Proyectil de policía mató a niño en Puebla: CNDH

CIUDAD DE MÉXICO (11/SEP/2014).- La investigación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) sobre la muerte la muerte del niño José Luis Tehuatlie, en Chalchihuapan, Puebla, determinó que ésta fue provocada por el uso excesivo de la fuerza de la Secretaría de Seguridad Pública del estado.

Según la CNDH, la causa fue el impacto de uno de los 54 proyectiles de largo alcance, de gas lacrimógeno, que usaron los elementos para contener la manifestación.

El ombudsman nacional Raúl Plascencia dijo que se emitió una recomendación para el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, para que investigue y actúe conforme a la ley contra Facundo Rosas, secretario de Seguridad Publica de Puebla y los responsables del operativo.

Descartó que el menor de 13 años fuera lesionado por una explosión u onda expansiva, como se había dicho anteriormente.

"Dos testigos de los hechos vieron cómo un policía portaba un arma, la cual disparó a una distancia de 50 metros", afirmó Plascencia en conferencia de prensa.

Agregó no hay evidencias de que las autoridades agotaran el diálogo para controlar la manifestación.

Informó que de acuerdo con las indagatorias realizadas a partir del choque entre policías estatales y pobladores que exigían la reapertura del registro civil de su comunidad Chalchihuapan, fue un policía estatal quien disparó a menos de 50 metros de distancia al niño, quien después de 10 días de agonía falleció el pasado 19 de julio.

FRASE

"Me siento defraudada por el gobernador... él siempre dijo que si no podía hacer las cosas bien, se iba y lo que yo pido es que mejor renuncie porque es un mal Gobierno y no merece estar en el Estado".

Elia Tamayo, madre de José Luis.

CRONOLOGÍA

9 de julio. Los pobladores de San Bernardino Chalchihuapan bloquean la carretera Puebla-Atlixco en protesta por el cierre de la oficina de registro civil. La Policía Estatal intenta reabrir la vía y se registra un enfrentamiento. José Luis, de 13 años, resulta herido en la cabeza.

19 de julio. El menor muere por la heridas en la cabeza. Ocho días después el abogado de la familia afirma que el cráneo del menor pudo ser manipulado y anuncian que solicitará la exhumación del cuerpo para realizar una segunda necropsia.

20 de julio. La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) informa que atraerán la investigación de la muerte de José Luis Tehuatlie.

30 de julio. El Gobierno estatal informa que las heridas fueron provocadas por una onda expansiva, producto de los cohetones que lanzaron los probladores. Niegan rotundamente que hayan sido proyectiles de los agentes estatales.