Salvador Cabañas afirma no acordarse de sus agresores

CIUDAD DE MÉXICO (03/AGO/2010).- Salvador Cabañas no pudo reconocer el rostro de su agresor, tras declarar ante un juez sobre el atentado que sufrió el 25 de enero pasado en el Bar Bar de la Ciudad de México. El futbolista sólo tiene “recuerdos vagos” del incidente en el que recibió un disparo en la cabeza, dijo el juez paraguayo Pedro Mayor Martínez.
El magistrado recogió la declaración del delantero del América por pedido de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), en el Palacio de Justicia de Asunción. Cuatro funcionarios mexicanos participaron en la audiencia, que duró unas dos horas.

“Cabañas no pudo referir el motivo de la agresión, tiene recuerdos vagos. No logra recordar rostros porque tiene la memoria disminuida”, agregó Mayor Martínez en una conferencia en la sede del Poder Judicial paraguayo.

Las autoridades mexicanas sostienen que el agresor del futbolista fue José Balderas Garza, “El JJ”, quien está prófugo.

Según las autoridades judiciales paraguayas, a Cabañas se le mostraron muchas fotografías y no reconoció ninguna de ellas. Incluso, no identificó al “JJ”.
Martínez especificó que Cabañas “está lúcido actualmente pero sus recuerdos recientes tienen limitaciones, y no creo que haya mucho por hacer”.

Evaluarán declaración

Las autoridades mexicanas remitieron un cuestionario de 60 preguntas como parte de dos investigaciones por los delitos de tentativa de homicidio y hechos referidos al crimen organizado.

“La audiencia fue presenciada por cuatro funcionarios judiciales de México: dos del Distrito Federal que investigan la tentativa de homicidio, y dos que siguen las investigaciones del probable vínculo de la agresión con el crimen organizado”.
“El JJ” ha sido vinculado con el narcotráfico, pero las autoridades mexicanas han descartado que el altercado con Cabañas esté vinculado con esas actividades.

El juez Mayor Martínez indicó que el alcance del testimonio de Cabañas será evaluado por la justicia mexicana, y que posteriormente se tomará declaración a María Lorgia Mena y Amancio Rojas, esposa y cuñado del jugador, quienes estuvieron presentes en el bar la noche del incidente, y acudieron a la audiencia en calidad de testigos.

Mayor Martínez resaltó que durante la audiencia y en presencia de todos los funcionarios judiciales mexicanos, el futbolista que aún sigue en tratamiento clínico pidió que se siga investigando a fondo, y exigió justicia en el caso.

Cabañas se veía delgado y pidió un analgésico durante la audiencia.
Con las declaraciones ministeriales practicadas a Cabañas, la Procuraduría del Distrito Federal busca “perfeccionar la imputación en contra de Francisco Barreto García ‘El Contador’” como copartícipe o cómplice de la agresión presuntamente perpetrada por “El JJ”.

De acuerdo con el subprocurador de Averiguaciones Previas Desconcentradas de la PGJDF, Luis Genaro Vázquez, con esas diligencias se podrá ejercitar acción penal contra Barreto García.

Asimismo, la PGR, presuntamente personal perteneciente a la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (Siedo), durante la audiencia en Asunción presentó sus propios cuestionamientos relativos a su investigación en torno a la posible comisión de delitos de delincuencia organizada.

Telón de fondo

Qué no recuerda “Chava”

La madrugada del 25 de enero el delantero del Club América, Salvador Cabañas, fue baleado en el Bar Bar, un lugar al que solía acudir con frecuencia a divertirse.
Según las declaraciones ministeriales del encargado de limpiar los sanitarios del lugar, Cabañas entró al baño y atrás lo hizo José Jorge Balderas Garza, “El JJ” o “El Modelo”, quien le recriminó la falta de gol. Cabañas le preguntó quién era y Balderas sacó la pistola y lo amenazó. Según el empleado, Cabañas lo retó a disparar y Balderas jaló del gatillo.

