CIUDAD DE MÉXICO (24/AGO/2016).- El subsecretario de Población, Migración y Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación (Segob), Humberto Roque Villanueva, expresó que la Iglesia está en todo su derecho de convocar a una marcha, misma que se efectuará en defensa del "matrimonio natural", pero pidió que no se generen discursos de odio."No hay infracción de parte de la Iglesia cuando expresan opiniones diversas", dijo. “Sí es válido (el realizar una manifestación), en la medida en que se corresponda con todas la normas y criterios que en cada región se dicte sobre cómo deben realizar las manifestaciones, claro que tienen ese derecho”, continuó.Ante la polémica sobre la iniciativa de matrimonio igualitario, que el Ejecutivo envió a la Cámara Baja, Roque Villanueva, sostuvo que la Iglesia no se podría oponer a una legislación, pero apuntó que la legislación aún no existe por lo que es válido la expresión de opiniones diversas y contrarias.“La Iglesia no ha utilizado un lenguaje agresivo, solo está en defensa al concepto de la familia”, aseguró el subsecretario en entrevista con Luis Cárdenas en MVS.Consideró entonces que es válida la marcha convocada por la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y asociaciones agrupadas en el Frente Nacional por la Familia alistan movilizaciones para el mes de septiembre en la Ciudad de México y en los estados del país.“Sí es importante reconocer que en la convocatoria (de movilización), hasta donde yo pude detectar no hay un lenguaje agresivo, hay un mensaje de sí a la defensa de la familia”, explicó.Añadió que la intención en Gobernación es que esta situación no escale a discursos de odio y pidió a la Iglesia entender “un poco” los cambios antropológicos de la sociedad actual.Hoy, El Universal publicó una entrevista con Hugo Valdemar, vocero de la Arquidiócesis de México enfatizó que la publicación católica Desde la Fe ha actuado de manera adecuada, ya que los artículos publicados en semanas pasadas “son muy serios, muy cuidados y no ofenden a nadie”, por lo que rechazó que se llame al odio: “Es un chantaje que no aceptamos”.