Gobernación cancela diálogo con electricistas por vandalismo

CIUDAD DE MÉXICO (12/ABR/2011).- Tanto el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubón, como senadores y la Secretaría de Gobernación reprobaron los hechos violentos suscitados en la manifestación de los ex trabajadores de la compañía de Luz y Fuerza del Centro (LyFC). Ebrard aseguró que en la capital no se permitirán actos de violencia como el que se registró ayer por la mañana por parte de integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), que dejó 14 lesionados.

Por la tarde se registraron cuatro explosiones en distintos registros eléctricos subterráneos en el Centro del Distrito Federal, que sólo provocaron emanaciones de humo, sin que resultaran personas lesionadas.

De acuerdo con reportes de la Secretaría de Protección Civil del Distrito Federal, los estallidos se registraron en los cruces de las calles Isabel La Católica y República de El Salvador, y en El Carmen y San Ildefonso.

Estos incidentes fueron atendidos por elementos del Cuerpo de Bomberos y de Protección Civil, así como de la CFE, para reparar las instalaciones eléctricas.

El Gobierno federal estableció que no habrá negociación con el SME a través de actos de presión vandálicos y cobardes como los que llevaron a cabo en las inmediaciones del edificio de la extinta LyFC, ubicado en Circuito Interior y Marina Nacional.

“El orden, la observancia de la ley y el respeto son condiciones indispensables de un diálogo constructivo”, indicó la Secretaría de Gobernación (Segob), que encabeza José Francisco Blake Mora.

El Presidente Felipe Calderón afirmó que el 10 de octubre de 2009 liquidó Luz y Fuerza del Centro (LyFC), porque sólo estorbaba al crecimiento de la economía y representaba un cuello de botella para las empresas que requerían de electricidad.

En los lamentables hechos de ayer, entre los heridos se encuentran dos periodistas, el reportero de Radio Fórmula Juan Carlos Santoyo, y el fotógrafo del diario La Jornada, Marco Paleas, quienes fueron atacados mientras cubrían la protesta.

Senadores del PAN, PRI y PRD lamentaron y condenaron la actitud de miembros del SME, quienes protagonizaron acciones violentas en el Distrito Federal. La CFE interpuso una serie de denuncias contra quienes resulten responsables de las agresiones referidas.

José Ángel Ávila Pérez, secretario de Gobierno del Distrito Federal, afirmó que se aplicará “todo el peso de la ley” a los detenidos que fueron presentados ante el Ministerio Público.

“En este caso, como en cualquier otro donde se llegue a alterar la seguridad pública, el Gobierno actuará con todo rigor”.

En el conflicto participaron cerca de mil 500 personas, presuntamente integrantes del SME, y se desplegaron 600 elementos del Cuerpo de Granaderos y 100 de Vialidad para controlar la situación.

Ávila Pérez destacó que el Gobierno capitalino ha sido respetuoso de la libre manifestación de las ideas, pero que los actos de ayer fueron hechos violentos que no responden a la libre expresión.

Martín Esparza, dirigente del SME, sostuvo que la protesta y los actos que realizaron son una muestra de las acciones que emprenderá esta organización para reclamar su derecho a reintegrarse a la vida laboral.

FICHA TÉCNICA
Rechazan imputaciones y lamentan violencia

La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) negó categóricamente las afirmaciones del dirigente del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Martín Esparza, quien aseguró que desde las instalaciones del alto tribunal se lanzaron artefactos de gas lacrimógeno para repeler la manifestación de sus agremiados en el Zócalo capitalino.

Humberto Moreira, líder nacional priista, lamentó la violencia que se produjo ayer entre integrantes SME y granaderos de la Policía capitalina, en la sede principal de la CFE y dijo que se debe evitar la confrontación. Exigió al Gobierno federal y en específico al secretario del Trabajo, Javier Lozano, asumir una mayor actitud de “conciliación”.