Andrés Manuel López Obrador presentó ayer a los mandos de la Guardia Nacional, que estará encabezada por el general de brigada de Estado Mayor, Luis Rodríguez Bucio. Sin embargo, remarcó que está en proceso de retiro para satisfacer las demandas de la sociedad, que exige que no sea un militar en activo.Rodríguez Bucio se retirará en agosto próximo, lo que desató una serie de críticas de legisladores y organizaciones, como la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y Amnistía Internacional. “No actuamos con cerrazón, siempre escuchamos (a las organizaciones civiles y gubernamentales)”, remarcó López Obrador.Sobre los tres encargados de las coordinaciones de la Guardia, el general Xicoténcatl Núñez será el representante del Ejército, aunque su retiro culminará en julio de 2019. El contralmirante de infantería Gabriel García Chávez estará al frente de la Marina (ya está retirado), mientras Rosalinda Trujillo será el mando de la Policía Federal.El secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, expresó que, “por donde se le vea, la Guardia es un órgano de naturaleza civil”, pero organizaciones civiles y activistas rechazaron la designación de Rodríguez Bucio. Por ejemplo, Alfredo Lecona, vocero del colectivo Seguridad Sin Guerra, que agrupa a 300 asociaciones, señaló que el nombramiento “está contra los acuerdos alcanzados en el Congreso de la Unión y también es inconstitucional porque se había pactado un mando civil. Es muy irresponsable porque, en tanto no se consolide su retiro, son militares subordinados a la Defensa Nacional”.La Comisión Nacional de los Derechos Humanos se sumó al rechazo de Rodríguez Bucio y no descartó impugnar ante la Suprema Corte, como sí lo garantizaron organizaciones civiles y legisladores del PAN, PRI y PRD.La Guardia Nacional tendrá una coordinación integrada por el general de brigada Xicoténcatl Núñez por la Defensa Nacional, el contralmirante Gabriel García por la Marina Armada y la comisaria Rosalinda Trujillo por la Policía Federal. Todos dependen del comandante de la Guardia, Luis Rodríguez Bucio.Luis Rodríguez BucioComandante de la Guardia NacionalXicoténcatl Núñez Márquez Representante de la SedenaRosalinda Trujillo MarielRepresentante de la Policía FederalGabriel García ChávezRepresentante de la MarinaEl secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, presentó ayer ante el Senado los borradores de las cuatro leyes secundarias que deben dar cobertura a la futura Guardia Nacional.El Legislativo debatirá estos textos después de haber dado “luz verde”, el 14 de marzo, a la reforma constitucional que permite la creación de este nuevo organismo de seguridad pública formado por policías, militares y marinos.Los documentos corresponden a la Ley de la Guardia Nacional, la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, la Ley Nacional sobre el Uso de la Fuerza y la Ley Nacional del Registro de Detenciones, que deben ser aprobadas entre 60 y 90 días después de la reforma constitucional.Estas normas definen a la Guardia Nacional como “una institución policial, armada, civil, disciplinada, profesional y permanente, con autonomía técnica, operativa y de mando”.El organismo deberá preservar el “orden público y la paz social” en México, y estará a cargo del Gobierno federal.Tal y como pedía la oposición, estas normas contemplan que la Guardia Nacional actúe con “respeto a los derechos humanos”.De hecho, la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, suscribió esta semana un acuerdo de colaboración con el Gobierno para asesorar en materia de derechos humanos al nuevo cuerpo que estará dirigido por Luis Rodríguez Bucio, general del Ejército en proceso de retiro.Lo anterior fue criticado por la oposición y las organizaciones de derechos humanos porque consideran que el mandatario está vulnerando el carácter civil que debe tener la Guardia Nacional, según la Constitución.Estas normativas establecen que la Guardia deberá usar la fuerza bajo los principios de legalidad, absoluta necesidad, proporcionalidad y rendición de cuentas.También se determina que los bloqueos civiles de avenidas “no ameritarán en ningún caso el ejercicio de la fuerza letal”.Y las manifestaciones civiles que se tornen violentas “deberán enfrentarse mediante medios no letales”.Está prevista la creación de un banco de datos con información que permita identificar y localizar a las personas inmediatamente tras su detención.La oposición en el Senado respondió que el nombramiento de Luis Rodríguez Bucio viola la Constitución, por ser un militar en activo aunque esté en un proceso de retiro que concluye en agosto, por lo que en caso de que existan violaciones a los derechos humanos, la responsabilidad será del Presidente Andrés Manuel López Obrador.Afirman que la Constitución señala que el titular de la Guardia Nacional, en caso de ser un militar o marino, debe solicitar licencia antes del nombramiento, por lo que Rodríguez Bucio debe actuar en consecuencia tras ser nombrado comandante de la Guardia Nacional.El senador del PAN, Damián Zepeda, señaló que si solicita licencia, su nombramiento “es legal”; sin embargo, el estatus que por ahora tiene, que es en proceso de retiro, “no es legal”, lo que significa que se viola la Constitución y la Guardia pierde su carácter de civil.“Si una persona pide licencia, ya es civil y eso sí sería legal, no podemos decir lo contrario, así está la Constitución y no hay duda. Parece que el único que tiene duda aquí es el Presidente”.El coordinador del PRI, Miguel Ángel Osorio Chong, coincidió en que Rodríguez Bucio debe pedir licencia de inmediato.