Reyes Baeza ve viable discutir y atender la demanda

CIUDAD DE MÉXICO.- Mientras el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), José Luis Soberanes, rechazó la posibilidad de que en México se reinstaure la pena de muerte porque sería violatorio de acuerdos internacionales signados por el país, el gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza sostuvo que si la sociedad lo demanda el tema debe de ser discutido y se tienen que tomar las decisiones que exija.

Ambos funcionarios asistieron a la entrega del Premio Nacional de Derechos Humanos y en entrevistas por separado señalaron puntos de vista encontrados, pues el ombudsman acusó que éste es un tema que se utiliza con fines electorales al 2009 al tiempo que el gobernador de Chihuahua lo rechazó.

El ombudman nacional señaló que avalar la pena de muerte significa caminar para atrás y advirtió que, de aprobarse, México estará discutiendo posteriormente quitarle a las mujeres el derecho de votar. El problema no lo resuelve la pena capital “ni la bomba atómica”, sostuvo.

Incluso, adelantó que, ante esa propuesta, en la CNDH, “vamos a responder”.

Al abordar el tema de la pena de muerte, Soberanes Fernández señaló que el problema “es la impunidad, o sea, entonces querer resolver con algo que no resuelve el problema, como es la pena de muerte, y no ir a la causa que es, precisamente, la impunidad en este país”.

A su vez José Reyes Baeza consideró viable discutir y en su caso atender la demanda de la sociedad de instaurar la pena de muerte en el país, como lo propuso su compañero de partido, Humberto Moreira, gobernador de Coahuila, esto a pesar de que la pena capital vaya en contra de convenios internacionales firmados por México.
“Más allá de fijar posiciones y descalificar a priori un planteamiento que me parece pretende responder a la gravedad del problema en este momento hay, hay que discutirlo, debatirlo y, finalmente, concluir lo que se deba hacer en función de lo que la sociedad piensa, quiere y demanda a las entidades del sector público”.

“El derecho se transforma en función de la realidad social. Me parece que la realidad social es la que debe moldear paulatinamente las normas jurídicas, incluso los textos constitucionales y los propios tratados internacionales”.