Resaltan escenario competido y ríspido en comicios de Tlaxcala

TLAXCALA, MÉXICO (30/JUN/2010).- Las campañas en Tlaxcala que desembocarán en los comicios del próximo 4 de julio, han sido competidas y enmarcadas en un ambiente ríspido entre los dos principales contendientes por la gubernatura, el priista Mariano González Zarur y la panista Adriana Dávila Fernández.

En lo que será el último día de campañas político-electorales, los dos principales contendientes por la primera magistratura del estado, se preparan para enfrentar una jornada electoral intensa y sumamente reñida, señalaron especialistas en contiendas electorales.

Patricio Lima Gutiérrez, analista político en diversos medios de comunicación y ex titular del Instituto Electoral de Tlaxcala (IET), señaló, en entrevista con Notimex, que las condiciones no son las más favorables para unos comicios tranquilos, sin embargo confió en la civilidad de las fuerzas políticas y sus simpatizantes.

'Yo veo un escenario de mucha rispidez, de mucha confrontación, porque los dos candidatos con mayor fuerza en este proceso electoral, se perfilan para una contienda muy cerrada', dijo.

Asimismo, manifestó, sus casas de campaña, donde se incluyen colaboradores, simpatizantes y estrategas de uno y otro lado, 'han generado un ambiente de animadversión, de descalificaciones y desde luego esto no ayuda, no contribuye a que la jornada electoral tenga un ambiente favorable, que yo diría debe ser de orden, tranquilidad y civilidad'.

Agregó que la población ha demostrado en dos elecciones anteriores, que hay participación, que se cree en el proceso electoral, 'y ahora yo veo un clima francamente de fuerte confrontación y de fuerte polarización social'.

El politólogo consideró que la estrategia de utilizar adhesiones de otros políticos a favor de sus respectivos abanderados, contribuyen a confundir al electorado y a intensificar la polarización del proceso.

Lima Gutiérrez destacó que la autoridad electoral local, 'ha estado muy por debajo de las expectativas que se esperaban, para una contienda como esta, que tiene una fuerte competencia. La autoridad ha sido muy débil, ha sido hasta omisa y a veces con muy poca fuerza para poner orden y tranquilidad en los contendientes'.

'El panorama no es el mejor, pero aún así yo siempre he apostado a que en Tlaxcala, el día de la elección se hagan a un lado todas esas diferencias y la gente salga a votar y decida libremente', señaló.

Recordó que en la entidad, previo a las próximas elecciones, ya se presentaron dos contiendas sumamente competidas para elegir gobernador 'la del 2004 que se definió por menos de cuatro mil votos, y la de 1998 que se definió por menos de ocho mil sufragios'.