Compromisos públicos

Fiel a su estilo —sencillo—, con las prisas que implican dar a conocer los logros alcanzados durante el primer año de su segunda gestión al frente del municipio de San Pedro Tlaquepaque en el menor tiempo posible (por aquello de que la audiencia no se le aburra), Miguel Castro Reynoso cumplió ayer su compromiso público número 99 con la ciudadanía tlaquepaquense, precisamente al rendir su Primer Informe de Gobierno.

Consciente de todo lo que falta por hacer, pero sin quitar el dedo del renglón, en “petit comité” se dijo satisfecho de lo logrado en este primer tramo, pero al mismo tiempo aseguró que “2011 será el año de más logros de la actual administración, pues para ello se han creado varios organismos, cuyos resultados se podrán ver en ese lapso, gracias al dinamismo y empeño de quienes han aceptado la responsabilidad de encabezarlos”.

Por lo pronto, llama la atención la capacidad de convocatoria, pues prácticamente todos los actores políticos de peso estuvieron presentes, entre ellos los alcaldes de la zona metropolitana; representantes de los tres poderes, encabezados por el gobernador del Estado, además de tres ex gobernadores de extracción priista (Flavio Romero de Velasco, Guillermo Cosío Vidaurri y Carlos Rivera Aceves), el senador Ramiro Hernández, así como diputados locales y federales, entre otros muchos aspirantes y suspirantes.

Vamos, hasta Raúl Padilla López, quien sabía que ahí se habría de encontrar con Emilio González y hasta se saludaron —aparentemente de manera muy cortés, luego de que el Ejecutivo le había felicitado públicamente por el éxito de la Feria Internacional del Libro—, hizo acto de presencia, en consonancia con su nuevo perfil pro priìsta.

Se puede decir que la única presencia de nivel Vip que hizo falta, fue precisamente el vecino más conocido del Centro Cultural El Refugio, el cardenal Juan Sandoval Íñiguez, quien a pesar de vivir sólo a unos pasos del lugar, seguramente optó por no asistir, para no verse comprometido a concurrir a otros tantos informes a los que seguramente ha sido invitado.

Y pues bueno, las tablas de Miguel Castro salieron a relucir, no sólo en lo que hace a la presentación del informe de actividades, sino a la capacidad para alcanzar logros y la sensibilidad para cumplir con compromisos que si bien afectan al bolsillo familiar del primer edil, así como de los funcionarios de primero y segundo nivel, al hacer real la reducción de sus sueldos y omitir prestaciones que en el resto de los municipios corren a cargo del erario; el maratonista por convicción, dijo no llevar prisa por buscar otra posición política, pues ahora sabe por experiencia propia que cuando las cosas se hacen bien, la gente no olvida y sí compensa a quienes le han servido.