La CDHF analiza uso de pistolas eléctricas

CIUDAD DE MÉXICO.- El ombudsman, Luis González Placencia, dijo que el uso de pistolas de descarga eléctrica en personas que estén bajo los influjos de droga o el alcohol, o que tienen alguna enfermedad, podría ser un riesgo si no se toman las medidas necesarias.

El organismo defensor acompaña el uso de armas no letales, dijo, pero considerando tres aspectos: la capacitación del personal que las utiliza y tener el control.

“Es importante que se cuente con los mecanismos necesarios para establecer en qué condiciones fue usada el arma, cuántas veces, quién la utilizó y en qué personas”.

En tercer lugar, pidió considerar el daño colateral que puedan tener, particularmente en casos en donde hay personas que están bajo los influjos de alguna droga o de alcohol, o bien que tienen algún padecimiento. “Con la descarga eléctrica se puede derivar incluso en la pérdida de la vida”.

Las también llamadas tasers son objeto de análisis por parte de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), pero aún esa dependencia no ha enviado la información necesaria para que la Comisión de Derechos Humanos local (CDHDF), dé su punto de vista al respecto, como se tiene contemplado.

Se solicitará la opinión de la Secretaría de Salud, Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal y Amnistía Internacional. El presidente de la CDHDF indicó que será con el Consejo de la comisión que se tome la posición sobre estas armas.

La Procuraduría capitalina informó que entre sus planes se encuentra la adquisición de por lo menos 200 de estos aparatos para el próximo año.