“Me preocupa que se viole la Constitución”, añadió.CLAVESPostura. Organizaciones civiles y activistas rechazaron la designación del general Luis Rodríguez Bucio para estar al frente de la Guardia Nacional. Consultado sobre este tema, Alfredo Lecona, vocero del colectivo Seguridad Sin Guerra, que agrupa a 300 asociaciones y activistas, comentó que el nombramiento “está en contra de los acuerdos alcanzados en el Congreso de la Unión y también es inconstitucional porque se había pactado un mando civil”.Polémica. El activista calificó como irresponsable la frase de Andrés Manuel López Obrador respecto a la designación de mandos militares en proceso de retiro para satisfacer a la sociedad civil: “Es muy irresponsable porque, en tanto no se consolide su retiro, son militares subordinados a la Secretaría de la Defensa Nacional… es como decir: ‘Pues sólo estamos violando la Constitución por un ratito mientras se les concede el retiro’”.Reacción. Por su parte, Amnistía Internacional señaló que “es difícil comprender cómo bajo un mando militar la Guardia Nacional será una fuerza civil y cómo serán fortalecidas las Policías para que en cinco años se hagan cargo de la seguridad”. También consideró que la designación de un mando militar representa que el Gobierno no está dispuesto a escuchar a la sociedad civil, pues activistas y organizaciones fueron quienes habían impulsado que el dirigente del nuevo cuerpo de seguridad fuera civil.La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) rechazó el nombramiento del general Luis Rodríguez Bucio como comandante de la Guardia Nacional, así como la designación de otros militares que ocuparán puestos de jerarquía en ese cuerpo de seguridad.“En los términos constitucionales, la Guardia Nacional se acotó a una adscripción civil. Lo óptimo es que hubiera tenido un perfil civil, pero hoy conocemos que tendrá un perfil militar. No hay que hablar sobre si (el general Rodríguez Bucio) está en proceso de retiro, tenía que estar ya en retiro o con licencia”, expresó Luis Raúl González Pérez, presidente de la CNDH.Respecto a las acciones que tomará la Comisión después de la designación militar, apuntó: “estaremos atentos a que en las leyes secundarias no se desvirtúe lo que está establecido en la Constitución, para que no se vaya más allá de lo logrado; es decir, más allá de los candados que logró poner la sociedad civil”.Sin embargo, también dijo que la CNDH está abierta a promover una controversia constitucional contra la Guardia si activistas y organizaciones civiles lo solicitan, además de si existen las condiciones jurídicas para hacerlo: “Nosotros siempre escuchamos las propuestas. Estamos abiertos a esa posibilidad si hubiera casos de inconstitucionalidad, aunque por ahora no puedo yo pronunciarme”.Hace una semana, después de que Andrés Manuel López Obrador advirtió que la Guardia Nacional tendría un mando militar, asociaciones civiles ya discutían la posibilidad de acudir a organismos autónomos para que interpusieran ante la Suprema Corte una controversia constitucional, pues señalaron que el nuevo cuerpo de seguridad debía tener un carácter civil, según la Constitución.Eduardo Sosa, primer visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ), resalta que vigilarán la actuación de la Guardia Nacional. Y levantarán la voz en caso de ser necesario: “Estaremos esperando los resultados de su trabajo para podernos pronunciar. Esta nueva corporación tiene una naturaleza federal, por tanto, escapa a la Comisión, pero estaremos recibiendo quejas y, sin demora, trasmitiendo a la Comisión Nacional”.Explica que se debe analizar la seguridad en tres niveles: pública, nacional e interior. Detalla que la seguridad pública le corresponde a todas las Policías locales, municipales y federales, mientras que la nacional es del Ejército y las Fuerzas Armadas. “Debemos de entender que la Guardia Nacional es un cuerpo intermedio. No es puramente civil, ni militar. En ese sentido, la lógica de actuación necesita de conocimiento de las Fuerzas Armadas, pero con la operatividad de un policía”.Considera que la designación del nuevo comandante no se puede condenar. “Se trata de una persona que ha regresado a la vida civil. Y desde ese sitio aprovechará sus habilidades para aportar en materia de seguridad interior”.Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio de Guadalajara (Canaco), Xavier Orendáin, resalta que el comandante de la Guardia Nacional cuenta con su respaldo, ya que el que objetivo principal es recuperar la seguridad en el país. “Es un clamor ciudadano que tiene muchos años. Se discutió mucho el tema de la Guardia con mando civil… me parece que el esfuerzo debe ser concentrarse en qué queremos, y queremos recuperar la paz”.Apunta que es positivo que Rodríguez Bucio sea una persona en esfuerzos de seguridad durante muchos años. “Lo que nos han comentado quienes lo conocen es que es un hombre preparado, con una carrera militar en diferentes aspectos. No hay mancha en él, no hay algún escándalo o procedimiento. Es un hombre disciplinado, que ha sabido acatar y dar órdenes”.Independientemente de si se trata de un mando civil o militar, indica, se trata de un mexicano que decidió dedicarle su vida a México.Rubén Ortega Montes, investigador de la UdeG, subraya que es buena la elección de Rodríguez Bucio, siempre y cuando se prioricen protocolos relacionados con los derechos humanos. “Es correcto que vaya un general en proceso de retiro, porque al haberse fraguado, formado dentro de la propia Sedena, conoce de trabajos de inteligencia militar, conoce las regiones, el uso y estado de fuerza, las fortalezas y las oportunidades en seguridad. Y también las debilidades”.Recuerda que la petición de que el mando fuera civil se debió principalmente por el miedo a los abusos en la violación a los derechos humanos, ya que los militares son de los más señalados al respecto.Opina que si se capacita de manera adecuada a los elementos, la Guardia se salvaría del escollo y temor al que se le pone atención.Sigue: #DebateInformador¿Qué opina de los mandos que designó López Obrador para la coordinación de la Guardia Nacional?Participa en Twitter en el debate del día @informador