La política y los partidos, enemigos del desarrollo sustentable

Hace más de 10 años que se propuso un sistema para lograr la creación del Instituto Metropolitano de Planificación, buscando el desarrollo sensato y sustentable de la “Gran Guadalajara”.

Esto después de haber caído y aceptado los grandes errores en que por causa de los Gobiernos y nosotros, ha habido una degeneración palpable que hemos sufrido, de la “Gran Guadalajara”.

Ahora, aunque tenemos que cargar con las consecuencias de los graves errores y la existencia de los municipios y su independencia, lo que nunca debió haber pasado en esta área, se abre una rendija de luz y de esperanza al aceptar los presidentes municipales la posible creación del Instituto Metropolitano de Planificación. Este Instituto podría poco a poco revivir a nuestra metrópoli, para que produzca mucho mejor calidad de vida.

Las metas de este Instituto Metropolitano de Planificación serían, si al final es aceptado por los políticos:

• Proponer las bases sectoriales y de planificación o de planificación regional y las políticas de desarrollo y las herramientas de diseño en orden de implementar esas políticas.

• Reunir suavemente la investigación en un Centro de Estudios de Desarrollo Regional, apoyado por un cuerpo de expertos interdisciplinario.

• Participación, consultoría e investigación de diferentes autoridades.

• Alcances de actividades.

• Un concepto global de planeación: master plan, basado en un esquema de universo verde, un plan de desarrollo regional para turismo, una política de planeación urbana, zonas urbanas libres, etc.

• Desarrollo ambiental y sustentable: diferentes ambientes, cinturones verdes, reservas naturales, defensa de los recursos y patrimonios naturales.

• Población: educación y entrenamiento, salud, descanso, cultura, deportes, etc.

• Economía: creación de empleos, ordenamiento territorial, financiamiento de entidades locales gubernamentales, etc.

• Transporte, vialidad y criterios básicos de movilidad urbana: prioridades para los peatones, recuperar y desarrollar áreas verdes y públicas para el gozo de los habitantes.

Lo que he mencionado anteriormente es solo una parte de la esencia del Plan Metropolitano de Planificación. Lo importante es que el equipo de técnicos multidisciplinarios quede libre de influencias y caprichos políticos y defina la forma prioritaria del desarrollo de la metrópoli. Que los municipios representados por sus ayuntamientos solamente se encarguen de ejecutar las políticas y formas de desarrollo a través de las herramientas que les marca el Instituto Metropolitano.

La política y los partidos, enemigos del desarrollo sustentable

Así estaría plenamente coordinado el desarrollo de los municipios que integran la “Gran Guadalajara” y dejaría de ser en lo que se está convirtiendo, una mancha urbana sin personalidad, dispersa y agresiva con sus habitantes.

Y algo además que es positivo, es que Miguel Castro, presidente de San Pedro Tlaquepaque, que tiene la sensibilidad suficiente y ha sido dos veces presidente del municipio, le han encargado los presidentes municipales de la metrópoli y el Gobierno del Estado, que logre la consolidación de este Instituto, que sería la salvación de los habitantes de la “Gran Guadalajara”.

Pero para que eso suceda, es indispensable que los políticos realmente no se metan en el universo técnico que es crucial para nuestra metrópoli.