‘‘Greg’’, político ejemplar

Es una soberana tontería, por decirlo suave, que la Secretaría de Gobernación diga que “no existe fondo político” en la detención del candidato del Partido de la Revolución Democrática ( PRD) al Gobierno de Quintana Roo, Gregorio Sánchez, motejado como “Greg”. ¿Por qué es una tontería?

Porque no hay nada más político que acusar de criminal a un político al que se lleva a prisión, en tanto se ostenta legalmente como candidato a uno de los puestos de elección popular más importantes del país; el de gobernador estatal. Si eso no es político, entonces podemos concluir que la Secretaría de Gobernación es un circo en donde predominan los payasos, los trapecistas, cirqueros y domadores de fieras.

La detención de “Greg” resulta un típico acto político, en tanto una orden judicial lo saca de la contienda por el Gobierno de Quintana Roo; en tanto deja sin candidato a los simpatizantes del PRD, y en tanto esa orden judicial altera el resultado electoral. Lo sorprendente es que sea Gobernación la dependencia que patina de tan lamentable manera.

Por lo pronto —y a partir de la torpeza como procesó Gobernación la detención de “Greg”—, nadie creerá que ese pillo motejado como “Greg” sea eso, un pájaro de cuenta, sino que gracias a los “genios” de Bucareli, el ex alcalde de Cancún ya se convierte no sólo en héroe de la política, sino en un político ejemplar. ¿Por qué ejemplar? Poca cosa.

Porque pertenece a un clan familiar y empresarial en el que existen secuestradores, integrantes del crimen organizado y ladronzuelos que hoy purgan condenas en diversas prisiones. Porque además de ese “ejemplar” curriculum, tiene un viejo historial de defraudación, espionaje, presuntos vínculos con narcotraficantes y, por si fuera poco, se le persigue por enriquecimiento inexplicable. En realidad, “Greg” Sánchez y su clan familiar y empresarial son prototipo del político moderno.

Si “Greg” militara hoy en el Partido Revolucionario Institucional (PRI), no sorprendería a muchos su historial. Pero su militancia en el PRD —y la feroz defensa que de su causa hacen Los Chuchos—, confirma que izquierda y derecha mexicanas, que amarillos y azules se han convertido en estercoleros de lo peor de la política y el poder. Cuando esos pillos asaltaron al PRD y al Partido Acción Nacional (PAN), y cuando esos partidos se convirtieron en la casa de la escoria política, el PRI se alzó como el partido ejemplar, el titán de la política.

“Greg” simboliza al político ejemplar de la izquierda; el fracaso del sueño de toda una generación que apostó por la izquierda.

En el camino

Por cierto, que alguien informe a Los Chuchos, que Gómez Mont no se manda solo.