La prudencia de Josefina

Las recientes declaraciones de Josefina Vázquez Mota muestran el deseo de la panista por coexistir dentro de las más elementales normas de urbanidad política con las otras bancadas.

Por eso se muestra prudente en sus declaraciones y aclara que se escucharán cada una de las voces que se pronuncien en torno a la discusión sobre el plan económico.
Incluso, en el caso concreto de la propuesta de Andrés Manuel López Obrador, explica que los grupos que le son afines en la Cámara de Diputados podrán presentar el proyecto del tabasqueño.

Josefina Vázquez Mota es consciente de la actualidad, se sabe en inferioridad numérica y carente de operadores políticos que puedan compensar la gran orfandad en que se encuentra como coordinadora de una disminuida bancada panista en la Cámara de Diputados.

El escenario imaginario que le plantearon cuando le ofrecieron la diputación federal y la posibilidad de coordinar a sus compañeros de legislatura era distinto al real.
En la imaginaria panista se planteaba una diputación, cuando menos, similar a la que coordinó Héctor Larios y un panismo triunfante con un importante número de comisiones, las más importantes.

Las condiciones se fueron modificando durante la campaña electoral y el despertar del 6 de julio fue terrorífico, con una mermada representación blanquiazul y el abandono del presidente del partido –Germán Martínez Cázares-- de la dirigencia nacional.

El botón de pánico fue encendido y se hizo necesario el cierre de filas alrededor de Josefina, donde entró en la negociación la presidencia de la Mesa Directiva, destinada al principal obstáculo en la carrera de la ex secretaria de Educación Pública.

Y aunque se realizó un ajuste en las posiciones y el nuevo presidente del PAN, el también diputado federal, César Nava Vázquez se hizo a un lado para que Josefina asumiera en plenitud el control de su bancada, la realidad es que la coordinadora fue enviada a la guerra sin fusil.

Las armas con las que llegó a la Cámara de Diputados son de calibre menor ante las de alto poder con las que cuentan sus adversarios.

Esta primera etapa ha sido difícil para la también ex secretaria de Desarrollo Social y en la lucha por las comisiones no parece tener los argumentos necesarios para obtener una buena representatividad en las presidencias de las mismas.

Pero no, el problema no consiste en que a Josefina le falte experiencia política o capacidad de negociación, tampoco que ella en lo personal esté coja en los debates y en la polémica, sino que la bancada que encabeza tiene pocas opciones importantes.

Esto se refleja en los debates y en las discusiones ante el pleno, donde los panistas se han visto parcos ante polemistas de mayor empaque, especialmente los del PRD y PT.

Pocos son los nombres de personajes de importancia que puedan entrar en el rejuego de la disputa de las comisiones o que puedan debatir al tú por tú con sus colegas de otras fracciones.

Uno de los casos más representativos es Roberto Gil Zuarth, representante de su partido ante el IFE y acostumbrado a polemizar y refutar argumentos, pero quien fue barrido por Porfirio Muñoz Ledo durante uno de los tantos debates en los que gusta participar el ex priista, ex perredista, ex parmista y ex colaborador del Gobierno de Vicente Fox.

Sarcástico como es, Porfirio tachó de muchachito inexperto y desconocido al que está considerado como una de las cartas más importantes de Acción Nacional en la presente legislatura.

Igual sucede con Francisco Ramírez Acuña, quien le disputó, sin éxito, la coordinación de la bancada a Josefina y fue recompensado con la presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados por el primer año, el que se muestra como un gran desconocedor del reglamento y comete frecuentes yerros que son maximizados por sus adversarios.

Ante esta situación, Josefina prefiere mostrarse con la prudencia que mencionamos, aunque mantiene la firmeza de sus convicciones y busca los operadores que le puedan auxiliar en una tarea que parece titánica por tener que desempeñarla en gran forma ella misma.

Los primeros grandes retos se encuentran a la vuelta de la esquina y consisten en obtener el suficiente número de presidencias de comisiones, pero no de las del montón, sino de las importantes, donde Hacienda ya parece tenerla negociada.

El segundo reto será sacar el proyecto económico lo más apegado a la propuesta original enviada por el Ejecutivo, aunque el planteamientos parece caerse en los puntos primordiales.

Por lo pronto, tiene otra tarea más inmediata y es la de salvar de la quema a sus ex compañeros de gabinete que se presentan en la LXI Legislatura durante la glosa del Informe presidencial.

*Totalmente en contra de la desaparición de la secretaría de Turismo se mostró el diputado priista Carlos Manuel Joaquín González, quien recordó que la gestación de la misma tardó 100 años, desde que se concibió por primera vez la planeación, regulación y fomento del turismo como actividad económica en México.

Procedente de Quintana Roo, una Entidad netamente turística y empapado del tema por su vinculación con el ramo en que su familia se desempeña desde hace décadas, Joaquín González recalcó que si se quiere adelgazar la estructura del Gobierno federal no se le deben amputar los brazos, sino proceder a un régimen dietético.

*Finalmente, el gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, inauguró la vialidad elevada que corre desde el desaparecido Toreo de Cuatro Caminos y Lomas Verdes, que vendrá a aliviar esa vía rápida donde se producen grandes congestionamientos de tránsito.

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