La cohesión social en México

Cuando nos preguntamos el porqué de los problemas y retos que estamos viviendo en nuestro país, nos debemos de enfocar a encontrar las causas de lo que pasa y no en sus consecuencias. La inseguridad en la que vivimos, la falta de vida institucional, el bajo crecimiento económico, entre muchos otros retos, no los debemos de ver como problemas en sí, sino como efectos de un problema.

De acuerdo a diversos estudios, una de las principales causas de este tipo de problemas es la falta de cohesión social de un país, entendiendo a esto como la baja capacidad de una sociedad para asegurar el bienestar de todos sus miembros, al minimizar las disparidades y evitar la polarización.

Una comunidad con un alto grado de cohesión social cuenta con los elementos necesarios para su crecimiento, para fortalecer su competitividad, aumenta su capacidad de resistencia a los choques económicos, incrementa su potencial de innovación tecnológica y mejora su gobernabilidad democrática.

Por otro lado, un pueblo que tiene una baja cohesión social, limita su capacidad de crecimiento, puede generar sentimientos de injusticia, violencia y conflictos, así como problemas de gobernabilidad, todo lo cual fomenta inestabilidad, falta de rumbo y ausencia de desarrollo.

Podemos hablar de cinco pilares de la cohesión social, elementos que se deben de promover para que una comunidad incremente su potencial de desarrollo y ataque los síntomas que comentamos al principio de esta columna.

El primer pilar es la educación, entendiéndola no sólo con el número de alumnos inscritos en el sistema, sino con la calidad de esa educación, ya que ésta aporta las herramientas para la competitividad de la sociedad.

La salud es el segundo pilar, en donde podemos hablar del acceso a la atención médica pero también de la alimentación, las sanas prácticas de higiene, evitar los excesos y en general la capacidad de una sociedad de vivir una vida sana.

Un importante mecanismo de integración social en nuestras sociedades es el empleo, el tercer pilar, ya que no sólo genera acceso a los recursos, además, las condiciones dignas de trabajo favorecen las redes de referencias y a la protección social.

Una administración de la justicia con capacidad de respuesta, independencia, eficiencia y sensibilidad hacia los grupos tradicionalmente desprotegidos, es el cuarto pilar para lograr la cohesión en una sociedad.

Finalmente, el quinto elemento para que un grupo de individuos se pueda llamar una comunidad se llama fiscalidad suficiente, ya que nada de esto es posible si el Estado, que es un factor determinante en los esfuerzos de cohesión social, no cuenta con los ingresos suficientes para financiar la inversión social, de una manera eficaz.

Estos cinco pilares de la cohesión social constituyen los sectores clave a partir de los cuales es posible atacar las causas de nuestros problemas, y así tomar el rumbo del crecimiento y desarrollo sostenible. ¿Será muy difícil que nos pusiéramos de acuerdo en estos aspectos?