México tiene prisa

Luego de años de tolerancia a los excesos de diversas instituciones bancarias en México (filiales de corporaciones extranjeras que hacen agosto permanente en estas emprendedoras tierras), con respecto al cobro de comisiones, finalmente el banco central ha impuesto mayores controles a intermediarios financieros que pese a las altas ganancias que obtienen de sus usuarios, se siguen resistiendo a ofrecer dichos capitales a tasas competitivas para promover el desarrollo en el país que aún favorece altas rentabilidades imposibles de alcanzar en sus naciones matrices.

Es así como recientemente los bancos que operan en México están obligados a cumplir con las promociones ofrecidas y a no proporcionar al cliente información engañosa o que induzca al error. Además, tienen prohibido negar la cancelación vía telefónica de las tarjetas de crédito o débito por robo, extravío o clonación, así como no canalizar al cliente a la aseguradora cuando deba cancelar un seguro ofrecido vía telefónica.

A la vez, las instituciones financieras deberán abstenerse de reportar al buró como vencidos, los créditos que se encuentren en proceso de aclaración. Incluso los bancos no pueden cobrar comisión o penalización por terminar el contrato y que la institución que ayude a su cliente a cambiarse de banco, no podrá cobrar comisión alguna.
De igual forma, así debe ocurrir al retirar efectivo, consultar su saldo, realizar un depósito a su cuenta y pagar cualquier tipo de crédito, en sucursales y cajeros automáticos de su banco.

Si un banco le otorga un crédito y solicita abrir una cuenta de depósito como requisito para que ahí le hagan los cargos relativos al crédito, éste no podrá cobrar comisión por apertura, cargo por manejo de cuenta y por no mantener un saldo promedio mínimo.

Tampoco deben cobrar comisiones por intentar sobregirar el saldo de una tarjeta prepagada bancaria. Estas tarjetas permiten hacer compras y retirar dinero en efectivo de una determinada cantidad que usted deposita previamente en la cuenta. Como no se dispone de dinero prestado por el banco, sino de dinero propio, la solicitud de una tarjeta de este tipo no implica la comprobación del historial crediticio.

Otras circunstancias en las que los bancos no pueden cobrar comisiones, son por la cancelación de tarjetas de débito o prepagadas bancarias, por no utilizar tarjetas prepagadas durante un periodo de 365 días naturales, por la cancelación de cuentas de depósito y por la cancelación del servicio de banca electrónica.

Si alguien le paga con un cheque y al intentar cobrarlo el cheque es devuelto o rechazado por falta de fondos en la cuenta, el banco no podrá cobrar comisión por tal situación, salvo a la persona que emitió el cheque por intento de sobregiro en la cuenta.

Es así como en respuesta (aunque todavía insuficiente) al México tiene prisa de instituciones bancarias eficientes, competitivas y promotoras del desarrollo, reconocemos el compromiso del Banco de México por un mejor futuro que está por venir.