Tras el disparo, el agresor y su acompañante Francisco Barreto García, “El Contador”, salieron del lugar con la complicidad de los dueños del establecimiento.
Pero ésa, no fue la única irregularidad de los empleados del bar, también impidieron a María Alonso Mena, esposa del futbolista, entrar al sanitario a cerciorarse de que su marido se encontraba bien, y demoraron la entrada a las autoridades hasta que el baño había sido limpiado y se borraran las evidencias.

Las especulaciones sobre los motivos del ataque fueron dos. Primero se mencionó un lío de faldas por una bailarina del lugar con la que estaba Cabañas y luego que la discusión “por falta de goles” fue sólo el pretexto para ejecutar una acción que ya estaba planeada.

En febrero las investigaciones arrojaron que “El JJ” estaba ligado a Édgar Valdés Villareal, “La Barbie”, jefe de sicarios del cártel de los Beltrán Leyva. Con tal versión surgió otra hipótesis: que la orden de atentar contra el futbolista venía de Valdés Villareal, aparentemente porque Cabañas buscaba a una actriz que era pareja de “La Barbie”.

Mientras las investigaciones continuaban, aficionados del América hicieron un altar para su ídolo y rezaban por su recuperación.

La familia y el club acordaron que lo mejor para el futbolista era que se recuperara en Argentina, por lo que en marzo --una vez fuera de peligro-- fue trasladado a la Clínica Fleni, la misma en que está internado Gustavo Cerati.

El 19 de ese mes Cabañas ofreció su primera entrevista después del ataque en la que se le vio distraído y tembloroso, aunque también proyectaron imágenes en donde estaba jugando pin pon como parte de su rehabilitación.

En junio fue detenido “El Contador” en el Estado de México, quien confirmó que antes de disparar “El JJ” y Cabañas discutieron. También dijo que Balderas Garza era jefe de la plaza del Estado de México de la célula comandada por “La Barbie”. “El Contador” agregó que tras el incidente él y “El JJ” se fueron por caminos distintos y que no volvió a verlo.

Comparecencia

“Su país lo protege”, afirma defensa del Bar Bar

Tras acusar de que no les fue permitido estar presentes en la declaración ministerial de Salvador Cabañas, Juan Carlos Araujo, abogado defensor de Carlos Cázares alias “El Charly”, ex gerente del Bar Bar, procesado por los incidentes del pasado 25 de enero, aseguró que las autoridades paraguayas protegen al futbolista, pues llama la atención que la diligencia se haya realizado en Asunción, Paraguay y no en Argentina donde se rehabilitaba el deportista.

“Ni siquiera permitieron que hubiese preguntas o intervención directa de las autoridades mexicanas para hacerlas. Ningún dato a la investigación corrobora la estrategia de la PGJDF de que Cabañas no declare nada en relación a los hechos y sobre todo no comprometer a Cabañas en un acto que por lo que sabemos él mismo provocó”.

Sin presiones

Dijo que hasta ahora no tienen acceso a esas declaraciones y tendrá que solicitársela a la juez para que la requiera a la Procuraduría.

El abogado aseguró que en cuanto aquellas versiones que pretenden inculpar a los propietarios del Bar Bar y a sus trabajadores con el crimen organizado y ante las aseveraciones de que ese establecimiento podría ser un centro de distribución de “El JJ”, por la probable intervención de agentes de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (Siedo) en el interrogatorio a Cabañas afirmó que no le alarman y que no hay elementos para que se les achaque esa posibilidad.

La frase
“Obviamente al tratarse de un nacional paraguayo, las autoridades lo protegieron totalmente. Sus declaraciones no arrojan ninguna investigación seria ”
Juan Carlos Araujo,
abogado defensor del Bar Bar.

Detenidos

Tras el incidente quedó detenido Carlos Cázares Ocaña, alias “el Charly” quien era gerente del Bar Bar culpado de tentativa de homicidio como cómplice, también los cadeneros, dos jefes de meseros y el encargado de la limpieza del bar, pero salieron libres en febrero al pagar una fianza de 50 mil pesos, el único que continúa detenido es “el Charly”.