México | Los anteojos de Baskerville por Carlos Lara Las ingenuidades de Sabina y Calderón La Secretaría de Gobernación descartó la insinuación y dijo que el cantante se había expresado respetuosamente. Además, el titular de la dependencia dejó claro que el Presidente Calderón tiene un gusto especial por la música de don Joaquín Sabina Por: EL INFORMADOR 17 de abril de 2010 - 03:25 hs Al inicio de la semana, el poeta español Joaquín Sabina declaró que Felipe Calderón había sido muy ingenuo al plantear la batalla contra el narcotráfico. Parece mentira, dijo, que no supiera que la Policía estaba infiltrada a sueldo, y que esta guerra no la podía ganar él ni nadie. Algunos medios se preguntaron si el Gobierno aplicaría el 33 constitucional al también cantante; ese decrépito artículo que faculta al Presidente de la República para sacar del país “inmediatamente y sin necesidad de juicio previo, a todo extranjero cuya permanencia juzgue inconveniente”, particularmente por inmiscuirse en asuntos políticos. La Secretaría de Gobernación descartó la insinuación y dijo que el cantante se había expresado respetuosamente. Además, el titular de la dependencia dejó claro que el Presidente Calderón tiene un gusto especial por la música de don Joaquín Sabina, “ya se encontrarán y ahí se dirán lo suyo.” Por el momento el sabinista del Presidente ha preferido explicar al poeta, a través de una epístola, en qué consiste su estrategia contra el narcotráfico. Joaquín Sabina es igual de provocador que Bono, el vocalista de U2; es más, existen algunos paralelismos entre ellos. Ambos, como muchos rockeros, se inspiraron en Bob Dylan, los dos conciben la música como un medio para transmitir emociones, sentimientos y mensajes; a ambos les atrae la idea de incidir en la política; les apasiona dar declaraciones polémicas y visitar mandatarios para intercambiar impresiones; ambos parecen haber heredado la estafeta de Gandhi, son una especie de “groupies” de la justicia. Cada uno es “abajofirmante” de sus propias causas y a su manera. Quizá sea la religión uno de los puntos divergentes entre ellos. Por Javier Méndez Flores (En carne viva), sabemos que Sabina ha estado en terrenos de ETA con el bombín bien puesto, gritando a mitad de un concierto, algo así como ¡ya dejen de matar gente, cab...! Por Michka Assayas (Conversaciones con Bono), sabemos que Bono ha estado amenazado de muerte en ciudades como Arizona, algo que en su momento preocupó al FBI. Pedían a la banda cancelar el concierto, o bien, no cantar “Pride (In the name of love)”. Con sus gafas bien puestas, Bono cerró los ojos y cantó la canción, al abrirlos, el bajista de la banda, Adam Clayton, estaba delante de él, protegiéndole. Ambos cantantes son importantes roles de influencia para un gran sector de la población mundial, sin embargo en algo tiene razón el Presidente Calderón al responder a Sabina, en que lo verdaderamente ingenuo es suponer que los delitos del crimen organizado se resolverán si el Gobierno federal no hace nada. Ésta, al igual que la batalla contra la obesidad, requiere de la intervención decidida del Gobierno federal, más ahora que los legisladores la han comenzado con una reforma ingenua a la Ley General de Salud. Temas Felipe Calderón Los anteojos de Baskerville Joaquín Sabina Tertulia Lee También Detienen a hijo de Alfredo Beltrán Leyva en una Sinaloa violenta Exclusivo lanzamiento de Neruda, el nuevo desarrollo y socio de Punto Sao Paulo Retratos de reyes de España desatan polémica por reciente desastre en Valencia Emma Coronel, invitada de honor en Gala de Miss Guatemala Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones