunicado del Congreso del Estado difundido ayer, lejos de aclarar lo sucedido el 7 de octubre, la confusión es mayor y queda en evidencia la irresponsabilidad y la falta de cuidado de los miembros del Poder Legislativo en el desempeño de su trabajo.

Es reprobable, una vez más, la actuación de los diputados. Es cuestionable la forma en que se convocó a la sesión extraordinaria; lo es también, el que se haya negado información a los mismos legisladores, específicamente, la plantilla de personal; es inadmisible que se contemple un incremento en la partida de sueldos para la burocracia y, sin lugar a dudas, el que se haya omitido la aprobación del presupuesto para la Auditoría Superior del Estado de Jalisco.

Urge que los legisladores, incluyendo los que se dicen sorprendidos, asuman por una vez su responsabilidad y enmienden los errores en el Presupuesto del Poder Legislativo para 2010, tomando en cuenta el contexto de crisis económica y en una actitud congruente, responsable y solidaria con la sociedad a la que dicen representar y a quien se deben.