Llama Calderón a unidad de mexicanos en ceremonia de honor a héroes patrios

Trasladan a Palacio Nacional restos de héroes patrios

CIUDAD DE MÉXICO (15/AGO/2010).- Con un llamado al diálogo, la unidad y a luchar por preservar la libertad ante cualquier amenaza, el Presidente Felipe Calderón recibió la mañana de este domingo en el Palacio Nacional los restos de los 14 héroes de la patria, luego de un traslado con honores militares por una de las principales vías de la capital.

Los restos, que fueron objeto de estudio durante unos tres meses para corroborar sus identidades, se exhibirán durante un año en el Palacio Nacional, recinto que Calderón llamó el “corazón político'' de la patria, y que hasta hace poco albergaba las oficinas de los presidentes mexicanos.

El Palacio, a un costado de la explanada del Zócalo y de la Catedral Metropolitana en el centro de la capital, ahora se convertirá en la Galería Nacional, como parte de los festejos del Bicentenario de la Independencia, y donde se exhibirán, además, de manera permanente más de 500 objetos y piezas de arte nacional.

Calderón dijo que los restos de los héroes, quienes encabezaron a partir de 1810 la guerra de Independencia para que México se liberara de España, deben ser ejemplo del espíritu de lucha que debe permanecer en los mexicanos para construir un país mejor.

“Recordemos que ellos nos dieron la libertad de la que hasta ahora gozamos y que perdurará muchos años porque los mexicanos nos estamos empeñando y nos empeñaremos en preservarla frente a cualquier amenaza que la ponga en peligro en el país'', declaró el presidente.

Calderón, quien al inicio de su mandato en 2006 declaró una guerra frontal al crimen organizado, ha dicho anteriormente que las redes criminales son una de las mayores amenazas en el país. En días recientes reconoció que México enfrenta una creciente violencia de los carteles de las drogas, que ha dejado más de 28.000 asesinatos desde entonces.

Por su parte, el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Guillermo Ortiz Mayagoitia, fue más directo al decir durante su mensaje que el país enfrenta retos difíciles para los cuales es necesario fortalecer las instituciones.

“Nuestra sociedad no debe habituarse a la violencia, a la injusticia, ni a la ilegalidad. Particularmente no debemos aceptarla como forma de vida para las futuras generaciones. Este es un buen momento para que los jóvenes conozcan la vida y obra de nuestros héroes nacionales y tomen sus ideales como referentes para construir un México mas justo, equitativo, tolerante y libre'', afirmó.

Entre los restos figuran los del llamado padre de la patria, Miguel Hidalgo, y de reconocidos líderes como Ignacio Allende, Juan Aldama y Mariano Jiménez, entre otros. Algunos fueron fusilados durante la guerra de Independencia (1810-1821) y otros murieron después de concluida. Sólo una mujer, Leona Vicario, figura entre los héroes

Cuatro de los cráneos de los máximos luchadores descansaban juntos en una urna de cristal y madera coronada por el escudo de la nación, una figura dorada de un águila sobre un cactus, devorando una serpiente.

Los restos de los demás próceres estaban resguardados en urnas de madera adornadas con cintas con los colores verde blanco y rojo de la bandera mexicana.

El traslado desde el Castillo de Chapultepec, donde se hicieron análisis a los restos, al Palacio Nacional estuvo encabezado por un soldado a caballo portando una bandera mexicana de gran tamaño.

Detrás, en carruajes jalados por caballos, iban las urnas escoltadas por cientos de soldados montados que vestían sus mejores galas.

Un banda militar interpretaba una marcha, mientras personas de todas las edades apostadas a lo largo del Paseo de la Reforma lanzaban flores blancas a la comitiva, aplaudían o gritaba “Viva México!, Vivan los héroes!''.

La ceremonia es parte de los festejos del Bicentenario de Independencia cuyas actividades cumbre serán entre el 15 y 16 de septiembre, cuando se conmemora el arranque oficial del movimiento de independencia.