Los partidos son un verdadero desastre

Volvemos a tocar el tema de los partidos políticos, los cuales la mayoría de ellos son un verdadero desastre y les importa muy poco el país, lo único que les interesa es su propio partido y sus acciones totalmente desviadas y tendenciosas.

Nosotros en México criticamos a nuestros vecinos del norte, por su filosofía y sus tendencias intervencionistas, en algunos casos con espíritu de conquista, pero asimismo reconocemos sus valores, patriotismo y muchas veces acciones cívicas ejemplares, donde ponen primero el amor a su patria que a sus partidos políticos; un ejemplo es que a los partidos políticos el gobierno de la nación no les da ni un centavo, sino que ellos mismos buscan y logran los recursos necesarios para el desarrollo de sus partidos y campañas políticas.

En nuestro México es todo lo contrario, los ciudadanos somos víctimas y a los que nos cobran injustamente para reunir fondos necesarios y sobrados para el desarrollo y gloria de los partidos políticos, aquí en nuestra patria vergonzosamente hasta los inocuos partiduchos que no tendrían por qué existir, ya que solamente tres partidos tienen peso suficiente para participar en la política y contender por los puestos de gobierno: el Partido Revolucionario Institucional, el Partido Acción Nacional y el Partido de la Revolución Democrática, que está hecho un verdadero “desmadre” por supuesto sin rumbo; los demás son realmente negocios de grupúsculos o de familias, verdadero fraude y atraco a toda la ciudadanía, como el Partido del Trabajo, Convergencia, el Verde y otro que es mantenido por su propio sindicato.

Lo que es palpable y una verdadera vergüenza, que la Constitución permita estos excesos y atracos a todos los mexicanos.

Actualmente hay sucesos que no son lógicos, como la alianza entre PRD y PAN, que tienen ideologías totalmente contrarias, que se unen según dicen para impedir que llegue el PRI a Los Pinos. El PRI es el partido que hoy en día se siente más firme en sus convicciones y más serio en su proceder, debo aclarar que no pertenezco a ningún partido político, por ahí aparece como mal ejemplo el PRD, donde el presidente y la secretaria están en pugna; allí el mejor elemento sin duda es Marcelo Ebrard, buen gobernante pero no se le entiende porque les da coba a Encinas y al Peje, pero no tarda mucho tiempo en tener una fuerte guerra política con el Peje, quien declaró que no es el Mesías pero tiene fe en salvar a México, pidió permiso para ausentarse del PRD, no se lo dieron y se fue al PT, pero al final sus tortuosas intenciones y torcidas esperanzas son unir a todos los partidos de izquierda para que lo lleven a Los Pinos, para luego declararlo parque público, como lo dijo una vez.

Pero desgraciadamente la dolorosa verdad es que la mayoría de los partidos ponen en vergüenza a México y explotan y defraudan a los mexicanos.