Gobernadores rechazan aportar dinero para rescate pesquero

CIUDAD DE MÉXICO.- Los gobiernos de Sinaloa, Oaxaca y Campeche, estados que concentran la mayor flota camaronera del país, rechazaron la propuesta de legisladores federales y de la Comisión Nacional de Pesca (Conapesca) para que las 17 entidades con litoral absorban el costo del diesel marino y aporten a un fondo para el rescate pesquero.

El mandatario de Sinaloa, Jesús Alberto Aguilar Padilla, calificó de salida fácil e irreal la exhortación de colaborar con 30 millones de pesos al fideicomiso Promar. Expresó que los estados no tienen ingresos suficientes para contribuir en ese sentido.

La política de la pesca es una atribución de la Federación, por lo que a las entidades federativas les corresponde articular la gestión, generar políticas de desarrollo de los campos pesqueros y su entorno.

En Oaxaca, el secretario general de Gobierno, Jorge Toledo Luis, subrayó que el abandono del sector pesquero es competencia del Gobierno federal, por lo que a éste le corresponde afrontar la situación.

El presidente de la Unión de Productores de Alta Mar de Oaxaca, Anselmo López Villalobos, reprobó que se pretendan “lavar las manos y trasladar el problema a los estados”.

El Gobierno de Campeche, que encabeza Jorge Carlos Hurtado Valdez, no dará subsidios para que las protestas de pescadores cesen. Sin embargo, el mandatario invitó a los armadores a abandonar sus pretensiones de tomar las instalaciones de Pemex.

Dijo que apoyará a los pescadores hasta que se detengan los incrementos al combustible.
La gobernadora yucateca, Ivonne Ortega Pacheco, prometió revisar su presupuesto para canalizar 30 millones de pesos al fideicomiso, aunque lo ideal sería que el Gobierno federal intervenga para que congele el precio del diesel marino.
Aseguró que no dejará a los pescadores “a su suerte”.

Exhorta Congreso al Ejecutivo a disminuir precio del diesel

La Comisión Permanente del Congreso de la Unión aprobó por unanimidad el punto de acuerdo en el que se exhorta al titular del Ejecutivo federal a tomar medidas que permitan disminuir el precio del diesel, para que el autotransporte enfrente la crisis y aumente su producción este año.   
En su intervención, el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, César Duarte Jáquez, señaló que el uso de diesel en los transportes de carga crea un impacto económico importante en todos los sectores.  (Agencias)

SOBRE EL TEMA

Sector en problemas

Bajar costo del energético
El presidente de la Cámara de Diputados, César Duarte Jáquez, consideró necesario que baje el precio del diesel, pues es un combustible esencial para el desarrollo económico, por lo que demandó darle la importancia que merece al tema, y una solución integral a la problemática de la flota camaronera.

El subsidio es erróneo, dice Sarukhán
El doctor José Sarukhán Kermez aseguró que “ha sido un error” el subsidio del Gobierno federal al diesel marino. Esos apoyos no se han utilizado adecuadamente, han sido “subsidios perversos”. Sin embargo, consideró que ese subsidio no debe ser eliminado de golpe, sino informar a los población la mejor forma de utilizarlo.

Descartan pronta solución
El secretario de la Cámara Nacional de la Industria Pesquera y Acuícola, Humberto Becerra, aseveró que no se prevé una pronta solución al paro, toda vez que no se ha respondido a las demandas del sector, que suma adeptos porque afecta a todos los integrantes de la cadena productiva.   

Yucatecos firmes en movimiento
El presidente de la delegación de la Cámara Nacional de la Industria Pesquera (Canainpes), Mario Uc, dijo que el paro de pescadores continuará en tanto se mantenga el precio del diesel. Hoy, Yucatán cumplirá una semana de sumarse al paro nacional, denominado Cero Pesca 2009, con 500 embarcaciones y tres mil pescadores. (Agencias)

CRÓNICA

“Ya ni los pelícanos se acercan”

Con el cabello cano que se enmaraña con el viento, don Elías Chincoya advierte desde el estribor de la embarcación, anclada en Salina Cruz, Oaxaca: “Mire, con el paro, ya ni los pelícanos se acercan al muelle”.

A 21 días de que su barco camaronero “Santa Cruz XI”, que compró en un millón 200 mil pesos hace más de cinco años, permanece atado al muelle, las aves grises de pico largo desaparecieron por falta de comida.

“Andan igual que nosotros, buscando la comida porque aquí nos estamos muriendo de hambre, pero a pesar de todo, estamos firmes en la lucha hasta conseguir que baje el precio del diesel”, comenta el hombre de 60 años de edad y 40 de pescador.

La retahíla de don Elías Chincoya no halla obstáculos. Acostumbrados a los gritos desde estribor a babor para hacerse oír entre el ensordecedor ruido de las máquinas en alta mar, aquí también grita ante el fuerte viento.
“Parece cosa de risa, pero en lugar de llevarle el dinero y el pan a la familia, ahora les quitamos lo poquito que tienen en casa”, dice preocupado. “No es asunto de risa, eh, es un problema grave que debe solucionarse pronto”.
-- ¿Están cansados?, ¿qué dicen sus compañeros?

-- “Estamos más firmes que el dólar y ¡vamos a luchar hasta lo último!. Si dicen que hay que ir a tomar la refinería (“Antonio Dovalí Jaime”), pues nos vamos, si dicen que a cerrar carreteras, pues ahí estaremos. Lo que importa es que soluciones el problema”.

El buen ánimo de don Elías Chincoya es sorprendentemente ilimitado a pesar de que ayer hubiera cumplido un viaje de 21 días con dos toneladas de camarón en la bodega de su vetusta embarcación, hoy atada junto al barco “Alejandra Fabiola”, donde desayunó.

Confiesa que en estos días del paro, ha tratado de hacer “unos pequeños arreglos” a su embarcación. “Por ahí le metemos manos a las redes, porque si no hay dinero para comer, menos tengo para hacer reparaciones fuertes”.
La única preocupación de ese hombre que está a cargo de ocho miembros de su familia, “entre hijos, nueras, nietos y mi esposa”, es una fuerte deuda que arrastra desde que comenzó la temporada de pesca en septiembre. “Ojalá y me esperen porque no soy el único endeudado. Todos mis compañeros pidieron prestado para salir a la pesca, comprar víveres y sobre todo meterle 30 mil litros de diesel al barco”.

Con su “Santa Cruz XI” cargado aun con seis mil litros de diesel, don Elías es de los pocos que deambulan por el muelle. “Otros amigos están atentos a las asambleas de información, pero andan por ahí en busca de chamba como albañiles”.